El volcán de San Salvador, cumplirá 105 años de haber hecho su última erupción el 7 de julio de 1917. Se conoce también como Boquerón o Quezaltepec, ubicado a once kilómetros aproximadamente de la capital.
Abarca los municipios de Santa Tecla, Quezaltepeque, Colón, San Juan Opico y los departamentos de la Libertad y San Salvador. En su última erupción, causó daños en distintas poblaciones, convirtiéndose en una de las noches más trágicas de la historia de El Salvador.
Es un volcán muy activo, ha hecho erupciones en varias ocasiones generando destrucción en las zonas aledañas. En su historia eruptiva, ha perdido mil metros de altitud. Algunos pobladores creen que es un volcán dormido, pero para el que lo estudia, es muy activo. Hoy en día, hay cientos de residencias y actividades turísticas sobre él, olvidando que el nivel de riesgo sísmico y volcánico es alto.
En la actualidad, investigadores geólogos y vulcanólogos de la Universidad de El Salvador, realizan constantes monitoreos por su actividad y potencia eruptiva. Estudios indican, que en los últimos tres mil años, se han registrado unas 20 erupciones y durante los últimos quinientos años, presentó flujos de lava muy fuertes.
Por lo tanto, docentes y estudiantes de la carrera de Ingeniería Geológica de la Facultad de Ciencias Agronómicas del Alma Mater, realizan estudios en tres zonas, que están conectadas con el volcán de San Salvador, para verificar el nivel de riesgo y daño que han causado las erupciones.
Llegamos al primer punto, el Parque Ecológico el Espino, ubicado en el volcán de San Salvador o Quezaltepec. El doctor en Ciencias de la Tierra y coordinador de la carrera de Ingeniería Geológica, Miguel Hernández, reúne a los estudiantes y explica el motivo de la visita de campo.
Comenzamos a caminar, nos esperaba una cuesta muy interesante, que nos dejó sin aire y fuerzas. Al fin, llegamos al primer punto de los tres que visitamos.
LAS FUMAROLAS
Mientras hacíamos el recorrido, el doctor Hernández, explica a los futuros ingenieros geólogos el funcionamiento de las fumarolas, las cuales tienen un sistema hidrotermal con emanaciones de vapor de agua y gases volcánicos. Este tipo de práctica de campo, lo hacen constantemente para vigilar y tomar acciones de prevención, más que existe un riesgo por las actividades económicas que hay sobre él.
Seguimos caminando, nos detenemos para ver otras fumarolas y la estación de monitoreo volcánico, que fue instalada en el 2001 por la Universidad de El Salvador. Un sistema moderno, que debería de reactivarse.
“Reactivar la estación de monitoreo volcánico, será un reto para los vulcanólogos y geólogos, nos ayudará a estudiar el volcán y tener información de primera mano, más ahora que la gente vive ahí. Con la nueva carrera de Ingeniería Geológica, seguiremos visitando estas zonas, para incentivar a los futuros profesionales, que sigan estudiando la ciencia de la tierra, principalmente la geología”.
“Hemos visitado la Pedrera las Lajas, ubicada sobre la carretera a Los Chorros. En este lugar verificamos el tipo de depósitos que ha producido el volcán y la formación de material pétreo para la construcción. Se aprecia la evolución del volcán en su proceso de formación, muy interesante”.
ACTIVIDAD GEOLÓGICA
“Finalmente, llegamos al Cerro y volcán el Playón, ubicado a un costado del autódromo el Jabalí, ahí se ve la tipología de erupciones de este sistema volcánico, lo cual ahora es la zona de mayor recarga acuífera del país y que alimenta algunos municipios de San Salvador. Estas prácticas, ayudan a los estudiantes a conocer y estudiar la actividad geológica, sus tipos de rocas y suelos, que tienen los volcanes”.
“La nueva carrera, Ingeniería Geológica impartida en el Alma Mater, es el resultado de varias reuniones multidisciplinarias e ínter universitarias, que hemos tenido los docentes, autoridades de la UES, la Universidad de Palermo y Chieti-Pescara, con el apoyo de la Agencia Italiana de Cooperación para el Desarrollo, que ayudará a crear los nuevos profesionales en Geología, lo cual no existía desde hace unos 50 años aproximadamente”.
“Por el momento, docentes de la Facultad de Ciencias Agronómicas y de otras Facultades de la UES estamos trabajando 14 proyectos de investigación sobre diversos temas como: la Petrología, Geomorfología, Geohidrología, Hidrogeología, Paleontología y otras áreas relacionadas al tema.
Se cree que hay unos veinte geólogos a nivel nacional, muchos de ellos graduados en el extranjero, son muy pocos para atender problemas vinculados a la cantidad de amenazas de tipo geológicas”.
IMPULSANDO ESTA CARRERA
“Estamos haciendo los esfuerzos de seguir impulsando esta carrera, la cual solo tiene dos años de existir y lo interesante de esto, es que la mayoría de estudiantes son mujeres. El estudio de la Geología es infinito, tiene una variedad de temas a investigar, por ejemplo: la explotación de recursos geotérmicos, minerales, usos del suelo y riesgos geológicos”.
“Para desarrollar esta carrera y ser buenos educadores con los futuros geólogos, la AICS aprobó el proyecto denominado “Establecer y Desarrollar la carrera de Licenciatura en Ciencias de la Tierra con Énfasis en Geología en la Universidad de El Salvador (CASTES)”, lo cual nos servirá como una guía para la buena formación de los profesionales de Ingeniería Geológica”.
“El tema de la Geología y Vulcanología en el país, es de gran importancia para todos, hace unos días realizamos un conversatorio virtual llamado: Importancia de la Geología en El Salvador y los retos institucionales que afrontarán, donde participó la OPAMS, MARN, Protección Civil, la GEO, docentes y estudiantes de la carrera Ingeniería Geológica del Alma Mater, así como docentes e investigadores de universidades italianas, para orientar cual es el papel que deben jugar estas instituciones ante las amenazas geológicas y mitigar la vulnerabilidad de las personas”, concluye el doctor Hernández.