Esta semana salió a luz pública sobre posibles negociaciones entre jueces, magistrados y un lobista, lo que puede constituir en hechos de corrupción que son penados por ley y duramente perseguidos por el gobierno del presidente de la República, Nayib Bukele Ortez.
La información fue dada a conocer por medio de la cuenta de Twitter del ministro de Trabajo, Rolando Castro, donde escribió que “hay magistrados que son igual o peores que los anteriores. La corrupción debe de denunciarse, venga de donde venga”.
“Los negocios deben estar sobre la ley”, insistió el funcionario en esa red social y lo repitió en el programa Frente a Frente de la Telecorporación Salvadoreña, donde dijo que en el pasado hablaba con Nayib Bukele Ortez y que ambos llegaban a la conclusión, de que “había necesidad de sacar lo malo que había en este país”.
En ese sentido recalcó, que “lo corrupto se saca para poner lo bueno y esa fue la filosofía. Esa es la filosofía del ahora presidente de la República Nayib Bukele”.
“Yo he dicho magistrados y no he dicho nombres por el momento. Más a adelante puedo decir de quien se trata y a que institución pertenece. No podemos decir que la corrupción es mala en el pasado y decir que es buena en el presente. No se puede… la corrupción es mala ayer, hoy, mañana y siempre”, indicó Castro y agregó que da su total respaldo al presidente Bukele Ortez y que después de él no pone las manos al fuego por nadie.
Pero los señalamientos de Rolando Castro no concluyeron ahí y también por Twitter dio nuevas luces sobre lo que puede constituir hechos de corrupción al referirse a jueces y magistrados “de desayunos”, con un lobista cuyos ingresos de asalariado es de cinco mil dólares mensuales, y que luego ese mismo lobista aparece con vehículos de lujo, que muy pocas personas lo pueden adquirir, sin incluir otros tipos de bienes.
“La corrupción es el eje transversal de empobrecimiento de una sociedad y se debe de denunciar sin importar quien sea”, puntualizó el titular de Trabajo.
Se conoció que luego de las reuniones con los jueces y los magistrados, el lobista apareció en las calles de El Salvador a bordo de un vehículo Maserati, que por lo general son carros deportivos de alta gama.