ESTADOS UNIDOS
El juicio contra John Edwards terminó el jueves de manera abrupta. Un jurado declaró inocente de un cargo de fraude al candidato frustrado a presidente de Estados Unidos, pero no llegó a ningún acuerdo sobre el resto. El político, antigua estrella del partido demócrata, estaba acusado de desviar fondos de su campaña para encubrir ante el público y ante su mujer enferma de cáncer que había tenido un hijo con una amante.
Edwards estuvo cerca de conseguir la candidatura demócrata en 2004 y se presentó de vicepresidente con John Kerry.
A las puertas del tribunal, el ex candidato insistió en que quería asumir toda la responsabilidad moral de sus traiciones. “No creo que hiciera nada ilegal, pero hice muchas, muchas cosas que estuvieron mal. Yo soy el único responsable. Si quiero buscar a una persona responsable de mis pecados, sólo tengo que mirarme al espejo. Soy yo”, dijo Edwards, acompañado de su hija adolescente y de sus padres octogenarios. Le tembló la voz al mencionar a sus hijos, incluida la que tuvo con su amante, y a su esposa muerta. “Quiero dedicar mi vida a ser el mejor padre del mundo”, aseguró.
En 2004 y 2008, el candidato utilizó a su esposa, Elizabeth Edwards, como un activo de la campaña. Ambos solían contar la lucha contra el cáncer de ella o cómo superaron la muerte de su hijo. La pareja se separó a principios de 2010. Elizabeth murió en diciembre de ese año un día después de que su familia anunciara que el cáncer de pecho se había reproducido.
Proceso nulo
Durante cuatro años, Edwards escondió su aventura con Rielle Hunter y la hija de ambos con un complicado sistema en que mantenía a la mujer y a Andrew Young, un asesor de campaña que se hizo pasar por padre de la niña a petición del candidato. Ahora, se juzgaba si gastó ilegalmente fondos de su campaña para que la supuesta familia (que también incluía a la esposa verdadera de Young) viajara por todo el país, lo más lejos posible de las cámaras.
El jurado sólo ha decidido sobre uno de los seis cargos que pesaban contra Edwards. El juez declaró el resto del proceso nulo por falta de acuerdo. La Fiscalía tiene la opción de volver a presentar los cargos. (Fuente: María Ramírez, El Mundo)