EEUU INMIGRACION
Desde el miércoles 15 de agosto, cerca de 1,7 millones de jóvenes indocumentados pueden solicitar al gobierno de Estados Unidos que cancele cualquier orden de deportación pendiente sobre ellos y que les conceda un permiso de trabajo temporal. El presidente Obama firmó una orden ejecutiva hace dos meses para aprobar esta medida, que calificó de “justa” porque “levanta la sombra” de la deportación de millones de ‘sin papeles’.
“Esto ocurre una vez en la vida, quiero hacerlo bien”, dice Vanessa Núñez, una joven venezolana que ha agotado todas las peticiones de asilo presentadas en EE UU y que cuenta con un caso de deportación todavía pendiente. “Espero que esta medida ayude a cancelarlo, quiero poder seguir estudiando y trabajar. Es un gran paso para mí”, afirma Núñez, de 23 años, mientras se prepara para presentar este miércoles sus documentos.
En Miami, Diego Sánchez también recopila las pruebas con los que demostrar que entró al país hace doce años junto a sus padres desde Argentina. No supo que era indocumentado hasta que no preguntó en casa por qué él no pedía plaza en la universidad, a los 17 años, como todos sus compañeros. “Sentí miedo y frustración”, dice Sánchez. “Vinimos a este país para tener una oportunidad mejor y poder estudiar, ya no tenía razón para quedarme”.
El joven argentino finalmente encontró una universidad en Florida que acepta a estudiantes indocumentados. Allí se licenció en Filosofía y Psicología, pero su titulación no le servirá para ejercer hasta que tenga un permiso de trabajo. “En medio de mi último semestre llegó el anuncio de Obama. Llevo mucho tiempo esperándolo, tengo todos los papeles listos”, dice el argentino.
El Gobierno insiste en que la cancelación de las deportaciones no equivale a obtener un permiso de residencia
La medida de Obama fue reconocida como uno de los esfuerzos más positivos para los inmigrantes y, desde entonces, decenas de organizaciones celebran sesiones informativas con abogados para asesorar a los futuros solicitantes. Todos ellos deben haber entrado en el país con menos de 16 años y tener menos de 30 el pasado 15 de junio, carecer de antecedentes penales, residir en EE UU desde hace cinco años de manera continuada, ser estudiante o haberse graduado recientemente de la universidad, o pertenecer al Ejército. El Gobierno insiste en que la cancelación de las deportaciones no equivale a obtener un permiso de residencia y garantiza que no compartirá sus identidades las autoridades de inmigración y que ésta no podrá abrir un caso de deportación contra ellos. Aún así, Núñez reconoce que “el miedo está ahí”.
Para Sánchez la decisión de Obama fue “una grandísima victoria”. Es uno de los miles de jóvenes que desde hace meses protagonizan actos de protesta por todo el país para pedir una solución. Hasta finales de 2010 su mirada estaba puesta en el Congreso, donde espera su aprobación el DREAM Act, la ley que les ha dado el apodo de ‘dreamers’ (soñadores) y que abriría una vía a la ciudadanía para miles de jóvenes indocumentados. Pero fue rechazada aquel mes de diciembre y los soñadores decidieron exigir responsabilidades a Obama.
Y aunque el presidente se había negado durante más de tres años a ejercer su poder ejecutivo, el descontento de la comunidad hispana, la presión de las elecciones presidenciales y el efecto negativo de las deportaciones entre los latinos, fueron argumentos suficientes para ceder.
Ahora el joven argentino habla de los “sentimientos encontrados” de la comunidad y las dudas sobre el futuro de esta medida si el presidente pierde las elecciones, ya que si el candidato republicano Mitt Romney llega a la Casa Blanca podría cancelar su renovación. “Si hay un número importante de solicitudes será muy difícil revocar una norma tan popular”, dice el joven. “Pero también sabemos cuántos defienden medidas más duras contra los indocumentados”.
Embajada de El Salvador y consulados listos
La Embajada de El Salvador en Estados Unidos anunció esta semana que se encuentra lista para colaborar con los jóvenes salvadoreños ante el lanzamiento de la ley denominada Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), que brindará estabilidad migratoria a miles de jóvenes indocumentados residentes en Estados Unidos.
La Embajada ha girado a nuestros 16 consulados una guía de información sobre el DACA, que deberá distribuirse a los potenciales beneficiados en Estados Unidos; asimismo, a organizaciones comunitarias. Esta guía contiene la más reciente información, brindada por las autoridades estadounidenses, sobre el beneficio migratorio.
Por el momento, nuestros consulados tienen instrucciones de trabajar de la mano con organizaciones comunitarias, asociaciones de abogados de migración y otras instituciones que faciliten el procesamiento de sus formularios y brinden orientación migratoria al respecto. Además, se le ha instruido a los consulados que de manera expedita faciliten la obtención de documentos de identidad para los jóvenes beneficiarios.
Desde el Ministerio de Relaciones Exteriores en San Salvador, se trabaja para que los jóvenes salvadoreños beneficiarios puedan contar con un apoyo crediticio que le ayude a sufragar los costos de la aplicación al DACA. (Con datos de Cristina F. Pereda, EL PAIS)