Mi esposa, que poco sabe de autos, es, sin embargo, un buen catalizador cuando cada semana voy por ella a su trabajo, luego de intercambiar por el modelo de prueba en la mañana. Su expresión al instalarse en el nuevo Genesis G90 me ha divertido, pero creo resume bien la fascinación que produce el acabado interior de este auto.
“Ave María purísima, qué belleza” fue su primera exclamación, al alojarse en la suntuosa cabina del buque insignia de la marca de lujo de Hyundai. Genesis ha rediseñado completamente al G90 este año, y aunque también ha incrementado su precio (y no marginalmente) hay mucho que admirar en este lujoso sedán.
Tanto así, que varias de las publicaciones especializadas que conforman listas de posiciones o rankings, colocan al 2023 Genesis G90 en el primer lugar entre los grandes sedanes de lujo, desplazando históricos contrincantes como Mercedes Benz o BMW.
Esta semana hemos evaluado el Genesis G90, uno de esos autos que extrañas al final de la prueba semanal, sobre todo acostumbrados a las sesiones diarias de masaje en la espalda.
Desde afuera y por dentro
Un vistazo rápido a este Genesis basta para advertir que es algo especial. Aquí la elegancia y sofisticación pasan a otro nivel, y quizá nos adentramos en terreno Rolls-Royce. Pocos modelos de autos han logrado incorporar una parrilla tan grande con éxito. La del G90 en forma de escudo no repele, como algunas veces nos ha sucedido con modelos de Lexus.
Su “plasticidad” se ve desafiada por finos faros delanteros que destacan desde cualquier ángulo, y que extienden su apariencia a la parte posterior de los guardabarros delanteros. Las luces traseras también son especialmente llamativas, junto a acentos más sutiles como las salidas de escape trapezoidales o las pinzas de frenos de color bronce.
No hay dudas que Genesis quiere llamar la atención con el G90 (sobre todo de quienes conducen Mercedes Benz) y su propósito encuentra final feliz con este rediseño.
Sí magnífico es el exterior, el primer contacto con el interior puede que haga que su mandíbula caiga. Podría extenderme en detalles y emborronar cuartillas que quizá no puedan sintetizar o bosquejar dignamente la calidad, diseño y terminado de este sedán.
Me atrevo a sugerir medio en broma y medio en serio (como decía un legendario cómico de mi ciudad) que vista usted con elegancia y pase por un concesionario de Hyundai o Genesis para pedir que le muestren un 2023 G90 y compruebe así por usted mismo, lo que me resulta trabajoso describir.
Descubrirá características interesantes como un cubículo para desinfección antibacteriana de rayos ultravioleta, o las inimaginables formas de cerrar una puerta sin siquiera tocarla.
Necesitaría demasiados adjetivos para resumir la ingeniosidad del diseño, calidad de materiales y acabado de este auto. Mi querida esposa no estaba muy desacertada en su exclamación, a la que bien podía haber respondido: Sin pecado lo han concebido.
Tecnología y seguridad
Luego de tanta elogio, hablemos de un par de ausentes en el área tecnológica. A pesar de la buena excelencia general del sistema de info entretenimiento del G90, es poco comprensible que tengamos que seguir utilizando cables para conectar los teléfonos con Android Auto y Apple CarPlay. Además, notamos la ausencia de un punto de acceso Wi-Fi. Ambas omisiones quizá provocadas por el actual desabastecimiento de chips, aunque esto es solo mi especulación.
Restando estas lamentables omisiones, el G90 es uno de los vehículos más avanzados tecnológicamente que hayamos probado. Quienes piensen que pueden perder prestaciones tecnológicas eligiendo este Genesis sobre contrapartes europeas, están en un error.
Aquí están presentes todos los embrollos tecnológicos actuales, incluyendo controles táctiles en el volante, suficientes botones táctiles, incluyendo los de masaje en los asientos, como para no distraerse buscando opciones escondidas, y dos grandes pantallas de 12.3 pulgadas que nos introducen a un buen entramado de configuraciones y ayudas al conductor, nada difíciles de navegar.
Todos los modelos incluyen un sistema estéreo Bang and Olufsen, pero el E-Supercharged como el de nuestra prueba, incluye una versión mejorada con 23 altavoces y un modo que simula la acústica de una sala de conciertos. También incluye un vistoso Head-up Display o pantalla de proyección y una base de carga inalámbrica para teléfonos.
El equipamiento de serie es completo, otra diferencia con sus principales competidores que cobran separado por añadir algunas prestaciones. Aquí se incluyen crucero inteligente, mantenimiento de carril, punto ciego, prevención de colisiones, y ayuda de estacionamiento remoto, entre otras.
Las ayudas al conductor del G90 funcionan de maravilla, siendo su sistema de manejo semiautónomo uno de los mejores que haya probado. Mantiene el auto centrado en el carril, al tiempo que ofrece claros gráficos informativos sobre lo que está sucediendo en el cuadro de instrumentos, y puede cambiar de senda de forma autónoma. A pesar de su precisión y buena ejecución, hay que mantener las manos en el volante casi constantemente, algo que no mucho me agradó.
En la carretera
Todos los Genesis G90 incorporan un motor V6 bi turbo de 3,5 litros, pero hay 2 niveles de rendimiento: la versión estándar tiene 375 caballos de potencia, mientras que un sobrealimentador de 48 voltios opcional eleva la potencia a 409 caballos y 405 lb-pie de par. La tracción a las cuatro ruedas es de serie, al igual que la transmisión automática de 8 velocidades con levas en el volante.
Si bien la sensación de estancia en cualquiera de sus asientos es de aplomo y confort, una vez en la carretera no se pierde para nada este efecto. La entrega de potencia de este motor bi turbo mejorado no solo está a la par de un V8, sino que lo hace de la forma ultrasuave que esperan los compradores de autos en este nivel de lujo.
Quizá si encuentra alguna carretera con curvas no se comporte con similar compostura que un BMW o un Benz, pero no creo que sea un manejo atlético lo que estén buscando este segmento de compradores.
Hay modos de manejo disponibles como Sport, pero también el de Chauffeur, que prioriza la comodidad de los ocupantes traseros, allí donde tienen asientos con masaje, calefacción y ventilación, y almohadillas para reposar la cabeza. El aislamiento acústico, el vidrio laminado y su forma aerodinámica contribuyen a bloquear los ruidos exteriores, siendo incluso imperceptible el sonido del motor.
Para mantener el interior lo más sereno posible, los sonidos de los sensores de aparcamiento, los monitores de punto muerto y los intermitentes se escuchan únicamente de un altavoz específico situado en el reposacabezas del conductor.
El ahorro de combustible puede no ser una preocupación del comprador en el punto de precio de los sedanes ejecutivos de tamaño completo, y este es un rubro donde el 2023 Genesis G90 no sobresale. 20 millas por galón o 11.76 litros cada 100 kilómetros no son números elogiables, sin embargo, en nuestra prueba logramos algo más de 22 millas por galón, quizá por nuestra forma de conducir algo flemática.
Para escoger
Genesis ofrece el G90 2023 en dos acabados: 3.5 T y 3.5 T E-Supercharger como el que nosotros probamos. La principal diferencia se reduce al tren motor, que en la versión E-Supercharger incorpora un sistema híbrido suave, aumentando así la potencia de 375 caballos a 405. También le agregan suspensión por aire y tiene más opciones de acabados de pintura.
El E-Supercherger comienza en los $98,700, mientras que el acabado de entrada 3.5 T ronda los $88,400. Quizá algunos puedan pensar que estos son precios altos. Es cierto que Genesis ha incrementado los costos paulatinamente, pero, aún así, un Mercedes-Benz S-Class equivalente costaría más de $10,000 dólares sobre el precio de entrada del G90. También más caro, aunque no tanto como el Benz, es otro competidor, el BMW Serie 7.
Concluyendo
Hace más de 30 años, la supremacía alemana en el segmento de los sedanes de lujo se vio acechada por el lanzamiento de un repentino competidor, el Lexus LS.
Aunque el G90 aún no se vende en grandes cantidades en Estados Unidos, demuestra que la marca de lujo de Hyundai es un serio competidor en el segmento, tanto así, que este “intruso” llega al 2023 mejor recomendado que los competidores europeos.
Génesis ha provocado pequeñas sacudidas en la industria del automóvil desde que se introdujo como una marca independiente en 2015. El fabricante coreano estampa ahora su presencia con un vehículo ante el cual, más de uno, pueda que exclame: ¡Ave María purísima, qué belleza!
Roger Rivero es un periodista independiente, miembro de NAHJ, la Asociación nacional de periodistas Hispanos y de NWAPA, la Asociación de periodistas automovilísticos del noroeste. Los vehículos son proporcionados por los fabricantes como préstamo por una semana para fines de la reseña. De ninguna manera, los fabricantes controlan el contenido de los comentarios.