EL EVANGELIO EN MARCHA
Porque algunos cristianos no celebran la Navidad
Por Boris López, pastor Tabernáculo Bíblico Bautista de Manassas
Demás está decir que los Cristianos aceptamos que la navidad no es en Diciembre, entiéndase navidad como el diminutivo de la Natividad, que encierra el nacimiento de nuestro Señor Jesucristo, la Biblia narra en los evangelios que el nacimiento de Nuestro Bendito Salvador ocurrió en la época de las pastorelas, cuando los pastores podían velar y guardar las vigilias de las noches sobre su rebaño. Lucas 2:8, esto nos ubica en el mes de Nissan que transcurre entre el 15 de Marzo y el 15 de Abril, la que es la fecha más probable del Nacimiento de Cristo, incluso hay quienes podrían extenderla hasta septiembre.
El origen de la navidad es de origen pagano, casi todos los aspectos de la observancia de la Navidad tienen sus raíces en la costumbre romana y en la religión. La primera referencia a la Navidad que marcó el 25 de diciembre viene del segundo siglo después del nacimiento de Jesús. Se considera, de igual manera, que las primeras celebraciones de la Navidad fueron en reacción a la Saturnalia romana, un festival de cosecha que marcaba el solsticio de invierno – el regreso del sol – y honraba a Saturno, el dios de la agricultura.
La Saturnalia era un tiempo de alboroto, al cual se oponían hasta los más austeros líderes en la aún minoritaria secta cristiana. Según dice un erudito, la Navidad se desarrolló como un medio para reemplazar la adoración del sol (del inglés sun) con la adoración del Hijo (del inglés son). [Nota: en inglés sol se traduce sun e hijo se traduce son; ambas palabras se pronuncian igual.] Para el año 529 d.C., después que el cristianismo se hubiera convertido en la religión oficial del estado en el Imperio Romano, el emperador Justiniano hizo de la Navidad una festividad cívica. La celebración de la Navidad llegó a su cúspide – algunos dirían que a sus peores momentos- en el período medieval, cuando se convirtió en un tiempo para consumo conspicuo y juerga incomparable”.
“La Navidad no estaba entre los primeros festivales de la Iglesia… la primera evidencia de esta fiesta es de Egipto”. Además, “las costumbres paganas que se centran alrededor de las calendas de enero, gravitan alrededor de la Navidad”. Bajo el título “Día Natal”, Orígenes, un antiguo autor católico, admitió: “…en las Escrituras no se registra que alguien haya guardado una fiesta u ofrecido un gran banquete en su cumpleaños. Son sólo los pecadores (como Faraón y Herodes) los que hacen grandes regocijos del día en que vinieron a este mundo”.
La Navidad no era observada en los primeros siglos de la iglesia cristiana, ya que la usanza general era celebrar las muertes de las personas notables, en lugar de su nacimiento… una fiesta fue establecida en memoria de este evento [el nacimiento de Cristo] en el siglo IV. En el siglo V, la iglesia occidental ordenó que la fiesta fuera celebrada en el día de los ritos del nacimiento del sol, y al cierre de la Saturnalia, ya que no existía conocimiento certero del día del nacimiento de Cristo”.
No hay lugar para error en el origen de la celebración moderna de la Navidad. Pasaron 300 años después de Cristo antes que la iglesia romana celebrara la Navidad, y no fue sino hasta el siglo V que fue ordenada su observancia en todo el imperio, como un festival oficial en honor a “Cristo”.
Basados en el contexto histórico vendría a ser correcto que muchos cristianos no celebren la Navidad.
Entonces, ¿qué de aquellos que sí la celebran? Se ha escuchado que la mayor parte del cristianismo actual, de los que sí celebran la navidad, sostienen que aunque el origen sea pagano, hoy en día sí le dan el enfoque Cristocéntrico para poder celebrarla. Muchos dirán que eso no es suficiente, lo cierto es que si partimos desde la perspectiva bíblica, el celebrar la Navidad no te hace más salvo o menos salvo, dado que la salvación es por fe (Efesios 2:8), entonces, el razonamiento del apóstol Pablo en cuanto a este tema queda plasmado en 1 Cor 8:4-6, en la que la escritura enseña que a los que ya tienen el conocimiento del Dios verdadero no tiene porqué afectarles en nada el participar de estas fiestas, veamos: “ Acerca, pues, de las viandas que se sacrifican a los ídolos, sabemos que un ídolo nada es en el mundo, y que no hay más que un Dios. Pues aunque haya algunos que se llamen dioses, sea en el cielo, o en la tierra (como hay muchos dioses y muchos señores), para nosotros, sin embargo, sólo hay un Dios, el Padre, del cual proceden todas las cosas, y nosotros somos para él; y un Señor, Jesucristo, por medio del cual son todas las cosas, y nosotros por medio de él.Es claro que el apóstol sostiene que no ha de importar el medio en el que se desarrolle el Cristiano, siempre y cuando tenga el conocimiento de los que las cosas realmente significan.
Concluyo que la celebración de la Navidad no es más que un asunto trivial, si no la celebran, bien; si la celebran, pues igual, de todos modos la misma Biblia enseña en Tito1:15 “Para los puros todo es puro, pero para los corruptos e incrédulos no hay nada puro. Al contrario, tienen corrompidas la mente y la conciencia.”. Al final, es un asunto del corazón, por esa razón decimos desde aquí: Feliz Navidad!