El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenó suspender toda la ayuda militar estadounidense a Ucrania.
Este giro sorprendente se produjo apenas unos días después de que Trump y su vicepresidente, J.D. Vance, reprendieran al presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, en el Despacho Oval de la Casa Blanca, en un impactante enfrentamiento que se transmitió en vivo al mundo. El lunes Trump sugirió que Zelensky “no durará mucho tiempo” en el cargo si se niega a llegar a un acuerdo con Rusia.
Presidente Donald Trump: “El presidente Zelensky hizo hoy, supuestamente, una declaración en Associated Press. No soy un gran seguidor de esa agencia, así que tal vez es una declaración incorrecta. Pero dijo que cree que la guerra continuará durante mucho tiempo. Más le vale que esté equivocado al respecto. Eso es todo lo que digo”.
La decisión de Trump de suspender los envíos de armas provocó conmoción, indignación y condena en Ucrania y gran parte de Europa. El probable próximo canciller de Alemania, Friedrich Merz, calificó los ataques contra Zelensky como una “escalada fabricada”.
El primer ministro de Francia, François Bayrou, afirmó que la manera en que fue tratado Zelensky estuvo “marcada por la brutalidad y el deseo de humillar”. Por su parte, el primer ministro de Polonia, Donald Tusk, instó a los países europeos a aumentar drásticamente el gasto militar. Los precios de las acciones de los fabricantes de armas europeos se dispararon el lunes.
Las autoridades ucranianas aseguraron que harán todo lo posible para mantener a Estados Unidos como aliado y reiteraron que siguen dispuestas a negociar un acuerdo con ese país sobre minerales de tierras raras. Mientras tanto, el Kremlin acogió con satisfacción la decisión de Trump de suspender la ayuda militar a Ucrania y afirmó que esto podría forzar al Gobierno ucraniano a entablar negociaciones. (Fuente: Democracy Now)
