SALVADOREÑOS
Por: Alirio Alemán
Los corredores del Congreso en Washington DC han sido visitados en los últimos días por funcionarios públicos de El Salvador, entre ellos el Vicepresidente Salvador Sánchez Cerén, diputados de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Asamblea Legislativa, la comitiva presidida por Alex Segovia, Secretario Técnico de la presidencia; y la comisión de líderes ambientalistas de la Coordinadora del Bajo Lempa conformada por el director Walberto Gallegos y la diputada (FMLN) Estela Hernández, apoyada por ECOVIVA, una organización ambientalista que apoya a la población costera de El Salvador.
Esta comitiva ambientalista visitó la capital de los Estados Unidos con el propósito de conversar con funcionarios del Departamento de Estado, Congresistas y miembros de la Junta Directiva de la Corporación del Reto del Milenio (MCC) que ayuda a combatir la pobreza y al desarrollo económico, por eso ellos quieren conocer más a fondo los propósitos del proyecto Fomilenio II para la costa marina de El Salvador.
El Congresista Demócrata por California Sam Farr los recibió y les explicó que uno de los principales objetivos es el desarrollo económico de la zona costera. No es para menos la preocupación de los líderes ambientalistas al querer indagar más hacia dónde va este desarrollo, si es más industrial y favorecer a las grandes corporaciones o si en realidad la población costera tendrá su beneficio, aunque ya se presume que viene un desarrollo turístico donde se construirán hoteles y otros servicios y por ende tendrá su impacto en la zona, principalmente que afectará el medio ambiente con tanto desecho tóxico, pues la costa marina es rica en biodiversidad y la más grande en Centro América.
“Queremos saber cuál es la política establecida de este gobierno para el Fomilenio II, pues a la par camina la nueva ley de Asocio público privado y sabemos que todo ha venido planificado a propósito…queremos indagar la normativa que implementará el MCC, pues está dando un giro vertical hacia la implementación de esta ley de Asocio público privado y se ve que los beneficiados no serán los pobladores de la zona, sino el sector turístico industrial, pues aquí viene el temor que de los $ 275 millones de inversión se destinen a beneficio del sector privado, además nos preocupa que no se hagan los estudios necesarios para analizar cuanto afectará al medio ambiente y las cooperativas de producción y pesca artesanal…si esto es así, se verían desplazados de la zona y ahí no compensa ningún beneficio a la población” expresa la diputada Estela Hernández.
En la comitiva ambientalista del Bajo Lempa es notable la preocupación de la contaminación ambiental y el desplazamiento de la población entre otros, pues genera retroceso al desarrollo en la zona. “Por eso estamos aquí para que el gobierno tome en cuenta nuestra preocupación, y que siga el plan de construir más escuelas, unidades de salud y todo lo que refiera a desarrollo económico y social de la población, de lo contrario estamos marginados del Fomilenio II. Queremos que se respeten los derechos de la población, pues la zona no está en la disposición de recibir un desarrollo tan grande, queremos que nos demuestren que tanto nos afectará y nos beneficiará, pues no queremos que afecte al desarrollo agropecuario, ni la pesca artesanal, mucho menos que afecte a los manglares, queremos que nos digan hacia donde irán todos los desechos tóxicos que a diario saldrán por toneladas…no decimos que no se haga, sino que se implementen medidas de mitigación de riesgos, pues sabemos que hoy en día anda una comitiva del sector privado y el Secretario Técnico de la Presidencia y que exponen lo contrario a nosotros, queremos que cumplan lo prometido de ayudar a los 75 municipios, el apoyo a proyectos productivos y desarrollar la infraestructura social de caminos, carreteras, escuelas y unidades de salud…para terminar quiero decir que en la población se generaron buenas expectativas de desarrollo, pero eL Fomilenio II está cambiando de rumbo”, expresa Walberto Gallegos, director de la Coordinadora del Bajo Lempa.
Un poblador de la zona costera le preocupa que El Fomilenio II venga a desaparecer los manglares con su desarrollo turístico y ellos sean desplazados de sus hogares