Reconozco que las camionetas son muy versátiles y útiles, soy dueño de una, pero cada ocasión que tengo de probar un auto pequeño como el 2025 Mini Cooper S, no dejo de fantasear en cómo sería el conducirlo en las carreteras y calles angostas de España.
Sé que allí tienen opciones de automóviles que no conocemos en Estados Unidos, como el SEAT, Renault o Dacia, pero si el sueño de retirarme en la “madre patria” llegara a consumarse, me gustaría transportarme allí en un Mini Cooper.
Este verdadero ícono británico se reintrodujo en los Estados Unidos en el 2001, un territorio poco amistoso con los autos diminutos, pero son tantos los atractivos visuales y de manejo del Cooper, que ha seguido desde entonces conquistandolos corazones del conductor estadounidense.
¿Qué hay de nuevo?
La cuarta generación Mini que conocemos desde el pasado año representó una evolución significativa, con un rediseño desde cero centrado en la refinación y la modernidad. Aun así, llega al 2025 con cambios considerables. Es un poco más grande que el modelo 2024 que reemplaza, y el Cooper Hardtop (de techo rígido) del 2025 recibe un diseño frontal y postrero renovado, un interior actualizado, sistema de infoentretenimiento completamente nuevo, y más espacio para pasajeros y carga. Tanto las variantes Cooper como Cooper S como la que probamos, también obtienen más potencia para el modelo 2025.
¿Cómo se ve desde afuera?
El Mini es uno de los autos más icónicos nunca fabricados. Modernizarlo conlleva el riesgo de romper con su encanto y enfadar a sus fans, pero logran mostrarnos un 2025 Mini fiel al concepto de diseño original.
Al frente los cambios son sutiles, aunque lo hacen aparecer más moderno, pero en la parte trasera encontramos lo que posiblemente sea uno de los cambios de diseño más importantes que ha recibido este automóvil desde que BMW lo trajo de vuelta en 2001. Curiosamente, allí eliminan los tubos de escape expuestos y optan por ocultarlos debajo del parachoques, lo que le confiere una apariencia de auto eléctrico.
¿Y por dentro?
Los círculos y óvalos siguen siendo la clave dentro del 2025 Mini Cooper, con una pantalla táctil central redonda que gana la atención al entrar a la cabina.
El tablero de instrumentos y la vestidura de las puertas ahora están cubiertos con un tejido de punto que se siente como tela, y puede cambiar ligeramente de color dependiendo de la iluminación que reciba. La calidad de fabricación es alta, con apariencia lujosa, aunque está fabricado usando botellas recicladas, y a pesar de que Mini promete que el material reciclado es fácil de limpiar y resistente a las manchas, no tuvimos valor de tocarlo con las manos sucias de chocolate o grasa para comprobarlo.
Además de ser algo más amplio, el interior también es menos complicado, con un estilo minimalista y simple. No hay un cuadro de instrumentos convencional frente al conductor, en su lugar, una pantalla de visualización frontal ascendente que muestra la velocidad e indicaciones de navegación.
La versión de dos puertas como la que probamos puede acomodar a cuatro personas. Si bien los asientos delanteros son muy cómodos y no escasea el espacio, los adultos en el segundo asiento se sentirán algo apretados. La capacidad de carga no es grande, pero considerando el tamaño del Mini, 8.9 pies cúbicos no están nada mal.
Tecnología y seguridad
La pantalla circular para el sistema de infoentretenimiento del 2025 Mini es visualmente atractiva, con colores vibrantes y gráficos nítidos. La interfaz de usuario es lo suficientemente intuitiva como para navegar sin muchos tropiezos, pero para mi gusto, hay una plétora de opciones que podrían estar agrupadas de mejor forma. El software del sistema es ocasionalmente lento y hay muy pocos botones o perillas físicas, lo que puede requerir un poco de adaptación para encontrar las opciones en la pantalla mientras se conduce.
Aunque Apple CarPlay y Android Auto están disponibles de forma inalámbrica, solo ocupan un pequeño cuadrado en el medio de la gran pantalla, rodeado de otras opciones de menú poco necesarios cuando utilizas alguna de estas utilidades.
El Mini viene con un buen número de características estándar de asistencia al conductor, incluyendo advertencia de colisión frontal, asistencia para mantener el carril y una pantalla de proyección frontal.
¿Cómo se conduce?
El atractivo del Mini no es solo visual, pues generalmente se consideran autos divertidos y atractivos para conducir, por su manejo ágil, dirección sensible y tamaño compacto.
Con un motor de cuatro cilindros de 2.0 litros que toman “prestado” de BMW, el Mini Cooper S saca partido de los 201 caballos de fuerza y 221 libras pie de torque, pues si bien es algo perezoso al arrancar, una vez que alcanza unas 1500 revoluciones, acelera con mucho vigor, siendo una diversión incorporarse a la autopista o adelantar a otros autos.
La transmisión es de doble embrague de 7 velocidades, y aquí uno de los puntos de contienda con el nuevo Mini. En su versión 2025 no solo han eliminado la transmisión manual, incluso en Europa, sino que, para adicionar sal a la herida, tampoco trae paletas de cambio para poder controlar las marchas de la transmisión. Es una pena que un auto antaño reconocido por su magnífico comportamiento en la carretera quede ahora privado de algún control en la transmisión.
Mini ofrece siete modos de conducción o “experiencias” como le llaman, pues también varían el diseño del infoentretenimiento y en algunos casos la iluminación interior. En nuestra prueba del Cooper S, en solo dos de estas opciones notamos una diferencia relevante en cuanto a conducción. Comienza con el modo Core, con una sensación de dirección ligera y una respuesta del acelerador suave, pero al cambiar a Go Kart, notamos cambios de marcha más rápidos, una dirección más pesada y una mejor respuesta del acelerador. Cada
cambio está acompañado de una exclamación sonora algo irritante, pues corta el audio de la radio. En el caso del modo Go Kart, emiten un grito como “woo-hoo”, para indicar que estamos en modo de alto rendimiento.
El Mini Cooper 2025 obtiene un consumo de combustible promedio para un automóvil subcompacto. Los modelos de techo rígido de dos y cuatro puertas equipados con el motor base obtienen un consumo estimado de 33 millas por galón o 7.13 litros cada 100 kilómetros en manejo combinado.
¿Si quiero uno, por cuál me decido?
El Mini Cooper 2025 comienza en $28,950 para el hatchback de dos puertas, $29,950 para el hatchback de cuatro puertas y $33,950 para el convertible de dos puertas. Estos precios se aplican a los modelos con el motor base de 161 caballos de fuerza y el paquete de equipamiento Signature. El Cooper S como el que probamos eleva el precio a $32.200 dólares, lo que vale la pena por la mejora en el rendimiento de 201 caballos.
¿Y dolores de cabeza?
El Mini Cooper del 2025 será el primer modelo del fabricante producido enteramente en Alemania, y si agregamos la ausencia de embrague en los nuevos modelos, la confiabilidad puede que sea más alta que en años anteriores. J.D. Power le otorga 82 puntos de 100 posibles, lo que es una excelente calificación.
¿Contra quién compite?
En el segmento de los subcompactos no hay mucha competencia, mucho menos por la versatilidad de Mini, que se ofrece como hatchback de 2 o 4 puertas y como convertible de dos puertas. Le acompañan en esta categoría el Mitsubishi Mirage, Fiat 500, Nissan Versa, BMW X1 o el Kia Soul.
Concluyendo
En su conjunto, el 2025 Mini Cooper S es más rápido y preciso que antes, y aunque la falta de una transmisión manual o la imposibilidad de controlar la transmisión automática quizá haga pensar a algunos de los fans más leales, el encanto del diseño y conducción presentes en este pequeño auto, no dudo seguirán seduciendo a nuevos compradores.
Roger Rivero es un periodista independiente, miembro de NAHJ, la Asociación nacional de periodistas Hispanos y de NWAPA, la Asociación de periodistas automovilísticos del noroeste. Los vehículos son proporcionados por los fabricantes como préstamo por una semana para fines de la reseña. De ninguna manera los fabricantes controlan el contenido de los comentarios.
