EL EVANGELIO EN MARCHA
Dios siempre está cerca
La necesidad de alguna palabra de aliento, de algo que nos haga sentir o recordar que no estamos solos, que pueda haber alguien en nuestra misma situación, alguien que esté pasando por algo similar a lo que nos pasa, aun y cuando sentimos que nadie tiene tantos problemas como nosotros mismos, nos lleva a buscar a quien nos pueda dar un consejo, unas palabras motivadoras o un poco de comprensión, pero lo cierto es que hay ocasiones en que ni con todas las palabras del mundo podemos corregir algún motivo que nos entristece, ni cambiar esas veces en que nos va algo mal o las cosas no nos han salido como lo planeamos, en algún momento todos experimentamos sentimientos de soledad, de desanimo, de miedo, de incertidumbre.
Buscamos la manera de no sentirnos así, pero no la encontramos, pedimos consejos pero hay veces que hasta parece que nadie nos entiende, sentimos que estamos realmente solos a causa de la indiferencia de algunas personas cercanas, y a pesar de tener amigos creemos que nadie comprende lo que nos pasa, situaciones de soledad, decepción, frustración y desaliento son muy comunes, más de lo que deberían, los motivos sobran, y lo malo de eso, es que nos dejamos llevar por todo lo que sentimos en el momento, a tal grado que en nuestra mente aparecen todos esos pensamientos y al darles oportunidad de entrar, pronto llegan hasta nuestro corazón y es cuando comienzan a apartarnos de la gente para dar lugar a donde comenzamos a sentirnos solos, abandonados e incomprendidos.
Tal vez llevas algún tiempo sintiendo algo parecido a esto, pero debes tener en cuenta que si en un momento has pensado que la vida te ha dado la espalda puedes tomar ventaja de nuevo, que no hay una sola persona en el mundo que sea perfecta, por lo tanto alguna vez podemos llevarnos una decepción, que no existe la eternidad en la tierra y algo o alguien puede hacernos falta, y que no todos pensamos de la misma manera, por lo tanto también hay momentos en los que nos podemos sentir incomprendidos, y que la soledad es el único sentimiento imaginario que tenemos, el creer que vamos solos contra el mundo, tal vez puede que no tenemos cerca a todas las personas o a esa persona en especial que nosotros quisiéramos, pero eso no quiere decir que no haya alguien cerca de nosotros, algún amigo, familiar, conocido, persona de la iglesia y el más importante de todos, DIOS.
Y si bien es cierto que hay quienes teniendo gente alrededor se siguen sintiendo solos, también debes saber que aunque no puedes ver a Dios, siempre está contigo, algunas veces solo observándote de lejos, y otras más cerca de lo que te puedes imaginar, por mucho que parece que todos se han ido, o que no hay a quien más recurrir en determinados momentos, cuando más lo necesitas y cuando ya las palabras parecen no ser suficientes, cuando parece que no hay salida ni nada más que hacer…Dios siempre está cerca para salvar a los que no tienen ni animo ni esperanza. Salmos 34:18 (Traducción en lenguaje actual) (Fuente:Maite Leija)