“Manejando su dinero con éxito”

0
661

EL EVANGELIO EN MARCHA

“Manejando su dinero con éxito”

PARTE III

EL CRISTIANO DEBE ENTENDER EL REQUISITO DEL TRABAJO

GÉNESIS 2:15

Por: Pastor Kléber Jiménez

 

INTRODUCCIÓN

La Biblia jamás enseña que las riquezas son malas: de hecho, vemos que desde el principio, Dios proveyó de oro, bedelio y ónice: Génesis 2:11-12. También vemos que los grandes patriarcas y reyes de Israel como Salomón; David y otros eran ricos.

El problema es de cómo se obtuvieron esas riquezas. La gran pregunta es: ¿Se obtuvieron esas riquezas honestamente o deshonestamente; se las consiguieron a base de fraude, o a base de trabajo?

Había un hombre de campo muy humilde, tenía una buena relación con su esposa, trabajaban duro sembrando arroz y tenían un pequeño molino. Pero este hombre le gustaba comprar tickets de lotería; y le pegó al premio mayor.

Nunca había visto tanto dinero en su cuenta bancaria, que se transformó, compró un carro del año, compró un gran terreno al pie de la carretera de su pueblo, construyó una tremenda casa como si fuera de la ciudad, en la que instaló un molino de arroz industrial; pero, también se hizo de una amante, a quien consentía, dándole todo lo que le pedía.

Años después, tuvo que hipotecar sus bienes, porque las deudas se lo comían, pues se había despilfarrado todo el dinero; y lo más triste, que comenzó a estafar a las personas, vendiéndoles por adelantado el arroz, que a veces no lo entregaba y tenía que esconderse; el hombre quedó en la ruina.

Existe un refrán que dice: “Aquel que no tiene dinero y lo llega a tener, loco se quiere volver”. Bien dice el dicho que dinero mal habido, se va como agua entre los dedos. Entendamos algunos puntos acerca del trabajo:

 

  1. EL TRABAJAR SIEMPRE HA SIDO EL PLAN DE DIOS PARA EL HOMBRE: GÉNESIS 2:15.

 

Este versículo está antes de que Dios creara a Eva y antes de la caída del hombre; está prácticamente inmediatamente después de la creación de Adán. Uno de los propósitos originales de Dios para el hombre era que trabajara: Génesis 2:15; Salmo 73:5.

El trabajo del hombre, jamás vino como consecuencia o castigo del pecado de este; lo que vino fue que el trabajo le iba a ser más pesado y duro para el hombre; nos imaginamos que antes del pecado, el trabajo del hombre era suave o liviano; y la tierra le producía frutos fácilmente; pero por causa de la desobediencia, el hombre maldijo la tierra y trabajarla le será más duro y fatigado en extremo: Génesis 3:17-19.

Dios permite que, en algún sentido, seamos socios con El; en esta asociación, Dios tiene Su parte y el ser humano la suya: nos da de su bella creación, y nos dio el privilegio de administrarla. Selah. La parte de Dios es suplir nuestras necesidades: Filipenses 4:19.

La parte del ser humano es trabajar. Dios no nos enviará el dinero desde el cielo para suplir nuestras necesidades. Debemos de trabajar, porque el que no trabaja, que tampoco coma: 2 Tesalonicenses 3:10.

El trabajo honesto dignifica y bendice a la persona de parte de Dios, dándonos de pronto abundancia y buenos trabajos: Salmo 128:2; Proverbios 22:29.

Pero el negligente o el haragán, vendrán a ruina: Proverbios 18:9; 21:5; 24:10. El cristiano no solamente que debe ser un buen empleado en su trabajo; sino que debe ser el mejor; porque así glorificará a Dios Padre, dando un buen testimonio ante los incrédulos.

El cristiano debe tener el motivo correcto para trabajar: Colosenses 3:23-24. El trabajo es más que un medio para suplir las necesidades de la familia; es una manera de adorar y glorificar a Dios. Pues aun en el trabajo, es a Cristo Jesús que servimos.

 

  1. EL DIOS TRINO NOS HA DADO EJEMPLO DE QUE TENEMOS QUE TRABAJAR: GÉNESIS 2:1-2A.

El Padre nos ha dado ejemplo de que a pesar de que es el Dios Soberano del universo, Él trabajó en la creación del universo y de nosotros; y aún sigue trabajando por nosotros: Juan 5:17. Porque si el Dios Omnipotente, no tuviera el control de esta vasto universo, entonces nuestra existencia desaparecería.

El ser humano al ser hecho a la imagen y semejanza de Dios; lleva ese sello intrínseco en su ser de trabajar, y lo vemos manifestado aun desde que somos niños. Por ejemplo, cuando jugamos a ser papá, doctor, enfermera, etc.

Dios es la máxima expresión del modelo de trabajador; Él nunca se cansa, ni está ocupado para atendernos las 24 horas al día, los siete días de la semana, los 365 días del año. Y puede atender a todos los que le invoquen al mismo tiempo. Y lo más curioso, por así decirlo, no cobra por su trabajo, ni  exige que le paguen sobretiempo; y pero aun, pide aumento de sueldo.

Pero, qué es lo que pide el Señor por su trabajo; que los seres humanos le seamos fiel y obedientes a Él.

Y Dios Padre está trabajando en darnos un nuevo mundo a los que somos fieles a El: Apocalipsis 21:1-2.

Nuestro Salvador, es otro ejemplo modelo de trabajador: Juan 18:37; 5:17.

Él tenía bien claro desde su encarnación humana que vino a este mundo a hacer un trabajo o misión: Lucas 2:49. Nuestro Señor vino a este mundo, no a ser servido; sino a servir: Marcos 10:45.

Jesucristo entendió lo apremiante que era trabajar: Juan 9:4. Nada detuvo a nuestro Señor de llevar a cabo su misión: Mateo 26:39.

Y El cumplió la misión o el trabajo encomendado: Juan 17:4. El Espíritu Santo, trabaja en la vida del creyente: Juan 14:26; 15:26.

Llena de poder al creyente para cumplir el trabajo que el Señor nos encomendó: Hechos 1:8. El Espíritu Santo nos guía e intercede por nosotros: Romanos 8:26.

Nos capacita con poderes espirituales para edificar la Iglesia: 1 Corintios 12:11. El Espíritu Santo detiene el avance de la iniquidad en el mundo: 2 Tesalonicenses 2:7.

 

  1. DIOS SANTIFICÓ UN DÍA PARA NO TRABAJAR Y QUE SE LO DEDIQUEMOS A EL: GÉNESIS 2:2-3; ÉXODO 31:15; 34:21; 35:2; LEVÍTICO 23:3.

 

Génesis afirma que Dios reposó el día séptimo de todo el trabajo que hizo; esto no significa que Dios se cansó de trabajar y necesitó descansar; pues Él es Todopoderoso; lo que esto significa es que Dios santificó un día para que Su creación reposara en El, y más aún, sus verdaderos hijos reposemos en El: Hebreos 4:1-11.

Hay un reposo que durará por toda la eternidad, en la cual los verdaderos hijos de Dios descansaremos de nuestros trabajos; pero mientras estemos en este cuerpo y en este mundo, debemos de procurar trabajar, no solamente para las cosas que perecen, sino por las cosas eternas: Juan 6:27.

El otro principio tocante a este tema del reposo, es que Dios nos dio un día a la semana, para que se lo dediquemos a Él solamente. En el cual no tenemos que estar preocupados por los afanes de este mundo; sino que seamos obedientes a Dios y descansemos en Su presencia: Lucas 12:22-31.

Los judíos, aunque lo hacen de forma legalista, guardando el día de reposo, desde la caída del sol el viernes por la tarde hasta el sábado por la tarde; le dedican, por así decirlo, las 24 horas del día al Señor, pues no hacen ningún trabajo. Selah.

Así, que, debemos de trabajar, pero sin afanamientos, ni con negligencias, no solamente para suplir nuestras necesidades temporales y pasajeras; sino más aun, por las cosas eternas.

 

Escúchenos los Lunes 7:00 pm por Facebook: Kléber Jiménez

Información: 703-717-8608

Información: 703-717-8608