DEPORTES
Luego de ser atacado por una periodista el refugiado sirio trabajará como técnico en una de las divisiones inferiores del Getafe de España, tras un ofrecimiento del club al conocer que dirigió un equipo de primera división en Siria.
Después de que su imagen diera la vuelta al mundo al caer al suelo con su hijo en brazos, por la zancadilla de una periodista húngara, el duro viaje a Europa del sirio Osama Abdul Mohsen tendrá un final feliz: hoy comenzará en Madrid una nueva vida como entrenador de fútbol.
Su historia, publicada hace unos días por el diario español “El Mundo”, llamó la atención del director de una escuela de entrenadores del deporte rey en España, quien le ofreció la oportunidad de incorporarse a su plantilla en la capital española.
El fútbol ya había marcado sus vidas. Osama llegó a entrenar a un equipo de primera división en su país. Uno de sus hijos quería convertirse en el “Messi” sirio. Pero la guerra irrumpió en sus planes y la familia, lejos ya de los campos de juego y el banquillo, se vio obligada a poner rumbo hacia el exilio.
“A raíz de leer el artículo (en la prensa), surgió la idea de ayudarle. Fue todo muy rápido. Como teníamos el obstáculo del idioma, un alumno de la escuela que habla árabe se ofreció a colaborar”, explicó a los micrófonos de la emisora Cadena Ser el responsable del centro de formación de entrenadores, Miguel Ángel Galán, pre candidato a la presidencia de la Real Federación Española de Fútbol.
En Getafe, localidad madrileña donde se ubica la escuela Cenafe, esperan a Osama y a su familia con los brazos abiertos. Esta misma noche tendrán una vivienda a su disposición y, si todo sale según lo previsto, el sirio se incorporará pronto a su puesto como entrenador. (Sólo fútbol)
