El Gobierno de Trump ha anunciado una nueva restricción de visado para los funcionarios cubanos que estén vinculados a un programa laboral de décadas de antigüedad, mediante el cual Cuba asiste a otros países con el envío de trabajadores, principalmente médicos y miembros del personal sanitario.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, describió erróneamente al programa como “trabajo forzoso”.
Tras la Revolución cubana de 1959, Cuba comenzó a enviar médicos a diferentes partes del mundo, en particular a lugares en los que se han producido desastres o brotes de enfermedades, como lo hizo durante el pico de la pandemia de COVID-19 y durante el brote de ébola en África occidental.
El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, criticó las restricciones y dijo que estas formaban parte de la “agenda personal” de Rubio.
El secretario de Estado estadounidense es hijo de inmigrantes cubanos y ha abogado de forma persistente a favor de imponer sanciones más duras contra Cuba, a pesar de los catastróficos impactos que estas han provocado en dicho país. (Fuente: Democracy Now)