EL EVANGELIO EN MARCHA
¡Se vale soñar!
Hay una expresión que en todas partes es muy conocida pero donde yo vivo frecuentemente se utiliza cuando una persona comienza a platicar sobre algún deseo un tanto difícil de cumplir para la opinión de los demás, o una meta a la que ello dudan que se puede llegar, apenas y comienzas a hablar de tus deseos y no tardan en darte por respuesta: “se vale soñar”, y aunque lo hacen en un sentido de burla porque hay quienes lo dicen como si estuvieras hablando de algo imposible, tomando el lado positivo de esa expresión, podemos darnos cuenta que es totalmente cierta y transformarla de un sarcástico “se vale soñar” a un entusiasta ¡se vale soñar!
Los sueños son deseos, anhelos y visiones que provienen de lo más profundo de nuestro corazón, son cosas que realmente deseamos desde personales hasta materiales, y claro que son válidos, Dios nos hizo seres humanos con sentimientos y deseos, con imaginación y aspiraciones.
Las personas que se permiten soñar, regularmente son las que viven con ganas de superarse, de tener una vida mejor, tienen una idea clara sobre algo que están dispuestos a realizar y sobre todo creen que pueden hacer mas que un sueño una realidad.
Todos tenemos algún sueño, algo que queremos y deseamos con todo nuestro corazón, tal vez ser los mejores profesionistas, los mejores en la escuela, formar una familia, servir a Dios en gran manera, etc., también nos ha pasado en el algún momento hemos escuchado opiniones de otras personas que dicen que no podremos, o ponen en duda nuestra capacidad para cumplirlos.
Tal vez has escuchado tantas veces que tus sueños no sirven de nada, o que son imposibles, que tu mismo has dudado de tu capacidad para hacerlos realidad, pero te tengo noticias: Jesús dijo: si puedes creer, al que cree todo le es posible (Marcos 9:23).
Si tu tienes un sueño y crees que puede hacerse realidad, entonces es posible que suceda, a pesar de que los demás no crean en ti o en algunos casos hasta se burlen y piensen que eres solo un soñador, basta con que tu lo creas y te decidas a entregarle tus sueños al único que los puede hacer realidad, Dios es especialista en cumplir los sueños de las personas, sueños que son para bien, que nos ayudan a desear ser mejores y si son respaldados por Él, no tardarán en cumplirse.
No desistas de tus sueños, no dudes de todo eso que te imaginas que puedes hacer, no renuncies a algo solo porque los demás no creen, a fin de cuentas los sueños son personales, ¡se vale soñar!
Que no se apague tu luz
Todos tenemos un brillo especial ante Dios, algo que nos hace únicos ante sus ojos, a cada uno le es dado en iguales proporciones pues a todos nos ama por igual, pero eso si, depende de cada quien cuidar la luz que se le ha dado para que nunca se apague.
Pero ¿Qué pasa cuando nuestra luz comienza a apagarse poco a poco, cuando el desánimo y losa tropiezos parecen ser mas fuertes que la luz que nos hace brillar para Dios?
En ocasiones cuando algo pasa, cuando dejamos entrar el miedo o las dudas, como el preguntarnos si realmente seremos buenos en lo que estamos haciendo, nos confundimos y hasta llegamos a pensar que hemos perdido el tiempo haciendo algo que no nos ha dado los resultados que esperábamos, o mas bien, en el tiempo que los esperábamos, o simplemente esos comentarios que escuchamos sobre nosotros que lejos de traernos una critica constructiva resulta lo contrario y nos lastima.
Todo parece ser tan importante que en lugar de cuidar la luz que nos fue otorgada dejamos que vaya perdiendo su fuerza, pero no nos detenemos a pensar en quien nos ha dado ese bello regalo. ¿Acaso será que lo recibimos de quien nos critica? ¿Nos llego repentinamente?
Y es que nos afecta tanto lo que está a nuestro alrededor que prestamos atención a todo, y dejamos al final lo que Dios piensa de nosotros, olvidando que él nunca se equivoca, que si nos ha dado algo es por que sabe que somos capaces y tenemos la suficiente habilidad para desarrollarlo, por que solamente él ve mas allá de lo que los demás pueden ver en nosotros.
Ese es un regalo único, pero depende solamente de nosotros cuidarlo y hacer que no se apague la luz brillante que nos distingue de los demás.
Tu luz puede ser en este momento fuerte y brillante, pero también puede ser que se ha ido apagando con todo lo que hay a tu alrededor, pero sabes algo, Dios está esperando que dejes de escuchar y prestar atención a esas cosas que te hacen dudar y pensar que no eres bueno y tu luz no sirve de nada, Dios quiere que salgas al mundo y le muestres que tu luz es mas intensa que cualquier cosa, situación o circunstancia que se te presente, para que cuando haya oscuridad en tu vida tu puedas brillar y no te pierdas entre las penumbras, para que cuando alguien se acerque a ti pueda ver la luz de Dios tan intensa y brillante que ellos también querrán tenerla, entonces preguntarán ¿Qué eso que te hace diferente y único? Y tu respuesta sea: es la luz que Dios ha puesto en mí.
Así que si tu luz está por apagarse no la dejes, lucha por mantenerla, si te dicen no puedes, no escuches que tu puedes hacer cuanto te propongas con la ayuda de Dios sin importar lo que los demás piensan, ni los vientos que quieran apagarla, a fin de cuentas, si Dios te la ha dado es por algo.
Y hoy te dice:
“Levántate, resplandece; porque ha venido tu luz, y la gloria de Jehová ha nacido sobre ti” Isaías 60:1 (Fuente: Maite Leija, mensajes de ánimo)