¿Buscas la ayuda de Dios?

0
609

EL EVANGELIO EN MARCHA

¿Buscas la ayuda de Dios?

Por: Pastor Boris López

 

PAG 18Dios está al alcance de todos, de nuestra decisión, al alcance de aquellos que le buscan. Dentro de la búsqueda de Dios existen diferentes categorías. Hay una pasaje en el libro de Santiago en el Capítulo cuatro y versículo ocho que dice: “Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones.”. De este pasaje podemos sacar el siguiente análisis:

En primer lugar están aquellos que buscan la ayuda de Dios pero están lejos de Dios, por eso la invitación de Santiago es a acercarse a Dios para lograr su favor. El hombre natural, el no creyente, el que todavía vive lejos de Dios, tiene una búsqueda genuina de Dios, porque no tiene las respuestas que necesita. Aun los auto-denominados ateos tienen una lucha por mantener su posición de no sufrir el acercamiento a Dios, se resisten a no creer en Dios sin darse cuenta que esto representa en ellos una fe evasiva, pero que en contraste, están negando algo de lo que se quieren alejar, de modo que los no creyentes son en realidad personas que viven lejos de Dios.

Aunque el hombre por sí mismo niegue la existencia de Dios está buscando una respuesta de Dios, de modo que lo que tiene que hacer es acercarse para que Dios se deje ser visto por ellos, es una cuestión de fe. El máximo exponente del ateísmo hoy en día Stephen Hawking, físico teórico, galardonado en varias ocasiones por sus trabajos de investigación sobre singularidades espaciotemporales, ha pedido grabar en video el momento de su agonía de muerte, esto debido a que el hombre de su mayor admiración Charles Darwin, creador de la teoría del origen de la especies, al parecer al momento de morir, clamó a Dios que si había estado equivocado toda su vida con respecto a la existencia de Dios, pidió ser recibido por El en su Gloria. Un ejemplo claro de que el hombre no puede negar su crisis existencial.

En Segundo lugar están aquellos que buscan a Dios desde una perspectiva de fe, seguramente tienen una vida eclesiástica, sea cual fuere su denominación, forman parte de un grupo de los que creen ya haber alcanzado a Dios, sin embargo no viven de acuerdo a los principios establecidos por su grupo. A estos es dedicado el tema “pecadores, limpiad las manos.”, han buscado a Dios pero sin obedecerle, es una naturaleza normal, humana, cargada con vicios de heridas emocionales que les justifica su accionar, la exhortación de Santiago es que dejen de vivir una doble vida y se dediquen a vivir plenamente para su Dios.

Y por último y en tercer lugar tenemos a los de doble ánimo, aquellos que forman parte de una congregación, viven de acuerdo a los principios, hacen lo necesario para cumplir los mandamientos ordenadosy establecidos, pero todo está mal para ellos, está mal la organización administrativa, el liderazgo y forman parte del grupo de oposición que por regla general existe en cualquier grupo, para ellos siempre hace falta algo, el líder no actúa como ellos creen que es lo correcto, por eso el apóstol les exhorta a “purificas vuestros corazones”.

Para todos ellos hay una alternativa de solución al conflicto que viven, para los que están lejos y ven desde afuera la mansión en cuyo interior se desarrolla la fiesta, el proverbista les declara: “Su deseo busca el que se desvía, Y se entremete en todo negocio. No toma placer el necio en la inteligencia, Sino en que su corazón se descubra.” Proverbios 18:1-2. La solución planteada es que dejen a un lado su necedad y solo así podrán darle lugar a la sabiduría para poder acercarse a Dios.

Para aquellos que están dentro de la fe y no hacen conforme a las normas y reglas establecidas existen un final, no llegarán a cosechar nada y su fruto será en la compañía de los muertos: “El hombre que se aparta del camino de la sabiduría, vendrá a parar en la compañía de los muertos.” Salmo 20:16

Y por último, los que necesitan purificar sus corazones: no es a una institución a la que le sirven, no es a un hombre o líder, es a un Dios vivo, y un consejo es que cualquiera que sea la posición desde donde desarrollan su vida de servicio, vean al blanco perfecto que es Cristo: “Deléitate asimismo en Jehová, y él te concederá las peticiones de tu corazón.” Salmo 37:4.

En resumen la búsqueda de Dios es natural y genuina aunque esta implique la negación, y usted estimado amigo, ¿desde dónde busca a Dios? Es necesario que se acerque a Dios, que se aparte del pecado y que purifique su corazón.