La tarde de este lunes los salvadoreños se vieron sacudido con la repentina renuncia del técnico de origen español, Rubén de la Barrera, que dio un paso al costado y abandonó el proceso de la Selección Mayor de Fútbol de nuestro país para hacerse cargo del equipo Vizela de la Primera División de Portugal.
De la Barrera, sale a los 89 días de haberse hecho cargo de la Selecta y provocar la salida del técnico Hugo Pérez, que luchaba por mejora el nivel de juego de cada uno de los integrantes de la selección de fútbol, como también, dar un giro positivo en los números del ranking mundial de la FIFA.
Rubén de la Barrera deja otro mal sabor de boca, porque fue vendido como un técnico de alto calibre y con quien se apostaba por enderezar la situación de la Selección Mayor de Fútbol, pero al final fue un fiasco porque solamente logró empatar tres partidos y perdió uno, pero lo más crítico es que abandona el barco en momentos que la selecta tiene que disputar en enero un encuentro deportivo con el Inter de Miami, comandado por el astro argentino Lionel Messi.
Después, en febrero la selección salvadoreña va a tener en que enfrentar otro amistoso con la selección de Costa Rica y con lo cual se prepara para iniciar su etapa preparatoria para el próximo mundial.
Lo curioso es que Rubén de la Barrera decide irse para el Vizela de Portugal y que si bien se dice que es un equipo de la primera división, el conjunto es pequeño y se encuentra a un peldaño de descender a segunda división, con lo cual deja muy clara su falta de seriedad para levantar su perfil de técnico porque anda con equipos sotaneros.
En el pasado El Salvador también vivió otra situación similar con el uruguayo Rubén Israel que también abandonó a la Selecta y se fue al Libertad de Paraguay, otro equipo sotanero que buscaba salvar su categoría.
Con Israel de grata recordación, la Selecta logró subir al puesto 49 en el ranking de la FIFA, siendo un récord histórico que sigue vigente hasta hoy día y es el único entrenador de la selección que logro seis victorias al hizo en eliminatorias mundialistas, las que consiguió en la segunda ronda del camino al Mundial de Brasil 2014.
El charrua dirigió la Copa Oro del 2011, donde en tanda de penales privaron al conjunto salvadoreño de clasificar por primera vez a semifinales en un intenso juego ante la selección de Panamá, en el RFK Stadium de Washington, de los Estados Unidos.
Rubén Israel dirigió un total de 18 partidos de la Selección Mayor de Fútbol, de los cuales logró nueve victorias, cinco empates y cuatro derrotas.