EEUU INMIGRACION
El polémico alguacil de Arizona dijo que el gobierno de Obama debería darle una medalla por combatir la inmigración ilegal
El alguacil del condado de Maricopa, en Arizona, Joe Arpaio, dijo este miércoles que si fuera presidente de Estados Unidos se reuniría con Enrique Peña Nieto, presidente electo de México, para ofrecerle apoyo para detener la migración ilegal fronteriza y el narcotráfico.
“Si yo fuera presidente y me reuniera con él, le diría ‘trabajemos juntos, si necesitas potencia de fuego, si necesitas ayuda con tu Ejército o tu policía federal, estaremos contentos de ayudarte”, dijo.
Agregó que también aconsejaría a Peña Nieto que “no critique a Estados Unidos” por sus acciones, pues ambos países comparten el problema de la migración ilegal. “Enviamos tropas a Afganistán y a otros países, ¿por qué no podemos ayudar a nuestros vecinos, al gobierno mexicano, para resolver el problema, especialmente la violencia que está ocurriendo?”, preguntó.
“Es una calle de doble vía, se requiere la cooperación mutua”, enfatizó Arpaio, de 80 años, y quien ha sido elegido y reelegido como jefe de Policía de ese condado de Arizona desde 1992.
Actualmente aguarda el veredicto de un tribunal federal en Phoenix por prácticas de perfil racial, después de un juicio iniciado por el gobierno federal que lo acusó de “prácticas discriminatorias ilegales usadas por la Policía contra los latinos”.
El polémico alguacil también dijo este miércoles que el gobierno de Barack Obama debería otorgarle una “medalla” por combatir a los inmigrantes indocumentados en vez de investigarlo.
“Yo debería estar recibiendo una medalla. El presidente debería invitarme a la Casa Blanca y darme las gracias por ayudar al gobierno a combatir la inmigración ilegal y los cárteles de la droga”, dijo Arpaio en Tampa, Florida, durante un encuentro con la prensa extranjera que cubre la Convención Nacional Republicana.
Arpaio, considerado un “héroe” entre grupos antiinmigrantes en todo el país, cree que es una “ironía” haberse dedicado a combatir el narcotráfico y la inmigración, y ahora ser “perseguido” por el Departamento de Justicia.
Arpaio se encuentra en Florida para respaldar la candidatura presidencial del republicano Mitt Romney. Sostiene que si éste gana la presidencia en noviembre próximo, el Congreso de Estados Unidos debería tratar con él para resolver el problema de la inmigración ilegal por la vía legislativa.
Cuestionado sobre la plataforma republicana aprobada este martes, que defiende la “mano dura” contra los indocumentados, reiteró su postura de que la primera misión de EU es “hacer cumplir sus leyes” y que quienes las violan deben ir a la cárcel.
Arpaio defendió el arresto y deportación de indocumentados como medida disuasoria contra la inmigración ilegal. “Me opongo a un muro (fronterizo), pero una vez que lo saltas, debes ir a la cárcel; eso sería una gran disuasión”.
La inmigración ilegal ha sido uno de los temas centrales en este ciclo electoral, y los votantes hispanos se perfilan como un bloque decisivo en varios estados clave. (Con datos de El Mundo)