En Texas, la mayoría de los miembros de la Junta de Educación del estado se han expresado a favor de un nuevo plan curricular basado en la Biblia, el cual sería una opción de enseñanza para los estudiantes desde el jardín de infantes hasta el quinto grado.
Si dicho plan se aprueba, las escuelas públicas de Texas recibirán incentivos financieros para utilizar el programa educativo opcional. El presidente de la Federación Estadounidense de Maestros de Texas, Zeph Capo, criticó el nuevo plan de estudios.
Zeph Capo: “De hecho, hemos tenido al mismo Gobierno, y muchos de los mismos actores detrás de este en el estado de Texas, acusando a nuestros educadores de estar adoctrinando a los estudiantes, cuando, en realidad,
a medida que este plan de estudios se desarrolle e implemente en los distritos escolares, particularmente porque se están centrando en niños y niñas tan jóvenes e influenciables, lo que tendremos es un Gobierno estatal que adoctrina a los estudiantes”.