CX-90, el Mazda más grande, potente y, lujoso.

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Por: Roger Rivero

A la familia de SUV de Mazda ya le queda solo uno con dígitos sencillos, en CX-5. El resto ya enseña dos números en su denominación, siendo el auto de prueba de esta semana el más reciente en adquirir el aumento, al pasar de CX-9 al CX-90.

El cambio de nombre ha venido asociado a transformaciones sustanciales en estos modelos, sobre todo en el interior, donde Mazda se afana en fabricar autos que, poco o nada, tendrían que envidiarle a ejemplares de lujo.

Las ambiciones de la marca premium del CX-90 pueden ser una extensión de la evolución iniciada con el compacto CX-50, pero la nueva arquitectura e innovaciones en el tren motor del CX-90, representan una ruptura con los anteriores productos del fabricante, que nos entrega un utilitario para familias numerosas, con tres filas de asientos, y con algunos atributos que quizá no serán cabalmente apreciados por algunos compradores.

Es que el 2024 CX-90 no solo es muy lujoso, es quizá unos de los SUV de tres filas de asientos con mejor dinámica de manejo, algo que poco va a interesar a una atareada madre de camino a la escuela o práctica deportiva con sus hijos.

¿Qué hay de nuevo?

De nuevo, pues prácticamente todo. El CX-90 estrena generación en el 2024, y entra a sustituir al Mazda CX-9.

¿Cómo se ve desde afuera?

Hacer que un SUV de estas dimensiones luzca atractivo es un propósito difícil de alcanzar. La mayoría no lo logra, y Mazda, a pesar de contar con automóviles que sí resaltan por su diseño, en el CX-90 no llega a la meta.

Tampoco pensamos que es “uno más del montón”. El mayor logro es hacer que sus líneas limpias se identifiquen con las de modelos mucho más caros, especialmente si lleva el nuevo color Artisan Red Premium, solo disponible en los dos niveles de acabado más altos.

¿Y por dentro?

Casi sin excepción, es el interior el máximo punto de venta de los autos de Mazda. La selección de materiales y el ajuste de construcción no tienen contrincante en el rango de precio que compite, y muchos, como este modelo, cortejean a autos en la categoría de lujo.

El 2024 CX-90 tiene un diseño de cabina sofisticado, con detalles llamativos como inserciones de tela de gamuza en el salpicadero y los paneles de las puertas en los modelos de gama alta.

La capacidad es de siete u ocho pasajeros, dependiendo de si la tercera fila está contorneada para dos pasajeros en los acabados superiores o tres en los modelos más convencionales. Como en la mayoría de los SUV compactos de tres filas de asientos, esa tercera fila es mejor reservarla para los niños más pequeños. Cuando se utiliza la tercera fila, la capacidad de carga se reduce a 16 pies cúbicos de espacio para equipaje. No destaca este Mazda por ser amplio en la parte posterior, de hecho, sus dimensiones allí están por debajo de la media en el segmento.

Tecnología y seguridad

El modelo Premium Plus como el que probamos incluye de serie una pantalla de 12,3 pulgadas (31 centímetros) mientras que los modelos inferiores del CX-90 traen una de 10,3 pulgadas (26 cm) que aún sigue siendo bastante grande. Apple CarPlay y Android Auto inalámbricos vienen de serie en todos los modelos y el sistema es controlado a traves de un mando de control en la consola central. Este

sistema, aunque práctico, se nota anticuado, y como en otros modelos de Mazda, la pantalla más pequeña no es táctil y la de 12,3 pulgadas solo funciona como tal cuando el auto no está en movimiento.

Ya hemos comentado antes que Mazda justifica la imposibilidad de operar la pantalla con el auto en movimiento por razones de seguridad, pero en mi opinión, consume más tiempo y crea más frustración el navegar por cascadas de menús para acceder a funciones básicas.

La tecnología de la cabina de Mazda se nota anticuada, y confiamos que nuevas versiones ganen en conveniencia y practicidad.

Las prestaciones de seguridad están bien agrupadas en el grupo que vienen de forma uniforme. Las de pago opcional incluyen la detección de peatones en la parte trasera, reconocimiento de señales, sistema de cámaras en 360 grados, la proyección en el parabrisas, o los sensores de estacionamiento. Este último me hubiese gustado que viniera incluido, por las dimensiones del SUV.

¿Cómo se conduce?  

El buen rendimiento y dinámica de manejo no suelen ser una prioridad para los compradores de SUV con tres filas de asientos, quizá más interesados en la comodidad o el consumo de combustible. Resulta que el CX-90 de Mazda, a pesar de ser un vehículo de grandes dimensiones, manifiesta ser más rápido, manejable y estable que prácticamente cualquier otro de su clase.

Mazda equipa al 2024 CX-90 con un nuevo motor turboalimentado de seis cilindros en línea, que produce 280 o 340 caballos de potencia según el acabado. Nosotros probamos la versión Premium Plus con el motor más potente, y bajo ninguna condición lo sentimos falto de potencia, incluso adelantando a otros vehículos en la autopista. Este sistema de propulsión es suave y refinado, ayudado por la excelente transmisión de ocho velocidades.

En su escala de precio, no creo podamos encontrar otro SUV con un equilibrio justo de deportividad y refinamiento como este, que hacen que el CX-90 sea a la vez atractivo y acogedor.

Otro aspecto destacable es su economía de combustible, que lo coloca como uno de los más eficientes en el segmento de los SUV medianos. Con el motor menos potente logra 24 millas por galón en la ciudad y 28 mpg en la carretera, unos 9.8 u 8.4 litros por cada 100 kilómetros respectivamente.

¿Si quiero uno, por cuál me decido?

Las opciones para elegir son amplias, pues el Mazda CX-90 del 2024 está disponible en ocho acabados. Todos los modelos tienen tracción a las cuatro ruedas y una transmisión automática de ocho velocidades, y la elección del motor de seis cilindros turboalimentado puede ser de 280 o 340 caballos.

El CX-90 Turbo Select de entrada comienza en $39,595, seguido del Turbo Preferred en $43,445, Turbo Preferred Plus en $45,900, Turbo Premium por $48,900, el Turbo Premium Plus como el que nosotros probamos con precio inicial de $52,950, seguido del Turbo S, Turbo S Premium y Turbo S Premium Plus, por $51,750, $56,450 y $59,950 respectivamente.

Nos inclinaríamos a recomendar al Turbo Preferred Plus, pues se beneficia de cuero Nappa en los asientos, mayor pantalla del infoentretenimeitno, calefacción en los asientos de la segunda fila y varias prestaciones activas de seguridad.

¿Contra quién compite?

Casi todos los fabricantes tienen modelos en la categoría de SUV medianos. Aquí por solo mencionar algunos podemos incluir al Toyota Grand Highlander, Chevy Traverse, Volkswagen Atlas, Honda Pilot, Kia Telluride, Buick Enclave, Subaru Ascent y Nissan Pathfinder.

Concluyendo

El nuevo CX-90 es el vehículo más grande del fabricante japonés, que, por su lujo interior, elegancia exterior y un tren de poder refinado y robusto, se convierte en un contrincante significativo en un segmento de alta demanda.

Mazda es una compañía pequeña, por lo que puede hacer cambios con agilidad, mejorando o subsanando lo que ha dejado de funcionar por obsoleto o por las demandas del mercado.

Aunque hay cosas que pueden mejorar, con el CX-90, Mazda demuestra tener un buen pulso sobre lo que funcionó y lo que no de su anterior buque insignia, el CX-9, para entregarnos un sustituto digno de mucho encomio.

Roger Rivero es un periodista independiente, miembro de NAHJ, la Asociación nacional de periodistas Hispanos y de NWAPA, la Asociación de periodistas automovilísticos del noroeste. Los vehículos son proporcionados por los fabricantes como préstamo por una semana para fines de la reseña. De ninguna manera los fabricantes controlan el contenido de los comentarios.