EL SALVADOR
El partido Arena logra 33 diputados, dos más que el FMLN; además seguirá gobernando la alcaldía de San Salvador y arrebata municipalidades en manos del Frente como Soyapango, Mejicanos, Apopa, Ilopango, San Martín y Ayutuxtepeque, entre otras.
El partido Alianza Republicana Nacionalista se impuso en las elecciones legislativas del pasado domingo 11 de marzo en El Salvador y retiene la alcaldía de la capital.
ARENA obtuvo 33 diputados , el FMLN 31; el partido Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA) se consolida como tercera fuerza política con 11 diputados y el resto de diputados se reparten entre Concertación Nacional (CN), que obtiene seis, y Cambio Democrático (CD) y Partido de la Esperanza (PES) con un diputado cada uno, totalizando 84 legisladores.
El mayor vuelco se da en el departamento de San Salvador, en el que el FMLN pierde tres diputados en comparación con las elecciones de 2009 (de 12 a 9) y ARENA ganaría uno (de 10 a 11).
La irrupción de GANA, un partido de nueva formación escindido de ARENA, no habría afectado a este partido, sino al FMLN y sobre todo a CN y a PES, que entre ambos perderían 8 diputados.
En cuanto a la Alcaldía de la capital, la tendencia es que el actual alcalde, el arenero Norman Quijano, estaría obteniendo alrededor de un 60 por ciento de los votos. Su máximo oponente, el candidato del FMLN Jorge Shafick Handal, se quedaría con alrededor del 30 por ciento.
Quijano compareció en la sede del Consejo Ejecutivo Nacional (Coena) de ARENA y celebró su victoria y la de su partido con aire de líder del partido. “Recibimos este triunfo con humildad, alegría y agradecimiento al pueblo”, comenzó diciendo Quijano.
Después dirigió su dardos hacia el partido adversario afirmando que “los salvadoreños hemos derrotado las campañas sucias, llenas de calumnias, la campaña del FMLN financiada por AlbaPetróleos”. Y finalmente se ocupó de su propio partido, diciendo que ha superado el momento crítico que vivió tras perder el poder en 2009 volviendo a ser la primera fuerza política de El Salvador.
“No podemos volver a permitir que un grupo de traidores y corruptos se vuelvan a tomar nuestro partido”, dijo Quijano en referencia a los diputados que se escindieron de ARENA para formar GANA, la mayoría próximos al ex presidente Elías Antonio Saca.
En San Miguel se impuso nuevamente el en esta ocasión candidato de GANA y actual alcalde Wilfredo Salgado, con más del 46 por ciento de los votos, 14 puntos por encima del candidato del FMLN, Ricardo González.
Impresionante recuperación de Arena
El triunfo de Arena muestra una recuperación impresionante de la derecha. Es lo primero que salta a la vista, puesto que en enero de 2009 había perdido la bancada mayoritaria en el parlamento (de 84 diputados). Entonces, el Frente Farabundo Martí -que combatió al Ejército durante la guerra civil que asoló el país durante los años ochenta y hasta 1992- obtuvo 35 legisladores, y Arena 32. En las municipales las fuerzas quedaron parejas. Pero en marzo de ese mismo año sobrevino la debacle conservadora en las presidenciales: la derecha perdió por primera vez en 20 años y la izquierda exinsurgente conquistó la presidencia. Unos meses después Arena sufrió una fractura interna y perdió 14 diputados que formaron un nuevo partido al que denominaron Gran Alianza de Unidad Nacional (Gana).
En vista del pobre pasado reciente de Arena, su victoria demuestra que la derecha salvadoreña es capaz de reorganizar rápidamente sus fuerzas con el objetivo de recuperar el gobierno central. Y la izquierda teme no poder retener el poder que tanto tardo en lograr. “Sí, definitivamente ha sido un golpe duro en San Salvador y en las alcaldías aledañas, que nunca nos imaginamos que íbamos a perder”, dijo a EL PAÍS Wilfredo Zepeda, una veterano militante del FMLN y asesor de su dirección política. “Hoy nos toca hacer una reflexión profunda y buscar las explicaciones exactas de lo que ha sucedido”.
FMLN acepta que la población no está de acuerdo con sus políticas
La dirigencia del FMLN acepta que los resultados negativos que le dejan las elecciones al partido son fruto del desacuerdo de la población con las políticas implementadas por el gobierno y asegura que buscaran acercamiento con el presidente Mauricio Funes.
El domino marca “un antes y un después”, según Roberto Lorenzana, porque aunque para el partido las políticas que han impulsado son buenas los resultados de las elecciones dicen que la población no está de acuerdo con ellas.
Roberto Lorenzana y José Luis Merino, hablan de una evaluación interna luego de tener los resultados oficiales de las elecciones del domingo, para determinar a ciencia cierta por qué perdieron votos en el gran San Salvador.
Descuerdo de la población
El subsidio al gas, el cambio en las tarifas de la electricidad y del agua potable, son los puntos del desacuerdo y este se centra en la zona urbana. Sin embargo no aceptan del todo este desacuerdo, ya que en la zona rural –dice Lorenzana- la cantidad de votos que obtuvo el FMLN fue mayor a la de las elecciones anteriores y esto se debe a que las políticas implementadas son las más acertadas.
Pero para ellos no toda la responsabilidad es del partido, ya que si las políticas sociales en las que se basa el gobierno no crecen, es porque algo ha fallado en la administración y porque falta más efectividad en las políticas económicas.
“Hay que poner atención en esto, los programas no crecen si no hay éxito en la política económica y esto impide también que el país crezca”, explica Lorenzana.
Relación con el presidente
Para los dirigentes de esa evaluación determinarán también si es necesario hacer cambios al interior y en la dirigencia del partido, pero ahora lo que pueden determinar es la necesidad de mejorar las relaciones con el presidente Mauricio Funes.
“Tenemos una relación de socios, juntos ganamos, juntos vamos a terminar este gobierno y juntos vamos a ajustar, lo que haya que ajustar. Donde sea necesario ajustar cambios, vamos a ajustarlos”, señala Merino.
“Esperamos que la relación con el presidente mejore, que se fortalezca, que se intensifique la cooperación y que las políticas públicas lleven y conduzcan a algunas modificaciones”, agrega Lorenzana.
¿Cambios en la dirigencia?
A pesar que se habla de evaluaciones internas en el partido a nivel nacional, los dirigentes no consideran la posibilidad de hacer una renovación en los mandos.
Según Lorenzana eso depende de los tiempos políticos del partido y se hace en base a las consultas internas con las bases y la militancia.
“La dirección del partido tiene sus mecanismos institucionales y esos van a hacer en su momento, tenemos tiempos políticos. El FMLN tiene un período de rotación de la dirigencia, estamos iniciando el proceso, estamos abiertos a lo que digan las bases”, dice. (Con datos de ContraPunto)
