El humo blanco de la chimenea de la Capilla Sixtina del Vaticano era señal de que ya había papa, por lo que el cardenal Dominique Mamberti, protodiácono de la Iglesia católica, salió al balcón de la Basílica de San Pedro y ante la multitud anunció quien era el nombre del sucesor de Francisco.
“¡Habemus Papam!”, dijo y anunció que el nuevo sumo pontífice era Robert Francis Prevost, resultó electo en la tercera votación del cónclave, proceso que se inició este miércoles 7 de mayo.
Prevost se convierte en el segundo papa del continente americano y el primero nacido en los Estados Unidos. El sumo pontífice escogió el nombre papal de León XIV y es el líder número 267 en la historia de la Iglesia Católica.
Con de 69 años en hombros, es un prelado nacido en el estado de Chicago, de los Estados Unidos, y tiene opiniones cercanas a su antecesor Francisco.
En sus primeras palabras ante la multitud que se congregó en la plaza San Pedro del Vaticano, León XIV envió un claro mensaje de unidad y conciliación, que parece ir en línea con la gestión del papa Francisco.
“La humanidad necesita a Cristo como el puente para ser alcanzados por Dios y por su amor, para ayudarnos a construir puentes mediante el diálogo, uniéndonos todos para ser un único pueblo”, indicó en medio del júbilo de los fieles.
El nuevo pontífice también dio las gracias a Francisco y a los cardenales que le eligieron para llevar el rumbo de una “iglesia unida” que proclamen el evangelio “para ser misioneros”. “Soy un hijo de san Agustín”, recalcó.
Robert Francis Prevost fue nombrado por Francisco como prefecto del dicasterio para los obispos en enero de 2023, una poderosa posición responsable de seleccionar a los obispos, cargo que ocupó hasta la muerte de su antecesor. Luego, el 30 de septiembre de 2023, fue elevado por el papa argentino al rango de cardenal.
De manera sorpresiva, León XIV envió un mensaje en español a la diócesis de Chiclayo, Perú, que encabezó durante varios años por mandato de Francisco.