SALUD
La seguridad de los alimentos puede ser crucial para las personas con diabetes
La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) recuerda a las personas con diabetes (y a los que preparan alimentos para ellos) la importancia de manejar los alimentos con seguridad para evitar las enfermedades transmitidas por los alimentos.
Practicar la seguridad alimentaria es esencial, porque la diabetes puede afectar la función de diversos órganos y sistemas del cuerpo, causando que los que padecen de esta enfermedad sean más susceptibles a infecciones y patógenos que causan enfermedad transmitida por los alimentos (llamada frecuentemente “intoxicación alimentaria”).
Cuando las personas con diabetes contraen una enfermedad transmitida por los alimentos, tienen más probabilidades de padecer de una enfermedad más prolongada, de ingresar en un hospital o hasta de morir. Este incremento del riesgo es la razón por la que la elección de los alimentos y un manejo seguro de los alimentos son esenciales para controlar esta enfermedad crónica.
SELECCIONE SABIAMENTE LOS ALIMENTOS
Algunos alimentos son más peligrosos para las personas con diabetes porque tienen más probabilidades de contener virus o bacterias nocivas. En general, estos alimentos caen en dos categorías:
FRUTAS Y VEGETALES FRESCOS SIN COCINAR: Algunos productos de origen animal, como leche sin pasteurizar (cruda); quesos blandos hechos con leche cruda; huevos crudos o poco cocidos, carne, pollo, pescado y mariscos; embutidos enlatados; perros calientes inadecuadamente recalentados; y ensaladas preparadas en un mercado o establecimiento de venta de alimentos que contengan productos animales como mariscos, jamón o pollo.
SIGA LOS CUATRO PASOS DE LA SEGURIDAD CON LOS ALIMENTOS
Cualquier persona que sea diabética o que prepare alimentos para personas con diabetes debe también seguir cuidadosamente estos pasos:
LIMPIE: Lave las manos y las superficies con frecuencia. Las bacterias pueden propagarse en la cocina y llegar a las manos, a las tablas de cortar, a los utensilios, a las mesetas y a los alimentos.
SEPARE: Mantenga la carne, el pollo, los huevos y los mariscos crudos y sus jugos lejos de los alimentos listos para comer.
COCINE a la temperatura correcta. Use un termómetro de alimentos para asegurar que la carne, el pollo, los mariscos y los productos de huevo se cocinen a una temperatura interna mínima segura para destruir cualquier bacteria nociva. Tablas de Temperaturas Internas Mínimas seguras.
ENFRÍE los alimentos rápidamente. La temperatura fría retrasa el crecimiento de las bacterias nocivas. Use un termómetro de cocina para comprobar que la temperatura del refrigerador es de 40 grados F o menos y que la temperatura del congelador es de 0 grados F o menos.
CONOZCA LOS SÍNTOMAS
Consumir bacterias peligrosas transmitidas por los alimentos suele causar una enfermedad en un plazo de 1 a 3 días. Sin embargo, la enfermedad también puede ocurrir en 20 minutos o hasta 6 semanas más tarde. Los síntomas de la enfermedad transmitida por los alimentos son: vómitos, diarrea, dolor abdominal y síntomas similares a los de la influenza (como fiebre, dolor de cabeza y dolor en el cuerpo).
ENTRE EN ACCIÓN
Si piensa que usted o un familiar tiene una enfermedad transmitida por los alimentos, póngase inmediatamente en contacto con su proveedor de atención médica. También reporte la presunta enfermedad transmitida por los alimentos a la FDA: Contacte al Coordinador de Quejas del Consumidor en su área. Por teléfono: 1-800-FDA-1088 (PRNewswire)