Este lunes 5 de julio se cumplen 15 años del lamentable episodio que Mario Belloso, miembro de la Brigada El Limón del partido FMLN, disparó en repetidas ocasiones un fusil M-16 y con el cual asesinó a dos agentes de la Unidad del Mantenimiento del Orden (UMO), de la Policía Nacional Civil (PNC).
El crimen ocurrió la mañana gris de ese miércoles 5 de julio de 2006, en los momentos que un grupo de estudiantes de la Universidad de El Salvador realizaban una protesta en la 25 avenida Norte y el bulevar de Los Héroes, de esta capital, por el incremento al pasaje del transporte público.
Ahí murieron Miguel Ángel Rubí y Pedro Misael Rivas Navarrete, quienes formaban parte del pelotón de la UMO que pretendía restablecer el orden en dicho lugar, sin embargo, los efectivos policiales fueron sorprendidos por la ráfaga de disparos 5.56 milímetros, que no les dio tiempo al menos de tirarse al pavimento para no ser alcanzados por las balas.
Tras disparar sin piedad, Belloso corrió al interior de la Universidad de El Salvador y el fusil pasó a manos de otros jóvenes que estaban en la zona de la Minerva y luego escondido en el campus, sin que fuera encontrado por agentes de la PNC que ingresaron para buscar al hechor, como también el arma de guerra.
M-16 fue fundido en la UES
Años más tarde, un estudiante de la Universidad de El Salvador reveló a un periodista de La Gaceta que el M-16 fue fundido con acetileno para eliminar cualquier tipo de evidencia.
A la pregunta que hicieron el fusil de Mario Belloso, “fue fundido con acetileno”, dijo.
Ese miércoles 5 de julio de 2006 se recuerda como un día amargo en la historia de El Salvador tras la firma de los Acuerdos de Paz, en especial por las esposas e hijos que los efectivos policiales que fueron asesinados a sangre fría.
Desde ese momento los agentes de la PNC iniciaron una búsqueda a nivel nacional para tratar de ubicar a Mario Belloso que se escondía en quebradas y cloacas para no ser ubicado, pero fue hasta la mañana del 2 de julio del 2007 que fue ubicado en una casa de San Ramón, de donde logró evitar el operativo policial por medio de las alcantarillas.
Luego fue localizado caminando cerca de la colonia San Luis y parecía un pordiosero, que al ser interrogado por un efectivo policial, dijo ser Mario Belloso.
Con José Mario Belloso también fue capturado y condenado a 35 años de prisión, Luis Antonio Herrador Funes, quien le sirvió de soporte para asegurar los disparos con el arma de guerra.