WASHINGTON
La recién designada como la nueva presidenta de la Reserva Federal de Estados Unidos, Janet Yellen dedicó sus primeras palabras en público a los parados. La elegida para liderar el banco central, estudiosa del mercado laboral, dijo que serán su prioridad para dirigir ahora la política monetaria.
“Hay que hacer más para fortalecer la recuperación”, dijo Yellen este miércoles 9 de octubre en la Casa Blanca, junto al presidente Barack Obama, que la acababa de presentar como su candidata para suceder a Ben Bernanke en febrero. La actual vicepresidenta de la Fed recordó que pese al “progreso” tras “seis años tumultuosos”, muchos estadounidenses siguen sin lograr “encontrar trabajo y pagar sus cuentas”.
Sus comentarios apuntan a que con ella continuará la política de la Fed de intereses al mínimo y compras de bonos para meter más dinero en la economía.
Obama alabó el “buen juicio” de Yellen, que anticipó la burbuja inmobiliaria, y su dedicación a la política monetaria. Incluso personal. Su marido y su hijo son economistas y su plan de vacaciones perfecto, como recordó Obama, es “una playa y una maleta llena de libros de economía”.
El presidente también destacó la relevancia histórica de que Yellen sea mujer. La Fed nunca ha tenido a una presidenta y en el mundo hay pocos ejemplos, como las gobernadoras de Rusia, Sudáfrica, Malasia o Botsuana.
El nombramiento de Yellen aún tiene que ser aprobado por el Senado, donde los demócratas tienen mayoría y donde ella ya recibió el visto bueno como vicepresidenta de la Fed con apoyos de los dos partidos.
Varios senadores republicanos han expresado reparos por su política expansionista y menos concentrada en controlar la subida de precios, pero nada indica que se vayan a unir para bloquear el nombramiento alargando el debate. Las audiencias comenzarán en las próximas semanas.