Abogada trata que empleadores violenten la ley y no paguen los tres días de incapacidad a trabajadores

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Abogada Sulen Ayala.

La analista política, excandidata a diputada y abogada de la República, Sulen Ayala, en redes sociales de forma tácita insta a empresarios a que violentan la ley con el no pago de los tres días de incapacidad que emiten los médicos del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS), a todo trabajador que tiene un quebranto de salud y requiere de reposo en su vivienda.

Sulen Ayala, reaccionó a los llamados que hace el Ministerio de Trabajo a empleados del sector público y privado, que por ley de 1 a 3 días de incapacidad no son cubiertas por el Seguro Social y que corresponde al patrono o empleador pagar esos días, según lo contempla el artículo 50 de la Constitución de la República, el artículo 307 del Código de Trabajo y el artículo 100 de la Ley del Seguro Social.

En ese sentido, la abogada se pone a disposición de los patronos para impugnar el pago de los tres días de incapacidad médicas de sus empleados, con lo cual se demuestra que no tiene empatía con la clase trabajadora que obligadamente debe acudir al Seguro Social en busca de sanidad y por eso el ministro de Trabajo Rolando Castro, la señala como una “abogada” que vende su fuerza de trabajo a empresarios que quieren burlar la ley.

Sobre Sulen Ayala, Castro recalcó que ella no es una empresaria y menos dueña de medios de producción. “Ella es una trabajadora que vive de un ingreso mensual al igual que los demás empleados, pero es totalmente radical y mezquina contra la clase trabajadora que sufre de un quebranto de salud”, dijo.

“Los malos empresarios que quieran evadir la ley contratando este tipo de asesores legales, solo les diré una frase popular. El que paga mal, paga dos veces”, insistió el funcionario e hizo un llamado a los empresarios, a que “no paguen “asesores legales” que no saben hacer su trabajo”.

Por otra parte, Rolando Castro explicó que en el pasado esta señora al igual que otros abogados y empresarios, influían en el Ministerio de Trabajo y mandaban al titular de esa cartera de Estado. “Hoy lo siento, no mandan ustedes y se impone el imperio de la ley”, concluyó.