El vuelo LA1325 de LATAM se convirtió en una pesadilla para 48 pasajeros que viajaron de Santiago de Chile a la ciudad de Asunción, Paraguay, tras quedar en una fuerte tormenta con granizo, que quebró el parabrisas de la aeronave, anuló los motores y destrozó la nariz del avión A320 de la referida línea aérea.
El incidente ocurrió la noche de este miércoles 26 de octubre en momentos que los pilotos mantenían el curso para Asunción, pero debieron desviarse para salvar la vida de los 48 pasajeros y del personal a bordo.
Fue una situación que vivieron como si fuera una película de cine cargada de angustia, miedo, terror, pánico y mucha adrenalina, sin necesidad de estar sentados en una butaca de cine con efectos especiales, ya que los pasajeros y el personal a bordo los vivió en carne propia cada momento que el avión era sacudido como si fuera de juguete.
En los videos que han sido publicados en redes sociales, se observan las sacudidas que recibía el avión y una serie de ruidos que provocaban los trozos de hielo que pegaban en toda la estructura. También había gritos y las luces del interior estaban intermitentes, como si de un momento a otro aparecía un muerto viviente.
Se explicó que la nave perdió ambos motores, por lo que los pilotos lograron encender la turbina de aire de impacto, misma que solo se despliega en caso de pérdida de todos los motores y se dice que en la historia de la aviación civil de Suramérica solamente ha ocurrido 16 veces.
Los pilotos volaron sobre los 28 mil pies de altura y que el descenso lo lograron hacer planeando por aproximadamente 7 minutos, logrando aterrizar con éxito en aeropuerto de Foz de Yguazú, de Brasil.
Se considera que los pilotos son experimentados y que fue una proeza que realizaron para lograr aterrizar en esas condiciones, logrando salvar la vida de los pasajeros y del personal a bordo, aunque otros dicen que fue una negligencia de los piloso por volar en medio de esa tormenta, por lo que se investiga el hecho.