Speaker Johnson. Vicepresidente Vance. Señora primera dama de los Estados Unidos. Señoras y señores miembros del Congreso de los Estados Unidos, muchas gracias. Y a mis conciudadanos, Estados Unidos ha vuelto.

Hace seis semanas, me paré bajo la cúpula de este Capitolio y proclamé el advenimiento de la edad de oro de Estados Unidos. Desde entonces, no hemos hecho más que actuar, con prontitud y sin descanso, para inaugurar la era más grandiosa y fructífera de la historia de nuestro país. Hemos logrado más en 43 días que la mayoría de las administraciones en cuatro u ocho años —y esto no ha hecho más que empezar—. Esto es sólo el principio.
Vuelvo a este hemiciclo esta noche para anunciar que Estados Unidos ha recuperado su impulso. Nuestro espíritu ha vuelto. Nuestro orgullo ha vuelto. Nuestra confianza ha vuelto. Y el sueño americano está en pleno apogeo, más grande y mejor que nunca. El sueño americano es imparable, y nuestro país está a punto de experimentar un resurgimiento como el mundo nunca ha visto, y quizás nunca más verá. Nunca ha habido nada igual.

Las elecciones presidenciales del 5 de noviembre fueron un mandato como no habíamos visto en décadas. Ganamos los siete estados clave, lo que nos permitió obtener 312 votos en el colegio electoral.
Ganamos la votación popular por una gran cantidad de votos y ganamos condados en nuestro país—
—y hemos ganado condados en nuestro país, 2.700 contra 525 en un mapa que es casi completamente rojo para los republicanos. Hoy, por primera vez en la historia moderna, más estadounidenses piensan que nuestro país va en la dirección correcta que en la incorrecta. De hecho, se trata de un récord asombroso: una diferencia de 27 puntos, la más grande jamás registrada.

Del mismo modo, el optimismo de las pequeñas empresas ha experimentado el mayor aumento jamás registrado en un mes, con un salto de 41 puntos.
Gracias. En las últimas seis semanas, he firmado cerca de 100 decretos y tomado más de 400 medidas ejecutivas, un récord para restablecer el sentido común, la seguridad, el optimismo y la riqueza en todo nuestro maravilloso país. El pueblo me eligió para hacer este trabajo, y lo estoy haciendo.
De hecho, muchos han declarado que el primer mes de nuestra presidencia —porque es nuestra presidencia— es el más exitoso en la historia de nuestra nación. Muchos lo han dicho.

Y lo que es aún más impresionante, ¿saben quién es el número 2? George Washington. ¿Qué les parece? ¿Qué les parece eso? No conozco esa lista, pero… Pero la aceptamos.
Unas horas después de prestar juramento, declaré un estado de emergencia nacional en nuestra frontera sur. Desplegué al ejército estadounidense y a la policía de fronteras para repeler la invasión de nuestro país. ¡Y vaya trabajo que hicieron! Como resultado, el número de cruces ilegales de la frontera el mes pasado fue, con diferencia, el más bajo jamás registrado.
Han escuchado mis palabras y han decidido no venir. Así es mucho más fácil. En comparación, bajo Joe Biden, el peor presidente de la historia de Estados Unidos, cientos de miles de personas cruzaban ilegalmente la frontera cada mes y casi todas ellas, incluidos asesinos, traficantes de drogas, miembros de bandas y personas procedentes de instituciones psiquiátricas y manicomios, eran liberadas en nuestro país. ¿Quién puede querer hacer eso?
Esta es mi quinta intervención ante el Congreso y, una vez más, miro a los demócratas que tengo delante y me doy cuenta de que no hay absolutamente nada que pueda decir para hacerles felices o para que se levanten, sonrían o aplaudan. No puedo hacer nada. Podría encontrar una cura para la enfermedad más devastadora, una enfermedad que aniquilaría a naciones enteras, o anunciar las respuestas a la mayor economía de la historia o la detención de la delincuencia a los niveles más bajos jamás registrados, y estas personas sentadas aquí no aplaudirán, no se levantarán y ciertamente no aplaudirán estos logros extraordinarios. No lo harán, pase lo que pase. He venido aquí cinco, cinco veces. Es muy triste. Y no debería ser así.
Así que, demócratas sentados frente a mí, por esta noche, ¿por qué no se unen a nosotros para celebrar tantos triunfos increíbles para Estados Unidos? Por el bien de nuestra nación, trabajemos juntos y devolvamos a Estados Unidos su grandeza.
Cada día, mi administración lucha por traer el cambio que Estados Unidos necesita, por ofrecerle el futuro que merece, y lo estamos logrando. Es hora de grandes sueños y acciones audaces. Desde que asumí el cargo, impuse una congelación inmediata de todas las contrataciones a nivel federal, una congelación de todas las nuevas regulaciones federales y una congelación de todas las ayudas al extranjero.
Puse fin al ridículo «nuevo timo verde». Me retiré del injusto Acuerdo de París sobre el clima, que nos costaba miles de millones de dólares que otros países no pagaban. Me retiré de la Organización Mundial de la Salud, una organización corrupta. Y también me retiré del antiamericano Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Pusimos fin a todas las restricciones medioambientales impuestas por Biden, que hacían que nuestro país fuera mucho menos seguro y totalmente inasequible. Y lo que es más importante, pusimos fin a la insensata política de la administración anterior en materia de vehículos eléctricos, salvando así a nuestros trabajadores y empresas del sector automovilístico de la destrucción económica.
Para liberar nuestra economía, he ordenado que por cada nueva regulación se eliminen diez antiguas —como hice durante mi muy exitosa primera legislatura—.
Durante ese primer mandato, batimos récords al eliminar normas y regulaciones innecesarias, como ningún otro presidente lo había hecho antes. Ordenamos a todos los funcionarios federales que regresaran a sus oficinas. Tendrán que presentarse en persona al trabajo o serán destituidos. Y pusimos fin al uso de la administración pública como arma que permitía, por ejemplo, a un presidente en ejercicio perseguir cruelmente a su adversario político, como yo. ¿Cómo terminó esta historia? No muy bien. No muy bien.
Puse fin a toda censura gubernamental y restablecí la libertad de expresión en Estados Unidos. Ha vuelto. Hace dos días, firmé un decreto que convierte al inglés en el idioma oficial de los Estados Unidos de América. He rebautizado el Golfo de México como «Golfo de América». Del mismo modo, he rebautizado el monte McKinley en honor a un gran presidente, William McKinley. Hermoso Alaska, amamos a Alaska. Amamos a Alaska.
Hemos puesto fin a la tiranía de las políticas de diversidad, equidad e inclusión en todo el gobierno federal. E incluso en el sector privado y en el ejército. Nuestro país ya no será un país woke. Creemos que, ya sea médico, contable, abogado o controlador aéreo, debe ser contratado y ascendido en función de sus aptitudes y competencias, y no de su raza o sexo. Esto es muy importante. Debe ser contratado en función de sus méritos. Y el Tribunal Supremo, en una decisión valiente y muy poderosa, nos ha permitido hacerlo. Gracias. Muchas gracias.
Hemos eliminado el veneno de la teoría crítica de la raza de nuestras escuelas públicas, y he firmado un decreto que establece que la política oficial del gobierno de los Estados Unidos es reconocer que sólo hay dos géneros: hombre y mujer. También he firmado un decreto que prohíbe a los hombres jugar en deportes femeninos.
Hace tres años, Payton McNabb era una atleta de alto nivel, una de las mejores, y se preparaba para una carrera deportiva en la universidad. Pero cuando un hombre irrumpió en el partido de voleibol femenino, le lanzó el balón tan fuerte a la cara que le provocó un traumatismo craneal, la dejó parcialmente paralizada del lado derecho y puso fin a su carrera deportiva. Fue un golpe como nunca antes había visto. Nunca había visto nada igual. Payton está aquí esta noche en la galería, y Payton, a partir de ahora, las escuelas tendrán que expulsar a los hombres de los equipos femeninos o perderán toda la financiación federal.
Y si realmente quieren ver cifras, basta con mirar lo que ha ocurrido con las mujeres en el boxeo, el levantamiento de pesas, el atletismo, la natación o el ciclismo, donde un hombre ha terminado recientemente una carrera de larga distancia con cinco horas y 14 minutos de ventaja sobre una mujer para un nuevo récord de cinco horas: ha batido el récord con cinco horas de ventaja. Es humillante para las mujeres y muy malo para nuestro país. No vamos a tolerar esto por más tiempo.
Lo que acabo de describir es sólo una pequeña parte de la revolución del sentido común que, gracias a nosotros, está barriendo el mundo entero. El sentido común se ha convertido en un tema común, y nunca volveremos atrás, nunca, nunca dejaremos que eso suceda. Una de mis mayores prioridades es salvar nuestra economía y proporcionar ayuda inmediata y considerable a las familias trabajadoras. Como saben, hemos heredado, debido a la administración anterior, una catástrofe económica y un infierno inflacionista.
Sus políticas han hecho subir los precios de la energía y los alimentos y han hecho que los productos de primera necesidad sean inasequibles para millones y millones de estadounidenses. Nunca han visto nada igual. Hemos sufrido la peor inflación en 48 años. Quizás incluso en toda la historia de nuestro país, no están seguros. Como presidente, lucho cada día para invertir la tendencia y hacer que Estados Unidos vuelva a ser barato.
Joe Biden dejó que el precio de los huevos se descontrole. El precio de los huevos se ha vuelto incontrolable. Y estamos trabajando duro para reducirlo. Secretario de Estado, haga un buen trabajo en este ámbito: ha heredado un verdadero desastre de la administración anterior. Haga un buen trabajo. Uno de los principales objetivos de nuestra lucha contra la inflación es reducir rápidamente el coste de la energía. La administración anterior redujo en un 95 % el número de nuevas concesiones de petróleo y gas, ralentizó la construcción de oleoductos y cerró más de 100 centrales eléctricas; estamos reabriendo muchas de ellas.
Y, francamente, nunca hemos visto nada igual. Por eso, desde el primer día de mi mandato, declaré una emergencia energética nacional. Como me han oído decir en repetidas ocasiones, tenemos más oro líquido bajo nuestros pies que cualquier otra nación en la tierra, y de lejos, y ahora autorizo al equipo más talentoso jamás reunido a ir a buscarlo. Eso se llama «drill, baby, drill».
Mi administración también está trabajando en una gigantesca tubería de gas en Alaska, una de las más grandes del mundo, donde Japón, Corea del Sur y otros países quieren ser nuestros socios con inversiones de miles de millones de dólares cada uno. Nunca ha habido nada igual. Será realmente espectacular. Todo está listo. Se ha concedido la autorización.
A lo largo de esta semana, también tomaré medidas históricas para aumentar significativamente la producción de minerales esenciales y tierras raras en Estados Unidos.
Para seguir luchando contra la inflación, no nos conformaremos con reducir el coste de la energía, pondremos fin al despilfarro flagrante del dinero de los contribuyentes. Con este fin, he creado el nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental. DOGE. Quizá hayan oído hablar de él. Quizás. Está dirigido por Elon Musk, que está en la tribuna esta noche.
Gracias, Elon. Trabaja muy duro. No necesitaba esto. No necesitaba esto. Muchas gracias, lo apreciamos. Todos aquí, incluso de este lado, lo aprecian, creo. Es sólo que no quieren admitirlo. Basta con escuchar algunos de los despilfarros espantosos que ya hemos identificado.
22.000 millones de dólares de H.H.S. para proporcionar alojamiento y coches gratuitos a extranjeros en situación irregular. 45 millones de dólares para becas sobre diversidad, equidad e inclusión en Birmania. 40 millones de dólares para mejorar la inclusión social y económica de los migrantes sedentarios. Nadie sabe de qué se trata. 8 millones de dólares para promover el movimiento L.G.B.T.Q.I.+ en la nación africana de Lesoto, de la que nadie ha oído hablar.
60 millones de dólares para el empoderamiento de los pueblos indígenas y afrocaribeños en Centroamérica. 60 millones de dólares. 8 millones de dólares para convertir a las ratas en transgénero —esto es real—. 32 millones de dólares para una operación de propaganda de izquierdas en Moldavia. 10 millones de dólares para la circuncisión masculina en Mozambique. 20 millones de dólares para el programa Sesame Street en árabe en Oriente Medio. Es un programa. 20 millones de dólares para un programa.
1.900 millones de dólares para la comisión recientemente creada sobre la descarbonización de las viviendas, dirigida —y sabemos que está implicada— en el último momento, el dinero fue rechazado por una mujer llamada Stacey Abrams. ¿Han oído hablar de ella?
Un contrato de consultoría de 3,5 millones de dólares para el seguimiento de peces exuberantes. 1,5 millones de dólares para la confianza de los votantes en Liberia; 14 millones de dólares para la cohesión social en Mali; 59 millones de dólares para habitaciones de hotel para extranjeros en situación irregular en Nueva York. Es un promotor inmobiliario. Le ha ido muy bien. 250.000 dólares para aumentar la innovación local vegana en materia de acción climática en Zambia. 42 millones de dólares para el cambio social y de comportamiento en Uganda.
14 millones de dólares para mejorar la contratación pública en Serbia. 47 millones de dólares para mejorar los resultados del aprendizaje en Asia. Asia tiene muy buenos resultados en materia de aprendizaje. Ya saben lo que hacemos: podríamos utilizarlo nosotros mismos. Y 101 millones de dólares para contratos D.E.I. en el Ministerio de Educación, los más altos jamás pagados, no hay nada comparable.
Bajo la administración Trump, todos estos fraudes —y hay cosas mucho peores—, pero no creí que fuera apropiado hablar de ello. Son tan malos. Se han descubierto y expuesto muchos otros, y se ha puesto fin a ellos rápidamente gracias a un grupo de personas muy inteligentes, en su mayoría jóvenes, dirigidas por Elon, y lo agradecemos. Hemos descubierto fraudes por valor de cientos de miles de millones de dólares.
Recuperamos el dinero y redujimos nuestra deuda para luchar contra la inflación y otras cosas; recuperamos gran parte de ese dinero. Lo recuperamos justo a tiempo. Esto es sólo el comienzo.
La Oficina de Auditoría del Gobierno, la oficina del gobierno federal, estimó que el fraude anual en nuestro país asciende a más de 500.000 millones de dólares. Estamos trabajando duro para ponerle fin. Lo conseguiremos. También estamos detectando niveles escandalosos de incompetencia y posible fraude en el programa de seguridad social para nuestros mayores, del que dependen nuestros mayores y las personas que queremos.
Lo crean o no, las bases de datos gubernamentales registran 4,7 millones de afiliados a la seguridad social entre las personas de 100 a 109 años. Hay 3,6 millones de personas de 110 a 119 años. No conozco a ninguna de estas personas. Conozco a personas bastante mayores, pero no a este nivel. 3,47 millones de personas de entre 120 y 129 años. 3,9 millones de personas de entre 130 y 139 años. 3,5 millones de personas de entre 140 y 149 años. A muchos de ellos se les paga dinero, y estamos investigando.
Pam [Bondi], buena suerte. Buena suerte. Lo encontrará. Pero se paga mucho dinero a la gente, porque se sigue pagando y nadie hace nada para detenerlo, y eso perjudica mucho a la seguridad social, perjudica a nuestro país. 1,3 millones de personas de entre 150 y 159 años, y más de 130.000 personas, según las bases de datos de la seguridad social, tienen más de 160 años. Nuestro país está más sano de lo que pensaba, Bobby [Robert F. Kennedy Jr.].
Entre estas personas de más de 160 años, por último, 1.039 personas de entre 220 y 229 años. Una persona de entre 240 y 249 años, y una persona registrada a los 360 años. Más de 100 años, más de 100 años más que nuestro país. Pero vamos a descubrir a dónde va ese dinero, y no será agradable de ver. Eliminando todo el fraude, todo el despilfarro y todo el robo que podamos encontrar, venceremos la inflación, bajaremos las tasas hipotecarias, reduciremos los pagos de los coches y los precios de los alimentos, protegeremos a nuestros mayores y pondremos más dinero en los bolsillos de las familias estadounidenses.
Y hoy, los tipos de interés han experimentado una gran caída, una gran caída, ya era hora. Y en un futuro próximo, quiero hacer lo que no se ha hecho en 24 años: equilibrar el presupuesto federal. Vamos a equilibrarlo. Con este objetivo en mente, hemos desarrollado hasta el más mínimo detalle lo que llamamos la «tarjeta dorada», que saldrá a la venta muy, muy pronto. Por 5 millones de dólares, permitiremos a los creadores de empleo más eficientes de todo el mundo comprar una vía de acceso a la ciudadanía estadounidense.
Es como la «green card», pero mejor y más sofisticada. Estas personas tendrán que pagar impuestos en nuestro país. No tendrán que pagar impuestos en su país de origen. Con el dinero que han ganado, no queremos hacer eso. Pero tendrán que pagar impuestos, crear puestos de trabajo. También contratarán a gente de las universidades y pagarán por ellos para que podamos retenerlos en nuestro país en lugar de hacerlos irse. El número uno de la mejor universidad, por ejemplo, es expulsado y no se le permite quedarse para crear un gran número de puestos de trabajo y asegurar el éxito de una empresa.
Mientras eliminamos a los delincuentes, asesinos, traficantes y depredadores de niños a los que se les ha permitido entrar en nuestro país gracias a la política de fronteras abiertas de estas personas, los demócratas, la administración Biden —la política de fronteras abiertas, la política insensata que ustedes han permitido para destruir nuestro país—, ahora vamos a traer a personas brillantes, trabajadoras y creadoras de empleo. Van a pagar mucho dinero, y vamos a reducir nuestra deuda con ese dinero.
Los estadounidenses nos han dado un mandato para un cambio audaz y profundo. Durante casi 100 años, la burocracia federal ha crecido hasta aplastar nuestras libertades, inflar nuestros déficits y frenar el potencial de Estados Unidos de todas las formas posibles. La nación fundada por pioneros y arriesgados está ahora ahogada bajo millones y millones de páginas de regulaciones y deudas: las autorizaciones que deberían obtenerse en 10 días tardan 10 años, 15 años e incluso 20 años en ser rechazadas.
Mientras tanto, cientos de miles de funcionarios federales no acuden a trabajar. Mi administración le quitará el poder a esta burocracia que no rinde cuentas, y restableceremos una verdadera democracia en Estados Unidos.
Y todo burócrata federal que se oponga a este cambio será destituido inmediatamente. Porque estamos secando el pantano. Es muy sencillo. La época de los burócratas no electos ha terminado.
El siguiente paso de nuestro plan para crear la mayor economía de la historia es conseguir que el Congreso apruebe recortes de impuestos para todos. Ya están en marcha. Están esperando a que voten. Y estoy seguro de que la gente a mi derecha —no me refiero a la derecha republicana, sino a mi derecha, aquí— estoy seguro de que votarán a favor de estos recortes de impuestos, porque si no, no creo que la gente vuelva a votar por ustedes algún día. Así que les estoy haciendo un gran favor al decirles esto. Pero sé que este grupo [señala a los republicanos] votará a favor del impuesto.
Es un elemento muy importante de nuestro plan. Hemos tenido un éxito rotundo durante nuestro primer mandato, con una gran parte de nuestro plan, que busca obtener reducciones permanentes del impuesto sobre la renta en todos los ámbitos. Y para aliviar urgentemente a los estadounidenses especialmente afectados por la inflación, pido que no se graven las propinas, ni las horas extra, ni las prestaciones de la seguridad social de nuestros mayores.
También quiero que los pagos de intereses de los préstamos para automóviles sean deducibles, pero sólo si el coche está fabricado en Estados Unidos. Además, la industria automovilística va a experimentar un crecimiento sin precedentes. Se están abriendo fábricas por todas partes. Se están alcanzando acuerdos, algo nunca visto. Es la combinación del triunfo electoral y los aranceles. Es una palabra maravillosa, ¿verdad?
Esta medida, junto con nuestras otras políticas, permitirá que nuestra industria automotriz experimente un verdadero auge. Va a explotar. Hoy he hablado con los tres principales fabricantes, con los más altos responsables, y están muy entusiasmados. De hecho, muchos fabricantes de automóviles ya han anunciado que van a construir enormes fábricas de automóviles en Estados Unidos. Honda acaba de anunciar la construcción de una nueva fábrica en Indiana, una de las más grandes del mundo. Todo esto ha ocurrido desde nuestro gran triunfo del 5 de noviembre, una fecha que, espero, seguirá siendo una de las más importantes en la historia de nuestro país.
Además, como parte de nuestros recortes de impuestos, queremos reducir los impuestos sobre la producción nacional y toda la industria manufacturera. Y como hicimos antes, ofreceremos una exención del 100 %. Esta medida será retroactiva al 20 de enero de 2025. Es una de las principales razones por las que nuestras reducciones de impuestos tuvieron tanto éxito durante nuestro primer mandato, lo que nos permitió tener la economía más próspera en la historia de nuestro país. Tuvimos un excelente primer mandato.
Sin embargo, si no fabrican su producto en Estados Unidos, bajo la administración Trump, pagarán un arancel y, en algunos casos, un arancel bastante alto. Otros países han utilizado aranceles contra nosotros durante décadas y ahora nos toca a nosotros empezar a utilizarlos contra esos otros países. De media, la Unión Europea, China, Brasil, India, México y Canadá —¿han oído hablar de ellos?— e innumerables países más nos imponen aranceles mucho más altos que los que nosotros les imponemos a ellos.
Es muy injusto. India nos impone aranceles sobre los vehículos de motor superiores al 100 %. Los aranceles medios aplicados por China a nuestros productos son dos veces más altos que los que nosotros aplicamos a los suyos. Y los aranceles medios de Corea del Sur son cuatro veces más altos. Piénsenlo. Cuatro veces más. Y nosotros ayudamos considerablemente a Corea del Sur, en el ámbito militar y en muchos otros. Pero eso es lo que ocurre. Eso es lo que ocurre, con amigos y con enemigos.
Este sistema no es justo para Estados Unidos y nunca lo ha sido. Por eso el 2 de abril —quería hacerlo el 1 de abril, pero no quería que me acusaran de hacer un April Fool’s Day (día de los inocentes)— no es así —es sólo un día y ya nos cuesta mucho dinero—. Pero lo haremos en abril. Soy muy supersticioso. El 2 de abril entran en vigor los derechos de aduana recíprocos, y todo lo que nos impongan ellos, esos otros países, se lo impondremos nosotros a ellos. Es la reciprocidad, de ida y vuelta.
Si nos gravan, les gravaremos. Si aplican aranceles no monetarios para mantenernos fuera de su mercado, levantaremos barreras no monetarias para mantenerlos fuera del nuestro. También hay mucho de eso. Ni siquiera nos permiten entrar en su mercado. Vamos a absorber miles de billones de dólares y a crear puestos de trabajo como nunca antes se había visto. Lo hice con China, y lo hice con otros, y la administración Biden no pudo hacer nada porque había tanto dinero que no pudo hacer nada. Durante décadas, casi todos los países del mundo nos han estafado, y no vamos a dejar que lo hagan.
En los últimos tres meses, se ha hablado mucho de México y Canadá. Pero tenemos déficits muy importantes con estos dos países. Y lo que es más importante, han permitido que el fentanilo entre en nuestro país en niveles nunca vistos, matando a cientos de miles de nuestros conciudadanos y a muchas personas muy jóvenes y muy hermosas, destruyendo familias. Nadie ha visto nunca nada igual. De hecho, reciben subvenciones de cientos de miles de millones de dólares. Pagamos subvenciones a Canadá y México por cientos de miles de millones de dólares. Estados Unidos no actuará más de esta manera. No lo haremos más.
Gracias a la política de «América primero» que estamos aplicando, Estados Unidos ha recibido 1,7 billones de dólares en nuevas inversiones en las últimas semanas. La combinación de las elecciones y nuestras políticas económicas ha permitido a Softbank, una de las empresas más brillantes del mundo, anunciar una inversión de 200.000 millones de dólares. OpenAI y Oracle, Larry Ellison, anunciaron una inversión de 500.000 millones de dólares, algo que no habrían hecho si hubiera ganado Kamala.
Apple anunció una inversión de 500.000 millones de dólares. Tim Cook me llamó. Me dijo: no puedo gastarlo lo suficientemente rápido. Creo que la cantidad será mucho mayor que eso. Construirán sus fábricas aquí en lugar de en China. Ayer mismo, Taiwan Semiconductor, la empresa más grande del mundo, la más poderosa del mundo, que tiene una enorme cuota de mercado (97 %), anunció una inversión de 165.000 millones de dólares para construir los chips más potentes del mundo, aquí mismo, en Estados Unidos.
Y no les daremos dinero. Su ley CHIPS es algo horrible, horrible. Damos cientos de miles de millones de dólares y no sirve para nada. Cogen nuestro dinero y no lo gastan. Todo lo que significaba para ellos —no les damos dinero—, todo lo que era importante para ellos era que no querían pagar los aranceles, así que vinieron y construyeron, y vienen muchas otras empresas.
No necesitamos darles dinero; simplemente queremos proteger a nuestras empresas y a nuestra población, y vendrán porque no tendrán que pagar aranceles si construyen en Estados Unidos. Es increíble. Debería deshacerse de la ley CHIP y utilizar lo que queda, señor Presidente de la Cámara de Representantes, para reducir la deuda. O para cualquier otro propósito que desee.
Nuestra nueva política comercial también será excelente para los agricultores estadounidenses —me encantan los agricultores— que ahora venderán en nuestro mercado interno, Estados Unidos, porque nadie podrá competir con ustedes. Los productos procedentes de otros países y otras empresas están realmente, realmente en una mala posición en muchos aspectos.
No se inspeccionan, pueden estar muy sucios y asquerosos cuando llegan, y se vierten y perjudican a nuestros agricultores estadounidenses. Los aranceles se aplicarán a los productos agrícolas que entren en Estados Unidos y a nuestros agricultores a partir del 2 de abril, lo que podría dar lugar a un pequeño período de adaptación. Ya hemos pasado por esto cuando cerré el acuerdo con China. Dije que había que tener paciencia y eso es lo que hicieron. Lo hicieron. Probablemente tendrán que hacerlo de nuevo. Y será aún mejor. Fue muy bueno. El problema es que el Sr. Biden no lo aplicó. No lo hizo.
Estábamos comprando por 50.000 millones de dólares y nos iba muy bien, pero el Sr. Biden no hizo cumplir esta regla y nuestros agricultores se vieron perjudicados. Pero nuestros agricultores se están divirtiendo mucho en este momento. Así que les deseo que se diviertan mucho. Yo también los quiero. Yo también los quiero.
También he impuesto aranceles del 25 % sobre el aluminio, el cobre, la madera y el acero extranjeros, porque si no tenemos, por ejemplo, acero y muchas otras cosas, no tenemos ejército y, francamente, no tendremos —simplemente no tendremos país durante mucho tiempo—. Hoy tenemos aquí a un orgulloso metalúrgico estadounidense. Una persona fantástica. Originario de Decatur, Alabama, Jeff Denard ha trabajado en la misma acería durante 27 años, un trabajo que le ha permitido ser capitán de su cuerpo de bomberos voluntarios local.
Ha criado a siete hijos con su encantadora esposa Nicole y, a lo largo de los años, ha ofrecido un hogar amoroso a más de 40 niños en acogida. Excelente trabajo. Gracias. Gracias, Jeff.
Historias como la de Jeff nos recuerdan que los aranceles no sólo sirven para proteger los empleos estadounidenses. Se trata de proteger el alma de nuestro país. El objetivo de los aranceles es hacer que Estados Unidos vuelva a ser rico y grande, lo cual está sucediendo y sucederá con bastante rapidez. Habrá algunas perturbaciones, pero las aceptamos. No serán gran cosa.
¿No lo aceptan [habla a los demócratas]? Miren a dónde nos ha llevado Biden. Muy abajo, lo más bajo que hemos estado nunca. Jeff, quiero darte las gracias y saludar a otra persona que se ha dedicado a las familias de acogida, a la comunidad, y que trabaja tan duro en ello. Es una persona muy cariñosa, nuestra magnífica primera dama de los Estados Unidos.
El trabajo de Melania ha dado resultados increíbles, ayudando a preparar a los futuros líderes de nuestra nación para entrar en el mercado laboral. Nuestra primera dama está acompañada por dos jóvenes impresionantes, muy impresionantes, Haley Ferguson, que se ha beneficiado de la iniciativa «Fostering the Future» de la primera dama, y que está lista para terminar sus estudios y convertirse en maestra. Y Elliston Berry, que fue víctima de una imagen ilícita falsa producida por un compañero. Con la ayuda de Elliston, el Senado acaba de aprobar la Take It Down Act.
Es muy importante. Muchas gracias, John. John Thune, gracias. Levántate, John. Gracias, John. Muchas gracias a todos. Gracias a todos. Y gracias a John Thune y al Senado. Excelente trabajo. Despenalizar la publicación de este tipo de imágenes en línea es algo terrible, terrible. Una vez que haya sido aprobado por la Cámara de Representantes, espero firmar este proyecto de ley. Gracias. Y también voy a utilizar este proyecto de ley para mí, si no les importa, porque nadie es tratado peor que yo en línea, nadie. Es genial. Muchas gracias al Senado, gracias.
Pero si realmente queremos proteger a los niños estadounidenses, no hay medida más crucial que asegurar las fronteras estadounidenses. En los últimos cuatro años, 21 millones de personas han llegado a Estados Unidos, muchos de ellos asesinos, traficantes de personas, miembros de bandas y otros delincuentes procedentes de las calles de ciudades peligrosas de todo el mundo. Gracias a la loca y muy peligrosa política de apertura de fronteras de Joe Biden, ahora están firmemente establecidos en nuestro país. Pero estamos sacándolos y sacándolos rápidamente.
Quiero dar las gracias a Tom Homan y Kristi, así como a Paul de la Patrulla Fronteriza. Quiero darles las gracias. El trabajo que han hecho todos —todos, la Patrulla Fronteriza, la ICE [la agencia de policía de aduanas y control de fronteras]—, las fuerzas del orden en general son increíbles, debemos cuidar de nuestras fuerzas del orden. Debemos hacerlo.
El año pasado, Laken Riley, una brillante estudiante de enfermería de 22 años, la mejor de su clase, admirada por todos, salió a correr por el campus de la Universidad de Georgia. Esa mañana, Laken fue brutalmente atacada, agredida, golpeada, maltratada y horriblemente asesinada.
Laken nos fue robada por un salvaje miembro de una banda de ilegales extranjeros que fue detenido cuando cruzaba sin autorización la frontera sur abierta por el Sr. Biden, y luego puesto en libertad en los Estados Unidos como parte de las políticas inhumanas de esa administración fallida. De hecho, se trataba de una administración fallida. Luego fue detenido y liberado en una ciudad santuario gestionada por los demócratas, un desastre, antes de poner fin a la vida de este magnífico joven ángel.
La querida madre de Laken, Allyson, y su hermana, Lauren, están con nosotros esta noche. El año pasado, les dije a los desconsolados padres de Laken que nos aseguraríamos de que su hija no hubiera muerto en vano. Por eso, el primer proyecto de ley que firmé como 47.º presidente prevé la detención de todos los extranjeros peligrosos y criminales que amenacen la seguridad pública. Es una ley muy fuerte, muy poderosa. Es la Ley Laken Riley. Allyson y Lauren, Estados Unidos nunca olvidará a nuestra hermosa Laken Hope Riley. Muchas gracias.
Desde que asumí el cargo, mi administración ha lanzado la mayor campaña de represión fronteriza e inmigración en la historia de Estados Unidos, y rápidamente hemos alcanzado el número más bajo de cruces ilegales de fronteras jamás registrado. Gracias. Los medios de comunicación y nuestros amigos del Partido Demócrata no han dejado de decir que necesitábamos una nueva legislación, que debíamos tener una legislación para asegurar la frontera. Pero resultó que todo lo que necesitábamos era un nuevo presidente.
Joe Biden no se conformó con abrir nuestras fronteras, hizo volar a inmigrantes ilegales sobre ellas para inundar nuestras escuelas, hospitales y comunidades en todo el país. Ciudades enteras como Aurora, en Colorado, y Springfield, en Ohio, se doblegaron bajo el peso de la ocupación de los migrantes y la corrupción como nunca antes se había visto. Hermosas ciudades destruidas.
Hoy, como prometí en mi discurso inaugural, estamos llevando a cabo la gran liberación de Estados Unidos. Pero aún queda mucho trabajo por hacer. Esta noche, una mujer a la que he conocido, Alexis Nungaray de Houston, una mujer maravillosa, está aquí. El año pasado, la hija de Alexis, su preciosa Jocelyn, de 12 años, fue a un supermercado cercano. Fue secuestrada, atada, agredida durante dos horas bajo un puente y asesinada horriblemente. Las personas detenidas y acusadas de este odioso crimen son dos monstruos ilegales extranjeros procedentes de Venezuela, liberados en Estados Unidos por la anterior administración en el marco de su ridícula apertura de fronteras.
La muerte de esta hermosa joven de 12 años y el sufrimiento de su madre y su familia han conmocionado profundamente a toda nuestra nación. Alexis, prometí que siempre recordaríamos a su hija, a su maravillosa hija, y esta tarde he firmado una orden para cumplir mi palabra. Una cosa que aprendí sobre Jocelyn es que le encantaban los animales, le encantaba la naturaleza.
Al otro lado de la bahía de Galveston, al otro lado de donde vivía Jocelyn en Houston, se encuentra un magnífico refugio nacional de vida silvestre, un santuario intacto y tranquilo de 34.000 acres [14.000 hectáreas] para todas las criaturas de Dios, a orillas del Golfo de América. Alexis, hace unos momentos he rebautizado oficialmente este refugio en memoria de su maravillosa hija, Jocelyn. Entonces, Sr. Vicepresidente, si no le importa, ¿puedo tener el decreto?
[Firma y muestra el decreto] Muchas gracias. Los tres salvajes acusados de los asesinatos de Jocelyn y Laken eran miembros de la banda de las prisiones venezolanas, la banda más dura, según se dice, del mundo, conocida como Tren de Aragua. Hace dos semanas, designé oficialmente a esta banda, así como a la MS-13 y a los sanguinarios cárteles mexicanos de la droga, como organizaciones terroristas extranjeras.
Ahora están oficialmente en la misma categoría que ISIS, y eso no es bueno para ellos. Miles de estos terroristas han sido acogidos en Estados Unidos por la administración Biden. Pero ahora serán todos reunidos y expulsados por la fuerza de nuestro país o, si son demasiado peligrosos, encarcelados y juzgados aquí porque no queremos que regresen nunca. Hoy tenemos con nosotros a un guerrero en la primera línea de esta batalla. Un agente de la Patrulla Fronteriza, Roberto Ortiz. Un hombre formidable.
En enero, Roberto y otro agente patrullaban a lo largo del Río Grande, cerca de una zona conocida como Cartel Island, que no parece muy acogedora. Cuando hombres fuertemente armados empezaron a dispararles, Roberto vio que su compañero estaba totalmente expuesto a un gran peligro y se lanzó a la acción, respondiendo al fuego y ofreciendo a su colega unos segundos cruciales para ponerse a salvo, por los pelos.
Tengo algunos documentos sobre este suceso y no fue bueno. Agente Ortiz, le saludamos por su gran valentía, por la línea de fuego que siguió y por la bravura que demostró. Le honramos y siempre le honraremos. Muchas gracias, Roberto.
Gracias, Roberto. Lo conocí durante mis numerosas visitas a la frontera. Es un gran, un grandísimo caballero. El territorio situado inmediatamente al sur de nuestra frontera está ahora totalmente dominado por cárteles criminales que matan, violan, torturan y ejercen un control total. Ejercen un control total sobre toda una nación, lo que representa una grave amenaza para nuestra seguridad nacional.
Los cárteles están en guerra en Estados Unidos y es hora de que Estados Unidos haga la guerra a los cárteles, que es lo que estamos haciendo.
Hace cinco días, las autoridades mexicanas, debido a las políticas arancelarias que les imponemos, piénsenlo, nos entregaron a 29 de los principales jefes de cárteles de su país. Esto nunca había sucedido antes. Quieren complacernos. Es la primera vez. Pero necesitamos que México y Canadá hagan mucho más de lo que han hecho, y deben detener el fentanilo y las drogas que entran en Estados Unidos.
Van a ponerle fin. He enviado al Congreso una solicitud de financiación detallada que explica exactamente cómo vamos a eliminar estas amenazas para proteger nuestra patria y llevar a cabo la mayor operación de expulsión de la historia de Estados Unidos, incluso más importante que la del presidente Dwight D. Eisenhower, que actualmente ostenta el récord, un hombre moderado pero que creía firmemente en la importancia de las fronteras. Los estadounidenses esperan que el Congreso me envíe esta financiación sin demora para que pueda firmarla. Señor Presidente de la Cámara de Representantes, John Thune, espero que ambos puedan conseguirlo. Señor Presidente de la Cámara de Representantes, gracias. Señor Líder, gracias. Muchas gracias. Envíeme este documento. Lo firmaré tan rápido que no se lo va a creer.
Al mismo tiempo que recuperamos nuestra soberanía, también debemos restablecer el orden público en nuestras ciudades y pueblos. En los últimos años, nuestro sistema judicial ha sido puesto patas arriba por locos de la izquierda radical [señala a los demócratas]. Muchos tribunales han dejado prácticamente de aplicar la ley contra los delincuentes reincidentes peligrosos, mientras arman a las fuerzas del orden contra opositores políticos como yo. Mi administración ha actuado con rapidez y decisión para restablecer una justicia equitativa, igualitaria e imparcial en el marco del Estado de derecho constitucional, empezando por el FBI y el Departamento de Justicia. Pam [Bondi], buena suerte. Kash [Patel], donde sea que estés, buena suerte. Buena suerte. Pam Bondi, buena suerte. Es muy importante. Van a hacer un buen trabajo. Kash, gracias.
Ya han empezado con muy buen pie. Van a hacer un trabajo fantástico. Estarán muy orgullosos de ellos. También estamos dando a nuestros policías la tan merecida ayuda, protección y respeto. Se lo merecen. Su trabajo es tan difícil y peligroso, pero vamos a hacerlo menos peligroso. El problema es que los malos no respetan la ley, pero están empezando a respetarla y pronto la respetarán. Nuestros bomberos son personas increíbles y nunca los olvidaremos. Además, han votado por mí en un número récord, así que no tengo elección.
Hace un año este mes, Jonathan Diller, de 31 años, policía de Nueva York, una persona increíblemente maravillosa y un excelente oficial, fue asesinado a tiros durante un control de carretera en Long Island. Asistí a su funeral. El criminal vicioso acusado de su asesinato ya había sido arrestado 21 veces, y fueron arrestos violentos. Era un verdadero villano. El matón sentado a su lado ya había sido arrestado 14 veces y se llamaba «Killer». Era un asesino. Mató a otras personas, se dice que fueron muchas. Asistí al funeral del agente Diller y cuando conocí a su esposa y a su hijo de un año, Ryan, me pareció muy inspirador. Su viuda se llama Stephanie y está aquí esta noche. Stephanie, muchas gracias. Stephanie, gracias.
Stephanie, nos aseguraremos de que Ryan sepa que su padre fue un verdadero héroe, el mejor de Nueva York, y vamos a sacar a esos asesinos a sangre fría y a esos reincidentes de nuestras calles, y lo haremos rápidamente. Esto tiene que acabar. Salen con 28 arrestos, empujan a la gente en los vagones del metro. Golpean a la gente en la cabeza, en la parte posterior de la cabeza con bates de béisbol. Tenemos que sacarlos de aquí. Ya he firmado un decreto que exige la pena de muerte obligatoria para cualquier persona que asesine a un policía, y esta noche pido al Congreso que convierta esta medida política en ley permanente.
También pido un nuevo proyecto de ley sobre delincuencia, que sea más severo con los reincidentes y que al mismo tiempo refuerce la protección de los policías estadounidenses, para que puedan hacer su trabajo sin temor a que sus vidas sean destruidas por completo. No quieren que los maten. No vamos a dejar que los maten. Un joven que realmente quiere a nuestra policía se ha unido a nosotros en el estrado esta noche. Se llama DJ Daniel, tiene 13 años y siempre ha soñado con ser policía. Pero en 2018, a DJ le diagnosticaron cáncer cerebral. Los médicos le dieron cinco meses de vida como máximo. Eso fue hace más de seis años.
Desde entonces, DJ y su padre se han esforzado por hacer realidad su sueño y DJ ha prestado juramento como agente honorario de las fuerzas del orden en varias ocasiones. La policía le quiere. Los servicios policiales le adoran. Y esta noche, DJ, te vamos a hacer el mayor de los honores. Le pido a nuestro nuevo director del Servicio Secreto, Sean Curran, que te nombre oficialmente agente del Servicio Secreto de los Estados Unidos.
Gracias, DJ. Los médicos de DJ creen que su cáncer probablemente se deba a una sustancia química a la que estuvo expuesto cuando era más joven. Desde 1975, las tasas de cáncer infantil han aumentado más de un 40 %. Invertir esta tendencia es una de las principales prioridades de nuestra nueva comisión presidencial Make America Healthy Again, presidida por nuestro nuevo secretario de Salud y Servicios Sociales, Robert F. Kennedy Jr. Con un apellido como Kennedy, uno podría haber pensado que todo el mundo aquí habría aplaudido. ¡Qué rápido se nos olvida!
Nuestro objetivo es eliminar las toxinas de nuestro medio ambiente y los venenos de nuestra alimentación, y hacer que nuestros hijos sean sanos y fuertes. Por ejemplo, no hace mucho tiempo, y no se puede ni siquiera creer estas cifras, uno de cada 10.000 niños padecía autismo. Uno de cada 10.000. Hoy, es uno de cada 36. Algo no va bien. Uno de cada 36. Piénsenlo. Vamos a averiguar qué es y nadie está mejor situado que Bobby y todos los que trabajan con usted. Ustedes son los más indicados para entender lo que está pasando. Bobby, buena suerte. Es un trabajo muy importante. Gracias. Gracias.
Mi administración también se esfuerza por proteger a nuestros hijos de las ideologías tóxicas en nuestras escuelas. Hace unos años, January Littlejohn y su marido descubrieron que la escuela de su hija había realizado en secreto la transición social de su pequeña de 13 años. Los profesores y el personal administrativo conspiraron para engañar a January y a su marido mientras animaban a su hija a utilizar un nuevo nombre y nuevos pronombres. De hecho, se trata de los pronombres «they» y «them». Todo esto sin decírselo a January, que estaba aquí esta noche y que ahora es una valiente defensora de esta forma de maltrato infantil. January, gracias.
Muchas gracias. Gracias. Historias como esta explican por qué, poco después de asumir el cargo, firmé un decreto que prohíbe a las escuelas públicas adoctrinar a nuestros hijos con la ideología transgénero.
También firmé un decreto para eliminar toda financiación de los contribuyentes a cualquier institución que se dedique a la mutilación sexual de nuestros jóvenes. Ahora quiero que el Congreso apruebe una ley que prohíba y criminalice permanentemente los cambios de sexo en los niños y ponga fin para siempre a la mentira de que todos los niños están atrapados en el cuerpo equivocado. Es una gran mentira. Nuestro mensaje a todos los niños de Estados Unidos es que son perfectos, exactamente como Dios los creó.
Porque estamos eliminando la cultura woke de nuestras escuelas y de nuestro ejército, y ya ha desaparecido de nuestra sociedad, no la queremos más. El wokismo es un problema, el wokismo es malo, y ha desaparecido. Se acabó. Y nos sentimos mucho mejor por ello, ¿verdad? ¿No nos sentimos mejor?
Nuestros militares no serán activistas e ideólogos, serán combatientes y guerreros, lucharán por nuestro país y por Pete, enhorabuena. Secretario de Defensa. Enhorabuena.
Y no es un adepto del movimiento «woke», se lo puedo asegurar. Lo conozco bien. Tengo el placer de anunciarles que en enero, el ejército estadounidense tuvo su mejor mes de reclutamiento en 15 años. Y que todos los servicios armados registran los mejores resultados en materia de reclutamiento en toda la historia de nuestros servicios. ¡Qué diferencia!
Y saben, hace apenas unos meses, los resultados eran exactamente opuestos. No podíamos reclutar en ningún sitio, no podíamos reclutar. Hoy estamos obteniendo los mejores resultados que hemos tenido nunca. Es un cambio de situación extraordinario. Es realmente algo maravilloso de ver. A la gente le vuelve a gustar nuestro país, es muy sencillo. Les gusta nuestro país y les vuelve a gustar formar parte de nuestro ejército. Así que es algo grande y se los agradezco mucho. Es un buen trabajo. Se los agradezco.
Estamos presentes en este acto junto a un joven, Jason Hartley, que conoce el peso de este llamado al deber. El padre, el abuelo y el bisabuelo de Jason han vestido todos el uniforme. Jason perdió trágicamente a su padre, que también era ayudante del sheriff del condado de Los Ángeles, cuando era solo un niño. Hoy, desea perpetuar el legado familiar de servicio. Jason está en el último año de instituto, es un deportista de seis letras, un deportista muy bueno, según dicen, un estudiante brillante con una media general de 4,46. Su mayor sueño es entrar en la Academia Militar de Estados Unidos en West Point.
Y Jason, no es poca cosa ser admitido allí. Es difícil entrar. Pero tengo el placer de informarle que su solicitud ha sido aceptada. Pronto se unirá al cuerpo de cadetes. Gracias. VJason, vas a estar en la larga fila gris, Jason. Como comandante en jefe, me concentro en construir el ejército más poderoso del futuro. En primer lugar, pido al Congreso que financie un escudo de defensa antimisiles de última generación con cúpula dorada para proteger nuestra patria, todo fabricado en Estados Unidos.
Ronald Reagan quería hacerlo hace mucho tiempo, pero la tecnología no existía, ni mucho menos. Pero hoy tenemos la tecnología. Es increíble, de hecho. Y en otros lugares lo tienen, Israel lo tiene. Otros países lo tienen. Y Estados Unidos también debería tenerlo, ¿verdad, Tim? También deberían tenerlo. Así que quiero darles las gracias. Pero es muy, muy importante —vivimos en un mundo muy peligroso— deberíamos tenerlo.
Queremos estar protegidos y protegeremos a nuestros ciudadanos como nunca antes. Para estimular nuestra base industrial de defensa, también resucitaremos la industria naval estadounidense, comercial y militar, incluyendo la construcción naval comercial y la construcción naval militar. Con este fin, anuncio esta noche que vamos a crear una nueva oficina de construcción naval en la Casa Blanca, que ofrecerá incentivos fiscales especiales para traer esta industria de vuelta a Estados Unidos, donde debe estar. Hemos utilizado esta industria para fabricar tantos barcos. Ya no fabricamos muchos, pero vamos a fabricar muchos muy pronto. El impacto será enorme.
Para reforzar aún más nuestra seguridad nacional, mi administración recuperará el canal de Panamá, y ya hemos empezado a hacerlo. Hoy mismo, una gran empresa estadounidense ha anunciado que comprará los dos puertos situados alrededor del canal de Panamá y muchas otras cosas relacionadas con el canal de Panamá y algunos otros canales. El canal de Panamá fue construido por estadounidenses para estadounidenses, no para otros. Pero otros podrían usarlo.
Otros podrían usarlo. Pero su construcción costó muchísima sangre y tesoro a los estadounidenses. 38.000 trabajadores murieron en la construcción del canal de Panamá. Murieron de malaria, de mordeduras de serpientes y de mosquitos. No es un lugar donde sea agradable trabajar. Se les pagó muy bien para que fueran sabiendo que había un 25 % de probabilidades de que murieran. También es el proyecto más caro jamás construido en la historia de nuestro país, si nos referimos a los costes actuales. Fue cedido por la administración Carter por un dólar, pero ese acuerdo fue gravemente violado. No se lo dimos a China, se lo dimos a Panamá, y lo recuperamos.
Y Marco Rubio está al mando. Buena suerte, Marco. Ahora sabemos a quién culpar si algo sale mal. No, Marco ha estado genial y va a hacer un excelente trabajo. Piénsenlo. Ha conseguido 100 votos. Saben, fue aprobado con 99 votos, pero el voto número 100 fue el de este señor [señala a JD Vance], y estoy muy seguro de ello, así que supongamos que obtuvo 100 votos. O estoy muy, muy contento, o estoy muy preocupado. Pero ya ha demostrado —quiero decir que es un gran caballero, es respetado por todos y apreciamos que hayan votado por Marco—. Va a hacer un trabajo fantástico. Gracias. Gracias. Está haciendo un trabajo excelente. Un trabajo excelente.
Esta noche, también tengo un mensaje para el increíble pueblo de Groenlandia. Apoyamos firmemente su derecho a determinar su propio futuro. Y si así lo deciden, eligen o desean, les daremos la bienvenida a los Estados Unidos de América. Necesitamos a Groenlandia para nuestra seguridad nacional e incluso internacional. Y estamos trabajando con todas las partes interesadas para tratar de conseguirla. Pero realmente la necesitamos para la seguridad internacional. Y creo que lo conseguiremos, de una forma u otra lo conseguiremos. Garantizaremos su seguridad. Los haremos ricos. Y juntos llevaremos a Groenlandia a cimas que nunca antes habrían imaginado. Se trata de una población muy reducida, pero de un territorio muy, muy extenso y muy, muy importante para la seguridad militar.
Estados Unidos vuelve a ser fuerte frente a las fuerzas del terrorismo islámico radical. Hace tres años y medio, terroristas del ISIS mataron a 13 militares estadounidenses y a innumerables personas más en el atentado con bomba de la Puerta de la Abadía, durante la desastrosa e inepta retirada de Afganistán. El problema no es que se retiraran, es la forma en que lo hicieron. Quizás sea el momento más vergonzoso de la historia de nuestro país.
Esta noche tengo el placer de anunciar que acabamos de capturar al principal terrorista responsable de esta atrocidad, y que está en camino para enfrentarse al acero de la justicia estadounidense. Quiero dar las gracias especialmente al Gobierno de Pakistán por haber contribuido a la detención de este monstruo. Es un día muy importante para estas 13 familias, a la mayoría de las cuales he llegado a conocer bien, cuyos hijos fueron asesinados y cuyas numerosas personas resultaron tan gravemente heridas —más de 42 personas— en ese funesto día en Afganistán. ¡Qué día tan horrible! La incompetencia fue tal que cuando Putin vio lo que pasó, supongo que pensó: «Vaya, puede que esta sea mi oportunidad». Eso demuestra lo grave que era la situación. Esto no debería haber pasado nunca. Gente extremadamente incompetente.
He hablado con muchos familiares y seres queridos, y todos están en nuestros corazones esta noche. Acabo de hablar con ellos por teléfono. Hemos recibido una llamada importante. Todos ellos han llamado, y todos estaban en línea, y no han hecho más que llorar de felicidad. Estaban muy felices. Tan felices como se puede estar en tales circunstancias. Su hijo, hermano, hermana, hijo o hija, fue asesinado sin motivo alguno.
En Oriente Medio, traemos de vuelta a nuestros rehenes de Gaza. Durante mi primer mandato, firmamos uno de los acuerdos de paz más innovadores en generaciones: los Acuerdos de Abraham. Ahora vamos a aprovechar esta base para crear un futuro más pacífico y próspero para toda la región. Están sucediendo muchas cosas en Oriente Medio. Se habla mucho de ello últimamente con todo lo que está pasando, con Ucrania y Rusia. Están sucediendo muchas cosas en Oriente Medio. Es una zona difícil, de hecho.
También trabajo sin descanso para poner fin al salvaje conflicto en Ucrania. Millones de ucranianos y rusos han sido asesinados o heridos innecesariamente en este horrible y brutal conflicto que no tiene fin. Estados Unidos ha enviado cientos de miles de millones de dólares para apoyar la defensa de Ucrania, sin ninguna seguridad, sin nada.
¿Quieren seguir así cinco años más? Sí, es verdad. Lo dicen ustedes [se dirige a los demócratas]. Pocahontas dice que sí. Cada semana mueren 2.000 personas, más que eso. Son jóvenes rusos, jóvenes ucranianos. No son estadounidenses, pero quiero que esto acabe. Mientras tanto, Europa ha gastado, por desgracia, más dinero en comprar petróleo y gas rusos que en defender a Ucrania, y por un amplio margen.
Piénsenlo. Han gastado más en comprar petróleo y gas rusos que en defender su país. Nosotros hemos gastado unos 350.000 millones de dólares, como si le quitáramos un caramelo a un bebé. Eso es lo que ha pasado. Y ellos han gastado 100.000 millones de dólares. ¡Qué diferencia! Además, nos separa un océano, lo que no es el caso para ellos. Pero nos llevamos muy bien con ellos y están ocurriendo muchas cosas positivas. Biden autorizó más dinero en esta lucha del que ha gastado Europa, miles y miles de millones de dólares. Es difícil creer que no lo hubieran detenido en algún momento. Vamos, igualemos.
Ustedes deben ser iguales a nosotros. Debemos ser iguales. Eso no ha sucedido.
A primera hora de hoy he recibido una carta importante del presidente Zelenski de Ucrania. El contenido del mensaje es el siguiente: «Ucrania está dispuesta a sentarse a la mesa de negociaciones lo antes posible para acercarse a una paz duradera».
«Nadie quiere la paz más que los ucranianos», declaró. «Mi equipo y yo estamos dispuestos a trabajar bajo la enérgica dirección del presidente Trump para lograr una paz duradera. […] Apreciamos sinceramente todo lo que Estados Unidos ha hecho para ayudar a Ucrania a mantener su soberanía e independencia. … En cuanto al acuerdo sobre minerales y seguridad, Ucrania está dispuesta a firmarlo en cualquier momento».
Eso le conviene. Agradezco que haya enviado esta carta. La recibí hace poco. Al mismo tiempo, hemos mantenido serias conversaciones con Rusia. He recibido señales claras de que están dispuestos a la paz. ¿No sería maravilloso? ¿No sería maravilloso?
¿No sería maravilloso?
Es hora de detener esta locura. Es hora de detener las masacres. Es hora de poner fin a esta guerra sin sentido. Si quieren poner fin a las guerras, deben hablar con ambas partes. Hace casi cuatro años, en un contexto de creciente tensión, un profesor de historia llamado Marc Fogel fue detenido en Rusia y condenado a 14 años de prisión en una colonia penitenciaria. Fue un asunto difícil y delicado. La administración anterior apenas movió un dedo para ayudarlo.
Sabían que era inocente, pero no sabían por dónde empezar. Pero el verano pasado le prometí a su madre de 95 años, Malphine, que traeríamos a su hijo sano y salvo a casa. Después de 22 días de mandato, eso es lo que hice, y están aquí esta noche.
A Marc y a su abuela, estamos encantados de tenerlos sanos y salvos entre nosotros. El destino quiso que Marc Fogel naciera en una pequeña ciudad rural de Butler, Pensilvania, donde su madre vive desde hace 78 años. Resulta que fui allí el pasado 13 de julio para una reunión. No fue muy agradable. Allí conocí a su maravillosa madre, justo antes de subir al escenario, y le dije que no olvidaría lo que había dicho sobre su hijo, y nunca lo olvidé, ¿verdad? Nunca lo he olvidado. Menos de diez minutos después, en esa misma concentración, se oyeron disparos y un asesino enfermo y perturbado descargó ocho balas desde su posición de francotirador contra una multitud de varios miles de personas. Me salvaron la vida. Mi vida se salvó por unos milímetros, por una fracción de pulgada.
Pero algunos no tuvieron esa suerte. Corey Comperatore era bombero, veterano, cristiano, esposo, padre devoto y, sobre todo, protector. Cuando el ruido de los disparos atravesó el aire —era un ruido horrible—, Corey supo inmediatamente de qué se trataba y qué había que hacer. Se abalanzó sobre su mujer y sus hijas y las protegió de las balas con su propio cuerpo. Corey recibió un impacto muy fuerte. Ya conocen el resto de la historia: sacrificó su vida para salvar la de ellos.
Otras dos personas, muy buenas personas, también resultaron gravemente heridas, pero afortunadamente, con la ayuda de dos grandes médicos rurales, pensamos que estaban muertos, pero luego fueron salvados. Estos médicos eran muy talentosos. Nos acompañan Helen, la esposa de Corey, que era su amor de la escuela secundaria, y sus dos amadas hijas, Allyson y Kaylee, que están aquí con nosotros. Les damos las gracias.
Para Helen, Allyson y Kaylee: Corey está mirando a sus tres hermosas damas en este mismo momento y las anima. Las quiere. Las anima. Corey nos fue arrebatado demasiado pronto, pero su destino era dejarnos a todos un brillante ejemplo de la desinteresada devoción de un verdadero patriota estadounidense. Es un amor como el de Corey el que construyó nuestro país, y es un amor como el de Corey el que hará que nuestro país sea más majestuoso que nunca.
Creo que mi vida fue salvada ese día en Butler por una muy buena razón. Fui salvado por Dios para devolverle a Estados Unidos su grandeza, estoy convencido de ello. Creo en ello. Gracias. Muchas gracias.
Desde los patriotas de Lexington y Concord hasta los héroes de Gettysburg y Normandía, desde los guerreros que cruzaron el Delaware hasta los pioneros que escalaron las Montañas Rocosas y desde las leyendas que volaron en Kitty Hawk hasta los astronautas que tocaron la luna, los estadounidenses siempre han sido el pueblo que desafió todos los obstáculos, superó todas las amenazas, hecho los sacrificios más extraordinarios y hecho todo lo necesario para defender a nuestros hijos, nuestro país y nuestra libertad.
Y como hemos visto en esta sala esta noche, esa misma fuerza, esa misma fe, ese mismo amor y ese mismo espíritu siguen vivos y prosperando en el corazón del pueblo estadounidense. A pesar de todos los esfuerzos de aquellos que intentan censurarnos, silenciarnos, quebrarnos, destruirnos, los estadounidenses somos hoy una nación orgullosa, libre, soberana e independiente. Siempre seremos libres y lucharemos por ello hasta la muerte. Nunca dejaremos que nada le suceda a nuestro amado país. Porque somos un país de hacedores, soñadores, luchadores, supervivientes. Nuestros antepasados cruzaron un vasto océano, se aventuraron en una región salvaje desconocida y forjaron su fortuna en la roca y el suelo de una frontera peligrosa y muy arriesgada.
Persiguieron nuestro destino a través de un continente sin límites. Construyeron ferrocarriles, trazaron autopistas y adornaron el mundo con maravillas estadounidenses como el Empire State Building, la poderosa presa Hoover y la imponente Golden Gate Bridge. Iluminaron el mundo con electricidad, se liberaron de la fuerza de la gravedad, hicieron girar los motores de la industria estadounidense, vencieron a comunistas, fascistas y marxistas en todo el mundo y nos dieron innumerables maravillas modernas esculpidas en hierro, vidrio y acero.
Nos apoyamos en los hombros de esos pioneros que construyeron la era moderna. Esos trabajadores que se alzaron en los rascacielos de nuestras ciudades, esos guerreros que derramaron su sangre en los campos de batalla, lo dieron todo por nuestros derechos y nuestra libertad.
Es hora de que defendamos la justa causa de la libertad estadounidense. Nos toca a nosotros tomar las riendas del destino de Estados Unidos y comenzar los días más apasionantes de la historia de nuestro país. Con la ayuda de Dios, en los próximos cuatro años llevaremos a esta nación aún más alto y forjaremos la civilización más libre, avanzada, dinámica y dominante que jamás haya existido sobre la faz de la Tierra.
Vamos a crear la mejor calidad de vida, construir las comunidades más seguras, ricas, saludables y dinámicas del mundo. Vamos a conquistar las vastas fronteras de la ciencia, llevar a la humanidad al espacio y plantar la bandera estadounidense en el planeta Marte e incluso mucho más allá. Y a través de todo esto, redescubriremos el poder ilimitado del espíritu estadounidense y renovaremos la promesa sin límites del sueño americano. Cada día nos levantaremos y lucharemos, lucharemos, lucharemos por el país en el que creen nuestros ciudadanos y por el país que nuestro pueblo merece.
Mis queridos compatriotas estadounidenses, prepárense para un increíble futuro, porque la edad de oro de Estados Unidos apenas comienza. No se parecerá a nada de lo que se ha visto antes. Gracias, que Dios los bendiga y que Dios bendiga a Estados Unidos.