En un golpe a los derechos reproductivos, un tribunal federal de apelaciones dictaminó que el estado de Idaho puede hacer cumplir su prohibición de viajes relacionados con abortos, por lo que las personas que necesiten un aborto no podrán viajar a otros estados donde el procedimiento sea legal para someterse a este.
La ley convierte el llamado “tráfico de abortos” en un delito punible con hasta cinco años de prisión y prohíbe a los residentes de Idaho transportar a través de las fronteras estatales a una persona menor de edad que necesite un aborto a fin de que se someta a este en un lugar donde el procedimiento es legal, como por ejemplo, Oregón, Washington y Montana, todos ellos estados vecinos de Idaho.
El Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito solo ha anulado una parte de la ley, la cual habría prohibido a los proveedores de atención médica hablar con personas adolescentes embarazadas sobre sus opciones de salud reproductiva, afirmando que esta violaba los derechos garantizados por la Primera Enmienda de la Constitución.
En noticias relacionadas, los proveedores de salud del estado de Arizona podrán realizar abortos después de las 15 semanas de embarazo mientras una nueva demanda que busca revocar la prohibición del procedimiento en dicho estado se discute en los tribunales.
La demanda fue presentada por activistas en defensa de la atención médica reproductiva, quienes argumentan que la prohibición es actualmente inconstitucional debido a que los votantes de Arizona aprobaron por abrumadora mayoría en las elecciones de noviembre una proposición electoral que consagra el derecho al aborto en la Constitución estatal. (Democracy Now)