El Gobierno de Trump afirmó que está eliminando protecciones sindicales de 47.000 trabajadores de la Administración de Seguridad en el Transporte, incluido el derecho a la negociación de un contrato colectivo.
El presidente nacional de la Federación Estadounidense de Empleados Gubernamentales, Everett Kelley, condenó la medida y la definió como un “pretexto para arremeter contra los derechos de los trabajadores estadounidenses comunes en todo el país por su afiliación sindical”.
El viernes, a unos 80.000 trabajadores del Departamento de Salud y Servicios Humanos se les ofrecieron pagos únicos de hasta 25.000 dólares si aceptan renunciar a sus puestos de trabajo antes del 14 de marzo.
La oferta se produjo luego de que algunos investigadores de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, cuyo trabajo es financiado con fondos federales, recibieran una encuesta en la que debían explicar de qué manera sus trabajos se alinean con los objetivos del Gobierno de Trump.
La cadena ABC News informa que a los trabajadores se les consultó si sus investigaciones contribuían a combatir la “persecución contra los cristianos”, proteger a las mujeres y a los menores de las llamadas “ideologías extremistas de género” o a frenar la inmigración. (Fuente: Democracy Now)
