EL EVANGELIO EN MARCHA
Por: Boris López, Tabernáculo Bíblico Bautista, Manassas, Virginia (borislopez986@yahoo.com)*
Seguir adelante en la vida cristiana a veces es difícil, se torna difícil porque encontramos en el camino muchos obstáculos a los que tenemos que sobreponernos, algunos tenemos que saltarlos, otros evadirlos, pero a la larga van a causar en nosotros cierto cansancio o fatiga. Probablemente sean situaciones a las que nos enfrentamos a diario y quizás por siempre, es por eso que se necesita un grado mayor de convicción, una resolución de vida para seguir adelante, un compromiso de vida. Así funciona la vida cristiana, solo cuando hemos llegado a la determinación de seguir adelante, pase lo que pase, es cuando realmente el camino se hace mas corto, porque ya no contemplamos el volver atrás. Es en esta convicción cuando tenemos que evaluar los resultados. Cuando una persona decide seguir adelante, indudablemente arrastrará a otros al éxito porque verán su ejemplo de perseverancia y ese testimonio servirá como un incentivo, como un aliciente para aquél que vio el caminar del que no se rindió.
Cuántas veces no hemos visto continuar a los demás gracias al ejemplo de aquellos que representaron un verdadero desafío de vida. Muchas madres sembraron en su perseverancia en el camino de Dios un camino a seguir a sus hijos y a la larga, con el tiempo, este pensamiento prevaleció en aquellas mentes que nunca borraron, aunque lo hubieran querido, esas vidas dedicadas a no rendirse. Hoy en día conozco personas que han seguido adelante gracias a que hubo alguien que no se rindió.
Y es que al no rendirse y continuar la faena, indudablemente se alcanza la meta y vienen los frutos. Qué bueno es escuchar expresiones tales como: – es que mi madre nunca dejó el camino de Dios” o “-es que mi padre siempre se mantuvo firme en su fe”. Ese legado, mueve, ese legado da herencia.
Amigo o amiga, ¿se ha dado cuenta que es usted el llamado a seguir adelante y no rendirse para quedar en la historia como aquel que a pesar de las circunstancias superó las adversidades y cosechó los triunfos? En la congregación donde sirvo de ministro he podido ver como aquellos que nunca se dieron por derrotados, han servido como columna fundamental para que uno o cada miembro de su familia haya llegado a los caminos del Señor. Todo comenzó en una voluntad férrea resuelta, en una convicción plenamente humana: seguir y no desmayar a pesar de los problemas. Hoy en día, estas personas cosechan vidas ejemplares porque supieron anteponerse y no se conformaron a su situación, sino que siguieron adelante y con ello arrastraron al éxito a todos sus seres queridos.
En la palabra de Dios encontramos la siguiente cita: “Ahora, pues, temed a Jehová, y servidle con integridad y en verdad; y quitad de entre vosotros los dioses a los cuales sirvieron vuestros padres al otro lado del río, y en Egipto; y servid a Jehová.Y si mal os parece servir a Jehová, escogeos hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a Jehová.” (Josué 24:14-15.), fue Josué este hombre valeroso, sucesor del gran Moisés, el que supo ser ejemplo de su generación, a pesar de la idolatría, a pesar de que otros se iban de los caminos de Dios, a pesar de los malos ejemplos, él decidió seguir adelante, y fue capaz no solamente de llevar a unos cuantos a tener la inspiración de seguir adelante, su entereza, su fidelidad a Dios hizo que todo un pueblo, un par de millones de personas siguieran adelante.
El pueblo entonces dijo a Josué: No, sino que a Jehová serviremos. (V 21). Es en esta ocasión, en la que debemos de descubrir que si estábamos esperando a alguien que nos sirviera de ejemplo, ya no lo busquemos, somos nosotros los llamados a seguir adelante para de esa forma sirvamos de ejemplo a nuestros amigos, a nuestros familiares a nuestros seres queridos. De nosotros hablarán en el futuro, dirán: Nunca se rindió y de esa forma estaremos aportando para las vidas de los demás.
Jesucristo nos llama a sus caminos y que podamos encontrar en él el motivo para no rendirnos, solo así y únicamente así podremos mantenernos y de esa forma ser ejemplo a nuestra generación, en Jesús la esperanza de Gloria que permite que podamos ver siempre al blanco perfecto y no desmayar. Nuestra convicción tiene poder, el poder de hacer que otros sigan adelante a pesar de las circunstancias porque vieron el ejemplo en nosotros, ese es nuestro llamado en la vida. No nos rindamos, que la vida de otros depende de ello.
*El pastor Boris López, es graduado del seminario de la Misión Bautista Internacional de El Salvador.
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