CONTRA TERRORISMO
El presidente de EU promete intensificar los esfuerzos para eliminar al Estado Islámico y evitar más ataques como el ocurrido en París
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, prometió intensificar los esfuerzos para eliminar al Estado Islámico y evitar más ataques como el ocurrido en París, al tiempo que instó a su par ruso, Vladimir Putin, a ayudarle en la lucha contra el grupo yihadista en Siria.
Un funcionario de la Casa Blanca dijo que Obama y Putin sostuvieron una reunión bileteral de 35 minutos el 15 de noviembre-en los márgenes de la cumbre de las economías del G-20 en Turquía- y concordaron en la necesidad de alentar una transición política en Siria, ya que los eventos en París añaden urgencia al asunto.
La cumbre de dos días reunió a Obama y a otros jefes de Estado en una ciudad turca situada apenas a unos 500 kilómetros de Siria, donde un conflicto de más de cuatro años ha transformado al Estado Islámico en una amenaza global de seguridad y provocó la mayor migración hacia Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
Obama describió la masacre en París, donde el viernes murieron al menos 129 personas en una serie de atentados coordinados, como un ataque contra el mundo civilizado y dijo que Estados Unidos trabajaría junto a Francia para hallar a los responsables.
“Tradicionalmente el G-20 ha sido un foro que discute los asuntos económicos que afronta el mundo (…) (pero) el cielo se ha oscurecido por estos horrorosos actos en París”, declaró el mandatario demócrata.
“Estados Unidos y sus aliados redoblarán los esfuerzos para encontrar una solución pacífica al conflicto en Siria y evitar que los militantes del Estado Islámico lleven adelante ataques como el de París”, sostuvo.
UN LLAMADO A RUSIA
Los esfuerzos para combatir al Estado Islámico se vieron complicados cuando Rusia intervino en el conflicto hace un mes y medio, atacando zonas controladas mayormente por opositores al presidente sirio, Bashar al-Assad, un aliado del Kremlin, en lugar de dirigir sus bombardeos contra los grupos extremistas.
Estados Unidos, Turquía y sus aliados desean que Assad abandone el poder. Obama se reunió con Putin para un almuerzo en el que los líderes concordaron en la necesidad de impulsar una transición que incluya negociaciones mediadas por Naciones Unidas, de acuerdo con la Casa Blanca.
Putin y Obama conversaron “extensamente”, según reportes de los medios rusos que citaron al máximo asesor de política exterior del Kremlin, Yuri Ushakov. “Las bases estratégicas relacionadas con la lucha contra el Estado Islámico, son, en principio, muy similares, pero hay diferencias de tácticas entre los bandos”, aseveró.
Obama y sus aliados occidentales enfrentan la interrogante de cómo deberían responder a la amenaza del Estado Islámico, ahora que el grupo ha demostrado nuevamente que su influencia va más allá de sus bastiones en Irak y Siria. Estados Unidos espera a continuación que Francia asuma un rol más activo en la campaña militar internacional contra el grupo yihadista. (Con datos de CNN)