DEPORTES
Juan de Dios Castillo es un hombre con una misión… Apenas a unas semanas de haber tomado el cargo de director técnico de la selección de El Salvador, el entrenador de origen mexicano enfrentará fechas cruciales para las esperanzas del país centroamericano de llegar a la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014™, en las que no hay margen de error.
Dos partidos ante Guyana y uno frente a Costa Rica marcarán el rumbo de la Selecta, que se lo juega todo en esos 270 minutos. Por ello, en conversación exclusiva con FIFA.com, el nuevo hombre al mando revela sus esperanzas y sus convicciones, y considera que, pese a los obstáculos, tanto él como sus jugadores están preparados para responder ‘presente’ en estos momentos trascendentales.
Complicado, pero no imposible
En principio, los primeros resultados salvadoreños no parecerían desalentadores. A un meritorio empate en Costa Rica (2-2) le siguió una ajustada derrota como local ante el todopoderoso México (1-2). Sin embargo, De Dios Castillo se apoya en la frialdad de los números para expresar preocupación por la posición de su equipo. “Al final de cuentas lo que cuenta son los puntos. De seis nada más llevamos uno, y estamos en tercer lugar del grupo. Esa es la realidad, no hay vuelta de hoja”.
Pese a todo, el técnico considera que la situación no es desesperante, pero sí que es necesario afrontar los próximos partidos con una mentalidad distinta. “Las posibilidades de clasificarse existen totalmente, pero debemos sumar de a tres para que se puedan concretar. Hay que trabajar muy fuerte y buscar los resultados necesarios. Si lo analizamos bien, necesitamos los siguientes nueve puntos. Y con eso estamos adentro, porque tenemos que recordar que Costa Rica enfrentará dos veces a México, que es hasta ahora el equipo más poderoso del grupo”.
Para conseguir el objetivo, el nuevo entrenador señala que los salvadoreños deberán vencer a su principal defecto: la falta de consistencia. “Creo que El Salvador tiene jugadores técnicamente bien dotados, pero les falta mantener la regularidad. De repente el equipo se ve muy bien, pero es intermitente. Lo hemos platicado con los jugadores y están de acuerdo. Hasta ahora nos hemos enfocado en ello”, analiza el estratega de 61 años.
¿Cómo conseguir el cambio?
De Dios Castillo lo tiene claro, y considera que se trata de un asunto de filosofía de juego. “A veces el equipo ha sido demasiado defensivo, busca que no le hagan el gol, pero sin proponer realmente. No me parece que se trate de conformismo, simplemente se piensa que un punto es suficiente y ese no es un enfoque correcto. En mi opinión, debemos mantener una filosofía ofensiva, tener la pelota y buscar el marco rival, porque tenemos a los jugadores con las condiciones para hacerlo”.
Una preparación heredada
Pese a las palabras optimistas, el técnico ha encontrado algunos obstáculos que le han impedido desarrollar a 100% su propuesta con los jugadores. “Lamentablemente toda la preparación estaba ya planificada. Yo no la hubiera hecho así. En principio porque tuve muy poco tiempo con los jugadores. En México y Honduras, donde he trabajado, cuando uno convoca a los futbolistas, los clubes de primera división te los dejan. Aquí eso no sucede y es una gran desventaja. Ya está establecido ese régimen, y no se puede mover”, explica.
De cualquier modo, considera que su equipo tiene buenas posibilidades de conseguir las tres victorias, aunque insiste en la necesidad de ir partido a partido, sobre todo porque los primeros dos son ante Guyana, que, a priori, es la “cenicienta” del grupo. “Ya no hay rivales pequeños, si no te preparas mentalmente, si piensas que todo está fácil, vas a terminar perdiendo”, advierte el entrenador. “Ellos juegan un futbol tipo el de Inglaterra antes, con pelotas largas para aprovechar su poderío físico. Son rápidos, fuertes y van muy bien por arriba. La clave será mantener el balón en el suelo y manejarlo: así podemos hacerles daño”.
Palabras claras, que los jugadores han recibido en estas semanas de preparación, sobre todo porque la tentación de pensar en un duelo clave ante sus archirrivales costarricenses podría ser demasiado fuerte. “Hay que tener muy claro algo: yo no pienso en Costa Rica si no enfrento a Guyana y le gano. Hay que darle la seriedad que se necesita. No se puede pensar en nada más que en el siguiente partido”, enfatiza.
Para concluir una nota positiva, De Dios Castillo resalta la dedicación de sus dirigidos para asimilar sus conceptos, y considera que esto dará frutos. “Nos estamos conociendo, pero los jugadores saben que la clasificación está en nuestras manos, que no dependemos de nadie más que de nosotros. Hay mucho ánimo y un enorme deseo de hacer el trabajo, de esforzarse por lograr las victorias. Eso a mí me tiene complacido y optimista”, finaliza. (Fuente: Fifa.com)