El porqué de los misiles de Cristiano Ronaldo

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DEPORTES

Cristiano Ronaldo se volvió a colocar primero en la tabla de máximos goleadores (40), superó a Messi con un hat-trick en un partido que parecía atascado. Resolvió el encuentro con dos goles de folha seca e hizo que los aficionados se preguntaran ¿Cómo consigue hacer eso?

Técnica parecida a la de Roberto Carlos, sólo permitido a los jugadores que consiguen que el balón alcance más de 100 km/h. El lateral brasileño maravilló al fútbol en un partido con su selección y ante la campeona del mundo por aquel entonces, Francia. Su famoso gol de falta llegó a los 122km/h y adquirió el mismo efecto que utilizó el miércoles Cristiano para acabar con el Atleti, el efecto Magnus.

Los 105 km/h de media en los disparos del portugués permiten que el esférico logre, lo que los científicos llaman, ‘la espiral del balón giratorio’. Gracias a la velocidad que alcanza el balón, el aire ejerce una fuerza en contra que crea unos remolinos de cara a la pelota que hacen que el cuero consiga esta comba.

El movimiento de rotación del balón depende del remolino que se cree enfrente, eso explica la peculiar forma que tienen ambos futbolistas de pegar a la pelota. En el caso de Cristiano, el remolino se forma de arriba a abajo, mientras que el brasileño utilizaba la válvula del esférico para crear este efecto, en su caso, de derecha a izquierda. Misma explicación para un mismo resultado: el gol.

Con los tres goles del miércoles Ronaldo se convierte en el pichichi de la Liga. Con 40 tantos se coloca, junto a Messi (39), en una posición privilegiada para pulverizar el récord que él mismo consiguió la temporada pasada (marcó 41 goles en toda la temporada 2010/11). La figura del Real Madrid lleva más goles que 12 de los equipos de Primera División (Osasuna, Sevilla, Espanyol, Getafe, Betis, Real Sociedad, Mallorca, Granada, Villarreal, Zaragoza, Sporting y Racing).

El portugués no quiere perderse ningún partido de aquí a final de temporada, y con el partido ante el F.C Barcelona a la vuelta de la esquina, Cristiano no forzó la amarilla que conlleva suspensión y continuará con su duelo particular con el argentino hasta que las tarjetas se lo permitan. (Fuente: Andoni Juanes, El Mundo)