Él te está esperando

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EL EVANGELIO EN MARCHA

Por: Enrique Monterroza

 

  Todos tenemos problemas de toda clase: enfermedades repentinas, decisiones inesperadas que desestabilizan lo planeado, problemas económicos que asechan a nuestras familias y un sinfín de situaciones que lo único que hacen es perturbar la paz que Dios quiere mantener en nuestra vida.

Y es que a veces sin darnos cuenta hemos perdido el enfoque, las situaciones que nos rodean no han hecho presa de la confusión, de la desesperación, hay una carga enorme sobre nuestros hombros que lo único que hace es alejarnos poco a poco de la comunión que deberíamos mantener a diario con Dios.

Hablo de esos momentos en los que lo menos que queremos es orar, de esos momentos en donde quisiéramos que Dios actuara y diera la solución que nosotros quisiéramos, pero por alguna razón aun cuando necesitamos de Él, no queremos buscarlo.

A veces estamos tan enfocados en los diferentes problemas que estamos enfrentando, que no prestamos atención a lo que Dios quiere decirnos, El esta hablándonos continuamente, pero nosotros mismos hemos creado una barrera que nos impide sentarnos a escuchar lo que tiene que decirnos.

La Biblia nos cuenta la historia de Marta y María en el siguiente pasaje: “En su viaje hacia Jerusalén, Jesús y sus discípulos pasaron por un pueblo. Allí, una mujer llamada Marta recibió a Jesús en su casa. En la casa también estaba María, que era hermana de Marta. María se sentó junto a Jesús y escuchaba atentamente lo que él decía. Marta, en cambio, estaba ocupada en preparar la comida y en los quehaceres de la casa. Por eso, se acercó a Jesús y le dijo: –Señor, ¿no te importa que mi hermana me deje sola haciendo todo el trabajo de la casa? Dile que me ayude. Pero Jesús le contestó: –Marta, Marta, ¿por qué te preocupas por tantas cosas? Hay algo más importante. María lo ha elegido, y nadie se lo va a quitar” Lucas 10:38-42 (Traducción en lenguaje actual).

Y es que a veces nos afanamos más de la cuenta, a veces le estamos prestando más atención a las situaciones que nos rodean que a Dios. María había elegido lo más importante, esto es: “Estar sentada junto a Jesús escuchando atentamente lo que él decía”.

¿No crees que deberías sentarte por un momento y poner atención a lo que Dios quiere decirte?, ¿Acaso afanándote más de la cuenta podrás solucionar esa situación?, ¿Te dará más descanso seguir preocupado que ir delante de Él y disfrutar de su presencia?

A veces nos complicamos la vida solos, nos preocupamos más de la cuenta, hacemos de un vaso de agua un océano completo y aunque muchas veces realmente sea un océano tu problema no quiere decir que te ahogaras.

Hoy es uno de esos días en donde debemos ir delante de Dios, hoy hay una necesidad muy fuerte de su presencia sobre tu vida, olvídate por un momento de todo lo que te rodea, no sigas enfocado en todo lo malo que te ha venido, por un momento ve delante del Señor, acomódate en su presencia y escucha lo que tiene que decirte, pon atención a su voz, cierra tus ojos y deja que El hable, estoy seguro que tiene algo que decirte, estoy seguro que ha de ministrar tu vida de una forma especial, porque El anhela siempre encontrarse en intimidad con nosotros.

Ve, cierra la puerta de tu habitación, oficina o casa y acércate a Él, habla con El, desahógate en El, renuévate en El, lo necesitas, tu sabes que lo necesitas, no veas más hacia otro lado que no sea su presencia, deposita todas tus cargas en El, porque estoy seguro que El las recibirá, te abrazara y te dará un nuevo panorama.

¿Qué esperas?, no esperes mas, no pospongas mas tu cita con el Señor, tu mejor que nadie sabes que necesitas de Él y que solo en su presencia puedes ser renovado. ¡Él te está esperando! (www.enriquemonterroza.com)