DEPORTES
El atleta noruego, Alexander Dale Oen, falleció el lunes de un paro cardíaco en un centro de entrenamiento en Arizona, Estados Unidos. Oen, de 26 años, campeón del mundo de natación en 100 metros braza y gran esperanza de medalla en los próximos Juegos Olímpicos de Londres, se desplomó en la ducha después de un entrenamiento, y todos los intentos de reanimarlo fueron en vano.
El médico del equipo noruego, Ola Rønsen, dijo que en los entrenamientos previos Oen había causado una muy buena impresión. El nadador, que el próximo 21 de mayo iba a cumplir 27 años, logró en julio de 2011 en Shanghai en los 100 metros braza el primer título de su país en un Mundial.
En Pekín 2008 se colgó la medalla de plata. “Oen murió de un ataque al corazón. Es el día más triste de la historia de la natación noruega”, anunció el presidente de la Federación Noruega, Per Rune Eknes.
La presea de oro en China la recibió con lágrimas sólo tres días después de que Anders Behring Breivik asesinara de 77 personas en Noruega. “El himno, la bandera, he pensado en todos los que estaban en casa. Todos los noruegos debemos estar muy unidos”, dijo tras unos días en los que tuvo que afrontar el drama a la distancia y las preguntas constantes de los periodistas, y que finalmente acabaron con un triunfo.
“Debemos seguir, no podemos permitir que ese tipo arruine nuestro futuro”, animó a sus compatriotas. El primer ministro de Noruega, Jens Stoltenberg, expresó su pesar a través de twitter: “Alexander Dale Oen era un gran deportista de un pequeño país. Mis pensamientos están con su familia y sus amigos”.
El entrenador de Oen, Stig Leganger-Hansen, habló con el diario ‘Bergens Tidende’ sobre la muerte de su pupilo: “Es completamente increíble, era una persona maravillosa, cariñosa. El deporte ahora da igual”. La estrella noruega del esquí alpino Aksel Lund Svindal también se expresó en twitter: “Parece mentira que Alexander Dale Oen no esté ya más entre nosotros”.
Según informan los medios noruegos, los compañeros de equipo se extrañaron que Oen estuviera tanto en la ducha tras el entrenamiento de la noche del lunes en Flagstaff, en el Estado de Arizona y situada a 2.130 metros de altitud. Cuando no reaccionó a las llamadas que le hicieron en la puerta, la echaron abajo y lo encontraron inconsciente en el suelo. Ola Rønsen intentó reanimarlo sin éxito. Una hora después fue declarado muerto en el hospital de Flagstaff.
Oen se había quejado la pasada semana de dolores en el hombro, pero tras ser tratado con cortisona se recuperó. El entrenador del equipo noruego, Petter Løvberg, había dicho antes de la muerte que Oen se estaba mostrando muy ambicioso. “Pero le estamos pidiendo que tenga paciencia. No queremos correr ningún riesgo”, recuerdan sus palabras los medios noruegos.
“Quedan dos días en nuestro campamento aquí arriba en Flagstaff, luego, de vuelta a la ciudad más bonita de Noruega, #Bergen”, escribió Oen en su cuenta de twitter el lunes. (Con datos de CNN)