Juan Carlos Guzmán Berdugo, suegro del expresidente Mauricio Funes y su cómplice en el caso “saqueo público”, sería extraditado mañana desde Costa Rica para que responda ante la justicia salvadoreña por el delito de legitimación de capitales.
La Fiscalía General de la República lo acusa de haber recibido parte del dinero extraído del Estado, por parte de una estructura relacionada con el expresidente. Las investigaciones han establecido que el imputado reportó gastos por $140,756.43, que no concordaron con sus ingresos, que fueron de $7,196.72.
Además de esas sumas, al padre de Ada Mitchell Guzmán, pareja de Funes, se le detectó la compra de cinco carros por un valor de $55,000 sin que tuviera cómo justificar el origen del dinero.
El fiscal general de la república, Rodolfo Delgado declaró el pasado 13 de mayo: “Con relación al señor Guzmán Berdugo, precisamente ayer (12 de mayo) se realizó una audiencia para coordinar las últimas diligencias al respecto. Esperaríamos nosotros que el 18 de mayo los esfuerzos que se realizan en conjunto con la Corte Suprema de Justicia y el Ministerio de Relaciones Exteriores rindan fruto y que esta persona enfrente la justicia en los tribunales”.
De acuerdo con información brindada por abogados ligados a este proceso, Guzmán será puesto a las órdenes del juzgado Octavo de Instrucción, por decisión de la Cámara Primero de lo Penal, y luego de ser presentado ante dicha instancia pasaría a un centro penal en espera de la audiencia preliminar.
Juan Carlos Guzmán fue capturado por autoridades costarricenses el 1 de abril de 2019, cuando intentaba salir del país con destino a Panamá. Posteriormente se puso sobre aviso a las autoridades salvadoreñas, quienes tramitaron la extradición del prófugo para que responda a la justicia por sus delitos.