¿Cómo vencer las trampas de Satanás?

0
222

EL EVANGELIO EN MARCHA

 ¿Cómo vencer las trampas de Satanás?

(PARTE II)

 Por: Pastor Kléber Jiménez

 …para que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros;

pues no ignoramos sus maquinaciones. ” 2 Corintios 2:11

 

PAG 17 Toda acción, tiene una consecuencia; esto es lo que ciencia llama la Ley causa y efecto. Esto se aplica a todo lo creado; pero no al Creador, quien dio origen a todas las cosas. Por ejemplo; si usted tiene un vaso de cristal en su mano y lo suelta; con toda seguridad se romperá al caer al suelo; porque la acción de soltar el vaso de su mano; trae como consecuencia la destrucción del mismo.

Si una madre acaba de tener un bebé; ella espera que su bebé crezca con el pasar del tiempo; pero si el bebé al pasar dos meses, sigue del mismo tamaño; más que seguro, que ella se espanta y toma al bebé y lo lleva corriendo al doctor. ¿Por qué hace eso? Porque es tan natural y normal que los bebes crecen a medida que va pasando el tiempo; si no crecen, es porque existe un serio problema de salud en el bebé.

De la misma manera, debe de ocurrir, cuando nacemos de nuevo en Cristo: Juan 3:3; pero ahí vemos en operación la segunda trampa de Satanás, esta es:

 

  1. SATANÁS NO QUIERE QUE SE CONVIERTA EN DISCÍPULO, DESEA QUE SEA BEBÉ ESPIRITUAL, DESEA QUE SEA CARNAL: MATEO 28:19; EFESIOS 4:14.

 

El acto de nacer de nuevo en Cristo, debería de traer como consecuencia que el creyente cada día vaya creciendo más y más espiritualmente. El crecimiento espiritual, no es automático con el nuevo nacimiento. Así como el crecimiento físico de los bebes hasta que se hagan adultos, requiere de alimentación y un proceso. De la misma manera es el crecimiento espiritual; los creyentes cuando nacen son bebes; pero deben convertirse en niños, jóvenes y adultos espiritualmente hablando; y esto se llega a conseguir cuando nos alimentamos cada día de la Palabra de Dios; cuando tenemos nuestro de tiempo de oración; cuando asistimos a los servicios en la Iglesia; cuando dejamos que el Espíritu Santo gobierne nuestra vida.

Satanás le estorba para que usted no lea la Biblia; le pone excusas como: No vas a entender la Biblia. Eso es tarea de los pastores y maestros de la Biblia. Ya te estás haciendo muy fanático. Mejor ponte a ver televisión; ver el futbol. Mejor ponte a jugar videos juegos; o pasa horas de horas en el Facebook, Instagram; Twitter; Internet o en cualquiera de las llamadas “redes sociales”. Bien dicho redes; ya que te atrapan en ellas, desperdiciando el tiempo que lo podemos aprovechar en estudiar más la Palabra de Dios.

Satanás no desea que usted ore, no desea que usted crezca. El desea que usted sea un calienta bancas; un bebé espiritual toda la vida; desea que sea de tropiezo en su Iglesia. Desea que usted se fije en el Pastor o en los hermanos en la Iglesia para poder criticarles o que se resienta por motivos insignificantes. El desea que usted sea de tropiezo y de carga y no de bendición para la Iglesia.

Así como los bebes no pueden valerse por sí mismo, sino que tienen que ser llevados por sus padres o por quienes les cuiden; de la misma manera; el apóstol Pablo dice que los bebes espirituales, son llevados por cualquier viento de doctrina o de artimañas de hombres: Efesios 4:14. Y de hecho, hoy en día, eso es una realidad; ya que existen gran cantidad de falsas doctrinas y muchos son arrastrados por ellas y por las que las promueven.

La palabra clave en todos los Evangelios y el libro de Hechos, es discípulo, la cual aparece más de 250 veces. Vemos en los Evangelios que los discípulos del Señor, pasaban las 24 horas del día con el Maestro de maestros.

Lamentablemente hoy en día, las iglesias están llenas de creyentes y de muy pocos discípulos. Se cree que más del 90% de las personas en las iglesias cristianas evangélicas, están atrapadas en esta segunda trampa.

Para poder vencer esta segunda trampa y convertirnos realmente en verdaderos discípulos del Señor Jesucristo, lo cual fue la orden dada por nuestro Salvador en Mateo 28:19; es necesario que formemos nuevos hábitos en nuestra vida; tenemos que abrir totalmente nuestro corazón para que el Espíritu Santo nos moldee al carácter de Cristo; es decir, tenemos que enamorarnos más y más del Señor.

Tenemos que empezar siendo buenos mayordomos de nuestro tiempo; y no desperdiciar el tiempo en cosas que no nos edifican. Pablo dice en 1 Corintios 6:12: “Todas las cosas me son lícitas, mas no todas convienen; todas las cosas me son lícitas, más yo no me dejaré dominar de ninguna.

Recuerde que Satanás es ladrón, y lo primero que le roba es el tiempo. El desea que malgaste el tiempo en las redes sociales, en la televisión, viendo películas o novelas que no edifican nuestras vidas; o en los videos juegos; o en cualquier actividad, que aunque no parezca mala; pero no edifican su vida espiritual.

Propóngase este año, el leer toda la Biblia. Según los expertos, una persona puede leer toda la Biblia en 72 horas; ahora si usted lo hace una hora al día; en aproximadamente dos meses y medio, usted se habrá leído toda la Biblia. Pero digamos que usted la lee solamente media hora al día; usted se la leería en 144 días; es decir, en poco más de cuatro meses, dejándole más de siete meses libres en el año.

Usted puede hacerlo; pero no se apoye en su propia prudencia; recuerde que Dios no nos ha dado espíritu de cobardía; sino espíritu de poder, amor y dominio propio: 2 Timoteo 1:7. Y si usted tiene falta de sabiduría, pídale a Dios quien le dará abundantemente: Santiago 1:5.

Continúa…

Escúchanos todos los Lunes 7:00 pm por Radio Vida: 97.7 FM o

por Facebook: Kléber Jiménez

Información: 703-717-8608