CONNECTICUT EEUU
En otro día de dolor, tres pequeñas víctimas más de la masacre en Newtown fueron sepultadas el jueves, en medio de procesiones de sus dolientes.
Allison Wyatt, de seis años, amaba pintar y quería ser artista; Benjamin Wheeler, de seis años, era un gran fan de los Beatles y la pelirroja Catherine Hubbard, de seis años, amaba a los animales.
También se realizó un servicio para recordar a la maestra Lauren Gabrielle Rousseau, de 30 años, que apenas acababa de ser contratada de tiempo completo en noviembre.
Newtown se prepara para ver ataúdes y procesiones por varios días más: la Asociación de Funerarias de Connecticut anunció un total de 22 servicios, nueve de ellos hasta este jueves. La lista sigue hasta el próximo sábado. Las procesiones funerales convirtieron a la época de fiestas en un periodo de desgarradoras pérdidas.
El pueblo convirtió los árboles de Navidad en memoriales para los 20 niños y seis adultos muertos en la masacre en la escuela Sandy Hook. El atacante, que se suicidó, ya había matado a su madre antes de irrumpir en la primaria.
Residentes de la pequeña comunidad han desafiado el frío y el tiempo lluvioso para honrar a las víctimas. “Es una cadena de velorios y funerales”, dice Lillian Bittman, expresidenta del consejo educativo de Newtown. “Ni siquiera podemos elegir a cuál de todos ir. Hay muchos”.
Además de pagar tributo a las víctimas, la comunidad también lo está haciendo con los que murieron protegiéndolos.
Una guardia de honor de la policía saludó a Victoria Soto, de 27 años, una maestra de primer grado que murió intentando resguardar a sus estudiantes de las balas. Se escucharon gaiteros a las afueras de la iglesia de Stratford, Connecticut. El cantante Paul Simon, un amigo de la familia, cantó The Sound of Silence.“Fuiste un ángel para esos 19 niños que protegiste, para las 19 familias y la comunidad”, dijo durante el servicio este miércoles la hermana de Victoria, Jillian. Soto quería ser maestra desde que tenía tres años.
El funeral privado de la directora de la escuela, Dawn Hochsprung, también tuvo lugar este miércoles fuera de Connecticut. También fueron despedidos los niños Daniel Barden, de siete años y Caroline Previdi y Charlotte Bacon, ambas de seis años.
Este miércoles, mientras continúan los funerales, se conocieron nuevos detalles sobre la madre del atacante. Nancy Lanza se fue de vacaciones a un lujoso hotel en Nueva Hampshire días antes de la masacre, afirmaron amigos.
Ella llegó al hotel Omni Mount Washington en Bretton el pasado martes 11 de diciembre, lugar que dejó dos días después, según el hotel.
No era inusual que realizara viajes por carretera sola, de acuerdo con sus amigos. Ella estaba de buen humor durante el viaje y sentía que dejar a su hijo solo no era problema, según sus amigos.
Las autoridades han dicho que su hijo Adam Lanza tomó las tres armas de su madre, dos pistolas y un rifle Bushmaster AR-15, para realizar el ataque.
Mató a su madre mientras dormía
De acuerdo con los últimos datos, Adam Lanza, de 20 años, autor del tiroteo que acabó con la vida de 27 personas, disparó cuatro veces en la cabeza a su madre, Nancy Lanza, cuando dormía.
El director de la Oficina del Forense de Connecticut, Wayne Carver, dijo que el joven Adam se quitó la vida con un disparo en la frente.
Carver descartó que Adam estuviera bajo medicación en el momento en que perpetró la masacre, como se había barajado tras las declaraciones de su tío Jonathan, quien dijo que su sobrino estaba siendo tratado contra la esquizofrenia.
Sin embargo, los padres de Adam habían dicho en alguna ocasión en su círculo de amigos que su hijo padecía el síndrome de Asperger, una variante del autismo, pero no se sabe aún si había sido diagnosticado formalmente.
Una de las incógnitas que aún existen en torno a la tragedia es qué motivó a Adam Lanza para disparar contra su madre, primero, y después contra los niños y adultos que el pasado viernes se encontraban en una escuela de Newtown.
Se estudia a fondo la personalidad de la madre, coleccionista de armas y aficionada a las prácticas de tiro, por si pudiera estar relacionada de alguna manera con el trasfondo de la historia. Ninguna hipótesis está descartada.
El reporte completo de la policía podría tardar meses, de acuerdo con la policía estatal de Connecticut. Los investigadores aún tienen que interrogar a varios familiares de las víctimas y a sobrevivientes, algo que tomará mucho tiempo.
El ataque a tiros reinició el debate nacional sobre el control de armas, la salud mental y la seguridad en las escuelas.
Obama habla de una propuesta para evitar violencia
El presidente Barack Obama dijo que no pasará de enero para que se presente una propuesta formal para lidiar con la violencia relacionada con las armas.
“No sabemos por qué motivo sucedió la masacre de Connecticut -donde Adam Lanza asesinó a 27 personas el pasado 14 de diciembre-, pero sí sabemos que la violencia por las armas tiene trágicas consecuencias para nuestra sociedad muy a menudo”. Con estas palabras, el presidente Obama, anunció su firme propósito de trabajar con todos los grupos para frenar “la epidemia de violencia que generan”.
“El hecho de que sea un tema complejo no puede ser más una excusa para no hacer nada. Debemos trabajar para reducir la violencia por las armas. Necesitamos hacer todos un esfuerzo. Si existe alguna cosa que podamos hacer para prevenir que algo así vuelva a ocurrir, tenemos la obligación, todos nosotros, de intentarlo”, manifestó Obama en rueda de prensa. También agregó que “esta vez las palabras deben ir seguidas por hechos”.
Por eso ha puesto a su vicepresidente, Joe Biden, al frente de una comisión y le ha pedido que presente “propuestas concretas durante enero para frenar la violencia por las armas”. “Debemos hacer las reformas políticas ahora”, afirma.
“No va a ser la típica comisión donde se estudie el tema durante seis meses y luego se publica un informe que se deja a un lado. Este equipo tiene una tarea muy específica, que es la de llegar a reformas reales ya”.
Cinco días después de la matanza en la escuela de Newtown, Obama ha insistido en que se necesita un gran acuerdo de todos los americanos y ha dicho que “como la mayoría de ellos creo que la segunda enmienda protege el derecho de una persona a tener armas”. Pero tras esta declaración ha matizado: “no creo que quienes defienden las armas estén en contra del sentido común”.
También ha presionado al Congreso para que retome una prohibición sobre las armas de asalto, que expiró en 2004.
De regreso a clases
También este martes han reabierto sus puertas los centros educativos de la localidad, excepto las de la escuela elemental Sandy Hook, donde tuvieron lugar los hechos.
Según explicó el jefe de la policía estatal de Connecticut, Paul Vance, la investigación sobre la escena del crimen aún está en curso y podría durar meses. No se descarta que la escuela no vuelva a abrir nunca.
Mientras tanto, los alumnos de la escuela elemental Sandy Hook utilizarán las instalaciones de otro edificio escolar, Chalk Hill, que está en desuso en la vecina localidad de Monroe, pero no lo harán hasta después de las vacaciones navideñas, el próximo enero. (Con datos de CNN y El Mundo)