INMIGRACION
Si acaso había alguna duda comprensible de que los esfuerzos por sacar la reforma inmigratoria estaban muertos en el Capitolio en lo que queda de este año, el vocero de la Cámara de Representantes, John Boehner, la eliminó este miércoles 13 de noviembre.
Boehner repitió su conocida oposición a la iniciativa sobre inmigración aprobada por el Senado y su promesa de que la Cámara de Representantes nunca la votará, aunque en esta ocasión fue más lejos al dibujar una línea clara: “Lo dejaré claro, no tenemos ninguna intensión alguna de discutir el proyecto de ley del Senado”.
La semana pasada el representante de California, Whip Kevin McCarthy, dijo a los defensores de la reforma inmigratoria que no había tiempo suficiente este año para que la Cámara de Representantes la discuta. La Cámara estará sesión en 15 días desde ahora hasta que termine el año.
Luego de que los republicanos perdieron la elección presidencial en el 2012 y de que los hispanos votaron en masa por el presidente Barack Obama, Boehner dijo que es era hora de que el Congreso aprobara una reforma mayor de migración.
“Pienso que desde hace tiempo hay un enfoque integral. Confío que el presidente, yo, y otros podamos encontrar un terreno común para hacernos cargo de este asunto de una vez por todas y para siempre”, aseguró Boehner en una entrevista con ABC News una semana después de la elección.
Al enfrentar divisiones sobre el asunto, Boehner insiste en que todavía quiere aprobar una legislación pero que se tiene que hacer por partes. Una serie de iniciativas, la mayoría sobre temas de seguridad fronteriza, fueron aprobadas por el Comité Judicial de la Cámara, pero los republicanos no han programado votar ninguna de ellas.
No lo aceptan
“El impulso por la reforma migratoria no puede morir porque es urgente y necesario”, dijo Maribel Hastings, asesora ejecutiva de Americas Voice. “Cuando no se ha resuelto un problema evadirlo sólo lo hace más presente y evidente”..”Si finalmente no hubiese debate este año, tampoco implica necesariamente que haya muerto, porque todavía al presente Congreso le resta un año de vigencia en 2014 y, por lo tanto, hay posibilidades de avanzar”, agregó.
La activista dijo además que “Los culpables por este retraso han sido la desidia, la falta de voluntad política y la falta de liderazgo en diversos momentos y a diversos niveles. Este año el Senado aprobó un plan imperfecto, pero que constituyó el primer paso para atajar este asunto de una vez y por todas”.
Hastings dijo además que “en lugar de buscar consenso mientras el Senado debatía su propuesta, la Cámara Baja de mayoría republicana insistió en que no consideraría esa medida y que produciría su propio plan que todavía estamos esperando”.
Organizaciones que defienden los derechos de los inmigrantes también fustigaron la política de deportaciones que lleva a cabo el gobierno del presidente Barack Obama. Durante la primera administración, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) deportó a más de 1.6 millones y se espera que en enero la cifra sobrepase los 2 millones.
Las organizaciones reiteran que entre seis y siete de cada 10 deportados no tenía antecedentes que representaran una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos, y sostienen que una reforma migratoria comprensiva pondría fin a la dramática separación de familias.
Un “insulto”
Tras las declaraciones de Boehner, el Senador Bob Menéndez (demócrata de Nueva Jersey), uno de los integrantes del Grupo de los Ocho que redactó el proyecto de ley bipartidista S. 744 aprobado en junio, dijo que los comentarios del presidente de la Camara “son un insulto para la mayoría de los estadounidenses que quieren ver una reforma migratoria integral”.
El senador por Nueva Jersey dijo que ya habían pasado más de seis meses desde que el Senado aprobó el plan S. 744 y que en todo ese tiempo la Cámara “ha votado irresponsablemente más de 45 veces para eliminar los fondos de la Ley de Salud Asequible” y que ahora Boehner “reclama que no hay suficiente tiempo para sostener un voto solo sobre la reforma migratoria”.
Menéndez dijo que ese era “el mismo tipo de obstruccionismo republicano que llevó al cierre de nuestro gobierno el mes pasado” y que “legislar como adultos requiere de cooperación y acuerdos”.
Añadió que “negarse a por lo menos negociar sobre este tema no refleja las verdaderas intenciones de la mayoría del Congreso de los Estados Unidos o del pueblo estadounidense. Mientras el Presidente de la Cámara Boehner continúa con sus juegos políticos, toda la nación sigue sintiendo el impacto económico y humano de un sistema migratorio roto”.
Menéndez urgió a sus colegas de ambos partidos a rechazar la estrategia de Boehner que tildó de “irresponsable e inaceptable” y pidió un voto inmediato en el pleno de la Cámara de Representantes para aprobar “una reforma migratoria integral de sentido común”, concluyó.
Ayunan por reforma migratoria
Activistas religiosos de EEUU iniciaron esta semana un ayuno nacional por tiempo indefinido para presionar a la Cámara de Representantes a que vote la reforma migratoria este año, y para resolver lo que calificaron como la “disfunción” del Legislativo estadounidense.
Durante una conferencia de prensa dentro de una “carpa comunitaria” frente al Capitolio, para resguardarse del frío, los activistas destacaron que el ayuno responde a la “crisis” humanitaria causada por la ausencia de una reforma migratoria integral.
Obama se reúne con activistas
El pesimismo en las filas republicanas, que nunca han llegado a impulsar la reforma con la misma fuerza y compromiso que los demócratas, contrasta con el nivel de actividad de los diferentes grupos de activistas y del presidente Obama, que hoy recibía a líderes religiosos de todo el país, para seguir presionando a los legisladores a favor de una nueva ley.
Según ha informado la Casa Blanca, el presidente Obama transmitió a las organizaciones religiosas que “no hay razón” por la que los republicanos deban seguir retrasando un asunto que cuenta con apoyo de los dos partidos y que su colaboración “demostraría a los ciudadanos estadounidenses que Washington todavía puede trabajar codo con codo para resolver los desafíos de nuestro país”. (Con datos de La Opinión)