WASHINGTON
POR: ALIRIO ALEMÁN
La embajada y consulado salvadoreño en Washington da seguimiento al diálogo gubernamental con organizaciones conformadas por la diáspora en el Área Metropolitana de Washington, como parte del Plan Quinquenal de Desarrollo del presidente Salvador Sánchez Cerén, donde la ciudadanía salvadoreña en el exterior es parte entrañable de la nación y desempeña un papel fundamental en la vida del país y la construcción de su futuro.
“Este seguimiento gubernamental trae como objetivo consolidar los mecanismos de diálogo con las organizaciones de la diáspora y buscar así la participación y cooperación ciudadana a favor del bienestar y la protección de los derechos humanos de los salvadoreños en los Estados Unidos” dijo Sonia Umanzor, Ministra Concejera de la Embajada y responsable del diálogo.
Desde El Salvador viajó el Director de Enlace y Gestión Comunitaria para Salvadoreños en el Exterior, José Manuel Castillo quien expresó que “lo importante es oír las inquietudes para llevar este diálogo, donde sea su voz la que necesitamos escuchar y no la del gobierno”
Las palabras Castillo, trajo esa gota de esperanza para los líderes, pues muchas veces estas opiniones en mesas ciudadanas se han planteado en gobiernos anteriores y fueron quedando solo en propuestas.
Esta reunión dijo la cónsul Kenny López es en seguimiento a lo establecido el 15 de noviembre donde se concretó el diálogo permanente en los temas de Seguridad, Economía, Salud, Educación y así ser parte activa de los procesos de desarrollo de la gestión de la política pública del gobierno salvadoreño.
Jóvenes representados por Nancy Molina dijo sentirse complacida y con esperanzas que esta vez sí será cierta esta la iniciativa y pidió incluir el tema de cultura, y más apoyo a los jóvenes migrantes o jóvenes de la frontera, también criticó la poca asistencia y pidió que sean notificados con suficiente tiempo para no perder el hilo del diálogo.
Los líderes de organizaciones como COCIES, RENASE, COTSA, ADES y NDILON estuvieron de acuerdo a este diálogo, aunque algunos criticaron la manera del procedimiento y que sean las organizaciones quienes le propongan al gobierno y que el documento de entendimiento a firmarse el 26 de marzo sea en Washington y no en San Salvador.
Alex Núñez, dirigente de COCIES, dice que no tiene lógica que un acuerdo de esta magnitud sea firmada en San Salvador, cuando no habrá suficiente representación de la diáspora, además sería lógico que se firme en los EEUU.
Así también lo manifestó Salvador Zelaya, además de pedir directamente al gobierno central que facilite la entrada de donaciones para el pueblo, aduciendo que desde el año pasado los funcionarios de Aduana les han retenido un donativo de medicina valorado en más de 100 mil dólares y que por cuestiones de burocracia la medicina para donarla al pueblo se perderá.
Los temas de seguridad y economía son los que más preocupan a los salvadoreños en esta nación, pues cada día el pueblo sufre el flagelo de la delincuencia, la extorsión, el pandillerismo y muertes innecesarias por falta de una política más efectiva, además una economía que no alcanza a solventar y por ende obliga a la migración masiva de profesionales, los más jóvenes y familias enteras.
Los líderes y funcionarios llegaron a muchos acuerdos quedando de reunirse en febrero y firmar el documento de entendimiento final el 26 de marzo 2016.
