El presidente de la Asamblea Legislativa, Ernesto Castro, manifestó que el país no debe recordar a quienes fueron responsables del derramamiento de sangre de salvadoreños durante el conflicto armado que se vivió entre 1980 y el 1992 y que conocemos como década perdida.
El pronunciamiento del legislador se dan luego que se diera a conocer que personal del Ministerio de Obras Pública iniciaron la demolición del Monumento a la Reconciliación que fue construido e inaugurado en el gobierno del expresidente de la República, Salvador Sánchez Cerén y que simbolizaba la cordialidad de elementos de la Fuerza Armada y de la antigua guerrilla del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).
“Nunca más se glorificará a aquellos que tanto daño le hicieron al país en la guerra y en la postguerra. Nuestro reconocimiento es a las víctimas del conflicto. Al pueblo salvadoreño”, escribió Castro a por medio de su cuenta X.
“Nuestro repudio a aquellos que propiciaron el derramamiento de sangre entre hermanos, todo por ideologías externas nacidas de la mentira”, recalcó el funcionario.
El ministro de Obras Públicas (MOP), Romeo Rodríguez, anunció este miércoles el inició de los trabajos para construir un nuevo espacio público en ese lugar y que tendrá conexión con el parque Bicentenario.