NUEVA YORK
En la historia reciente de Nueva York, todos los presos fugados fueron capturados en las 24 horas siguientes. No ha sucedido así con Richard Matt y David Sweat, que continúan desaparecidos desde su huida en la madrugada del pasado viernes del pabellón de máxima seguridad de la prisión Clinton en Nueva York.
Un total de 500 agentes peinan los estados de Nueva York y Vermont, donde se sospecha que podían haber huido. A la búsqueda se han incorporado además varios perros de rastreo. Al parecer, los fugitivos se detuvieron en una tienda de sándwiches, situada en una estación de servicio, no lejos de la cárcel de donde escaparon.
Los policías están revisando el vídeo de seguridad de la tienda, ya que los perros detectaron allí el olor de los dos fugitivos. Los investigadores encontraron una huella de un zapato o bota, así como envoltorios de comida en la zona. Los dos podrían haber estado rebuscando comida en la basura, según han informado las autoridades a la CNN.
David Sweat, de 34 años, estaba condenado a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional por el homicidio de un policía cometido en 2002. Mientras, Richard Matt, de 48 años, cumplía 25 años de cárcel y prisión perpetua por el secuestro, homicidio y descuartizamiento de su ex jefe en 1997.
Su fuga tiene todos los ingredientes de un guión de Hollywood como el de ‘Cadena Perpetua’. Los dos vivían en celdas conjuntas. Pasaron muchas horas picando la pared hasta conseguir un túnel que les permitiera salir por las tuberías de la prisión.
Una vez abrieron el agujero, los dos presos treparon por una pasarela hasta llegar a una serie de túneles y tuberías que también cortaron en su camino. Ambos reclusos subieron por una alcantarilla para salir a una calle cercana, “desapareciendo en la oscuridad a unos 30 kilómetros al sur de Canadá”.
Para que no les descubrieran durante las revisiones nocturnas de la prisión, Sweat y Matt se fabricaron dos muñecos con sus almohadas a los que vistieron con sus ropas y así no levantar las sospechas de los guardias. Hasta la mañana siguiente no descubrieron la fuga.
Incluso tuvieron tiempo para dejar un mensaje a las autoridades. En una tubería de vapor cortada, los reclusos dejaron una nota burlona que contenía el dibujo de una carita asiática y las palabras “Que tengan un bonito día”.
Su huida ha provocado el nerviosismo en el estado de Vermont, que se encuentra a 64 kilómetros de la prisión. Los policías están recorriendo toda la zona rural de Nueva York, en la frontera con Vermont, en busca de pistas revisando minuciosamente las zonas boscosas y carreteras.
¿SE DIRIGEN A MÉXICO?
La hipótesis de que los dos peligrosos reos se dirijan a México toma fuerza ante la conexión de al menos uno de ellos con el otro lado de la frontera. Los funcionarios de la cárcel interrogan a una mujer, empleada del centro penitenciario, por su posible participación en la fuga de Matt y Sweat. Presuntamente, la mujer “conocía muy bien” a los reos por el trabajo compartido en sastrería.
Matt, acusado de tres cargos de asesinato, tres cargos de secuestro y dos cargos de robo después de que secuestró a un hombre y lo golpeó hasta la muerte en diciembre de 1997, fue condenado a 25 años a cadena perpetua, según la policía estatal. “Él tiene una historia”, dijo Gabriel DiBernardo, quien dirigió la investigación sobre el asesinato por el que fue condenado Matt. “Ya se había fugado de una cárcel antes. Es una persona astuta, no hay duda al respecto, y un individuo vicioso.”
Matt tiene un tatuaje en la espalda que dice “Mexico Forever” (“México siempre”), y según la investigación, es muy conocido por las autoridades mexicanas.
En 2007 fue extraditado de México a Nueva York por un cargo de asesinato de hace diez años, de acuerdo con informes. Por esta razón, las autoridades de ese país han sido alertadas. De igual forma, y por la proximidad del penal con la frontera canadiense, la policía estadounidense también baraja la hipótesis de que los prófugos puedan intentar dirigirse a ese país. (Con datos de CNN y EL MUNDO)