INMIGRACION
Después de estar bajo la mirada de activistas que lo nombraron “deportador en jefe”, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha solicitado a su administración encontrar alternativas más humanas de aplicar a la actual ley de inmigración, informó la Casa Blanca este jueves 13 de marzo.
Obama pidió a su jefe de Seguridad Interna, Jen Johnson, llevar a cabo un “inventario de las prácticas actuales del departamento para ver cómo puede llevarse a cabo una aplicación más humana dentro del marco de la ley”, dijo la Casa Blanca después de que Obama se reunió con los miembros del Caucus Hispano del Congreso.
La reforma inmigratoria permanece como prioridad en la agenda de Obama este año, después de que no avanzó en 2013 en la Cámara de Representantes, controlada por el Partido Republicano.
Una reforma inmigratoria bipartidista que fue aprobada en el Senado el año pasado permanece atorada en la Cámara Baja y los legisladores detrás de ella han exhortado a los republicanos a revisarla. En 2012, Obama firmó una orden para detener las deportaciones de algunos jóvenes inmigrantes indocumentados que fueron llevados a Estados Unidos por sus padres.
La semana pasada, el presidente de la organización Consejo Nacional de La Raza criticó al presidente por no hacer más para terminar con las deportaciones. “Para nosotros, este presidente ha sido el deportador en jefe”, dijo Janet Murgía en la gala anual de la organización.
“En cualquier momento esta administración alcanzará la marca de dos millones de deportaciones. Es una cantidad sorprendente que supera por mucho a cualquiera de sus antecesores y deja tras de si una ola de devastación para las familias de Estados Unidos”, dijo Murguía.
Este jueves, la Casa Blanca informó que Obama se reunió con legisladores hispanos a quienes “enfatizó su profunda preocupación por el dolor que muchas familias sienten con la separación que causa nuestro sistema de inmigración roto”.
Un alto funcionario del gobierno señaló que Obama llamó a una revisión de las políticas de seguridad, lo que no debería ser visto como un sustituto de una reforma inmigratoria incluyente, dijo.
El demócrata por Illinois en la Cámara de Representantes, Luis Gutiérrez, del Caucus Hispano del Congreso, dijo en un comunicado que la reunión del jueves abrió “un nuevo diálogo entre el Caucus y la Casa Blanca, que había estado dormido por mucho tiempo”.
Los miembros del Caucus Hispano del Congreso que se reunieron, “estuvieron de acuerdo en que el presidente necesita actuar”, dijo. “Concuerdo con el presidente en que la última y más responsable solución para arreglar nuestro sistema de inmigración roto recae con la mayoría republicana en la Cámara de Representantes, y trabajaremos juntos para demandar que entren en acción”. (Con datos de CNN)