Los autos híbridos enchufables a la corriente son para muchos lo mejor de ambos mundos. Usando solo las baterías, modelos como el Toyota RAV4 Prime pueden recorrer hasta 42 millas o 67 kilómetros solo con electricidad, y cuando las baterías se agoten, la marcha continua a gasolina, sin la presión o la angustia provocada por la ansiedad de la autonomía.
En el caso del modelo que probamos esta semana, un Jeep Grand Cherokee 4xe, el recorrido a baterías no es tan extenso, solo 25 millas o 40 kilómetros, pero si la disponibilidad de cargar la batería es habitual, podría eventualmente alcanzar para ir y venir del trabajo sin usar gas.
A Jeep no le ha ido mal con los híbridos enchufables. Durante un tiempo, el Jeep Wrangler 4xe fue el modelo de este tipo más vendido en Estados Unidos, y marcó el camino de lo que estos vehículos eran capaces de hacer. Ahora Jeep traslada la opción a su popular Jeep Grand Cherokee, que probablemente canibalizará en algo las ventas del Wrangler, y que, por otra parte, enfrenta vigorosos competidores, algunos con precios más accesibles.
DESDE AFUERA Y POR DENTRO
La fisonomía Jeep es muy reconocible, y el Grand Cherokee 4xe la exhibe con pequeños detalles de color azul, que le delatan como una propuesta electrificada. Los encontramos en un par de ganchos de remolque dentro del parachoques delantero, mientras que hay insignias azules “4xe” en la pequeña puerta de carga y la parte trasera.
El 4xe sigue siendo un SUV atractivo. Mantiene todas las características de su familia Cherokee, combinando la apariencia musculosa y resistente, con clase y distinción. La tradicional parrilla de siete barrotes y las luces delgadas le hacen inconfundible. Una parrilla para portaequipajes en el techo viene en todos los modelos, mientras que las versiones Trailhawk, Overland y Summit tienen un techo negro brillante de serie.
Poco reproche ha recibido el interior de los Grand Cherokee con el pasar de los años. Siempre ha destacado por una experiencia premium, y la del 4xe no es excepción. Nuestro Grand Cherokee 4xe de prueba fue un Overland, que incluye asientos de cuero perforado con calefacción y ventilación, costuras cosidas en contraste y detalles de madera con molduras de aluminio.
El atractivo interior se ve realzado por lujosos materiales y una buena construcción, convirtiendo a la cabina en un habitáculo de gama, y de que otro modo no debería ser, si consideramos el precio de este Cherokee hibrido.
Los asientos son confortables y de buen soporte, pero en la segunda fila, si bien no escasea la comodidad, algunos rivales ofrecen más espacio para estirar las piernas. Son 38.2 pulgadas o 97 centímetros. El Kia Telluride llega a las 42.4 pulgadas y el Toyota Highlander hibrido a las 41.
El espacio de carga es de un tamaño decente, con 37,7 pies cúbicos detrás de la segunda fila de asientos. Si se necesita transportar objetos voluminosos, con el asiento plegado el espacio crece a 70,8 pies cúbicos.
TECNOLOGÍA Y SEGURIDAD
Hay abundancia de tecnología en el interior del Cherokee 4xe, incluyendo una pantalla de 10.25 pulgadas para el asiento del pasajero, que no se puede ver desde la posición del conductor. Desde allí el “copiloto” puede seguir la navegación y cámaras del auto, así como las opciones de entretenimiento como Amazon Fire TV o si lo prefiere, Xbox o Playstation a través de un puerto HDMI.
Si los pasajeros de la segunda fila le manifiestan sus celos, puede obtener un elegante sistema de entretenimiento para los asientos traseros con Amazon Fire TV integrado, pero prepare unos $1,995 dólares extra para ello.
La pantalla táctil central de 10.1 pulgadas muestra el excelente sistema de info-entretenimiento Uconnect 5 de Jeep. Siempre nos ha gustado Uconnect, pero en esta nueva versión, aunque mantiene los gráficos nítidos y la facilidad para navegar entre opciones, los iconos ahora son más pequeños, y en algunas ocasiones difíciles de distinguir cuando estamos conduciendo.
Por suerte hay controles físicos redundantes que aumentan aún más la facilidad de uso del sistema, y los de Jepp están entre los mejores de la industria. Android Auto, Apple CarPlay, y Amazon Alexa se conectan sin necesidad de cables.
Las características de seguridad son abundantes en el Grand Cherokee 4xe e incluyen control de crucero adaptativo, frenado automático de emergencia, monitor de punto muerto, asistente de mantenimiento en el carril, y asistente de estacionamiento.
Visión nocturna, sistema de cámaras en 360 grados y el asistente de conducción en carretera son opcionales o están incluidos en los acabados superiores.
Mención aparte merece el sistema de audio. En las variantes Overland y Summit se incluye uno de 19 altavoces marca McIntosh. Este es una fabricante que quizá muchos no reconozcan. Solo los autos de Jeep utilizan por ahora los componentes de audio de gama superalta McIntosh en la actualidad (dos modelos de Subaru y el Ford GT lo utilizaron al principio de los 2000) y escuchar la calidad de reproducción en este Cherokee 4xe, es lo más cercano al clímax auditivo para los que soñamos por la oreja.
EN LA CARRETERA
Aunque la autonomía puramente eléctrica de 25 millas o 40 kilómetros puede agotarse con bastante rapidez si es de los que conduce pisando el acelerador con fuerza, el modo híbrido de gasolina y electricidad proporciona una aceleración sorprendentemente amplia y un consumo combinado de 23 millas por galón o 10.23 litros cada 100 kilómetros.
Sin embargo, las transiciones entre la propulsión solo eléctrica y la de gas son más abruptas que lo esperado. La marcha de este Cherokee 4xe me ha recordado los híbridos de los primeros años de la década pasada. La entrega de potencia es tosca, y hace que este Jeep tarde demasiado en responder cuando se pisa el acelerador. Además, el silbido del motor puede llegar a ser molesto, incluso en un auto que evidentemente está muy bien insonorizado.
Estos inconvenientes quizá estén originados en una ventaja, por paradójico que parezca. El Jeep Cherokee 4xe es el único híbrido recargable que utiliza una transmisión automática de ocho velocidades, y no una continua o CVT, como es tradicional en estos modelos.
El 4xe utiliza un motor de cuatro cilindros turboalimentado de 2,0 litros, acoplado a un motor eléctrico para una potencia combinada de 375 caballos y 470 libras pie de torque. La potencia supera incluso la del Jeep Wrangler con motor Hemi V8, y puede llevar al 4xe a las 60 millas o 100 kilómetros en 6 segundos, marca respetable si consideramos que pesa 4,863 libras o 2,205 kilogramos.
Como es de esperar, el Cherokke 4xe es un vehículo muy capaz fuera de la carretera. El sistema de tracción total a tiempo completo Quadra-Trac II de Jeep viene de serie, al igual que una suspensión de alta resistencia y el sistema de gestión de tracción Selec-Terrain con cinco ajustes: Auto, Nieve, Rocas, Sport y Barro o Arena.
Del mismo modo, el selector “E Selec” permite personalizar las funciones de marcha híbrida, con las opciones “Hybrid” o hibrida, que combina los motores de gasolina y eléctrico, “Electric” o eléctrico, que funciona solo con energía eléctrica y él “eSave” (algo así como modo de ahorro) que da prioridad al motor de gasolina para conservar la energía de la batería solo cuando sea necesario.
La suspensión adaptativa permite una altura de marcha elevada, con distancia máxima al suelo de 10,9 pulgadas. La batería híbrida está sellada, por lo que el Grand Cherokee 4xe puede atravesar hasta 60 cm de agua.
El 4xe atesora una buena cifra de consumo. Son 56 millas por galón o 4.2 litros cada 100 kilómetros en manejo combinado, pero hay que tener en cuenta que la clasificación solamente se aplica cuando la batería está completamente cargada. Con la batería descargada, el Grand Cherokee ofrece un consumo combinado de 23 millas por galón que serían 10.23 litros cada 100 km.
PARA ESCOGER
El 2023 Jeep Grand Cherokee 4xe híbrido enchufable está disponible en cinco acabados: Base (Grand Cherokee), Trailhawk, Overland, Summit y Summit Reserve.
Los precios pueden oscilar entre los $59,865 para el modelo de entrada Base, hasta los $78,870 para el Summit Reserve. Nosotros probamos un Overland con precio inicial de $69,675. En nuestra opinión, la mejor opción entre los Cherokee 4xe sería el Trailhawk por $67,055, debido a su relativo bajo precio (comparado con el modelo básico) y las extraordinarias capacidades todoterreno que le acompañan.
CONCLUYENDO
El paso hacia la total electrificación de los autos es irrefrenable, pero como un umbral de transición, los híbridos enchufables no han gozado de toda la popularidad que merecen. Jeep ofrece una propuesta valiosa con esta tecnología, en un SUV que, aunque caro, concentra suficiente lujo, tecnología, comportamiento en carretera y capacidad todoterreno como para no despreciar.
Roger Rivero es un periodista independiente, miembro de NAHJ, la Asociación nacional de periodistas Hispanos y de NWAPA, la Asociación de periodistas automovilísticos del noroeste. Los vehículos son proporcionados por los fabricantes como préstamo por una semana para fines de la reseña. De ninguna manera, los fabricantes controlan el contenido de los comentarios.