TERRORISMO EN FRANCIA
Al menos 28 personas, entre las que se encuentran varios turistas, han muerto en un ataque terrorista de dos hombres armados con fusiles Kaláshnikov a dos hoteles en la ciudad turística de Susa, en la costa de Túnez, este viernes 26 de junio.
Según un portavoz del Ministerio del Interior, informa Efe. Uno de los hoteles atacados, el Imperial Marhaba, de la cadena española RIU, está situado en el enclave turístico de Port Kantaoui. Fuentes de la cadena hotelera han confirmado a Efe que el ataque se ha producido en la playa de este complejo turístico, no en su interior. Los asaltantes también han atacado el hotel vecino, el Muradi Palm Marinay.
Las fuerzas de seguridad han logrado intercambiar disparos con un agresor. Un portavoz del ministerio ha asegurado que ha sido abatido —las fuerzas de seguridad han difundido imágenes del cadáver—. Un segundo atacante ha sido detenido.
“Un asaltante abrió fuego con un Kaláshnikov contra turistas y tunecinos en la playa del hotel”, ha afirmado un trabajador de uno de los complejos hoteleros. “Solo ha sido un atacante. Era un hombre joven que vestía pantalones cortos y parecía un turista”, ha añadido.
Las víctimas extranjeras son, en su mayoría, de nacionalidad belga, británica y alemana. El Ministerio del Interior español ha confirmado que no consta que entre las víctimas haya españoles. La irlandesa Elizabeth O’Brien, que se hospedaba en un hotel vecino con sus dos hijos, ha afirmado a la cadena de radio irlandesa RTE que se han vivido momentos de pánico en la playa durante el tiroteo. “Sinceramente, pensé que eran fuegos artificiales, pero cuando vi que la gente corría… pensé, Dios, son disparos”, ha relatado. “Los camareros han comenzado a gritar ‘¡Corred, corred, corred!”.
La playa está a escasos metros de los jardines y piscinas del hotel, un resort de grandes halls con suelos de mármol ahora venido a menos, que en el momento de su apertura fue uno de los más lujosos de la costa tunecina.
El autodenominado grupo Estado Islámico hizo un llamado a sus militantes alrededor del mundo para que incrementaran sus ataques durante la celebración del mes del ramadán que inició el pasado 18 de junio, cuando también se cumple un año desde que anunciaron la conformación de un califato.
El de este viernes es el segundo atentado terrorista cometido en los últimos tres meses tras el asalto del museo del Bardo, en Túnez, la capital del país, perpetrado el pasado 18 de marzo. Este ataque fue llevado a cabo por dos individuos entrenados en Libia y vinculados a la red de Al Qaeda en el Magreb.
Por el momento, ningún grupo ha asumido la autoría del ataque, pero el norte de África ha sufrido varios ataques yihadistas con anterioridad.
El turismo es uno de los sectores clave de la economía tunecina (7% del PIB). Los atentados en el Bardo y la revolución contra el dictador Ben Ali han mermado precisamente este sector. (Con datos de BBC)