Alrededor de 1.360 menores de edad nunca se han vuelto a reunir con sus padres seis años después de que el Gobierno anterior de Trump los separara de manera forzosa en la frontera entre Estados Unidos y México.

Así lo afirma un nuevo informe de la organización Human Rights Watch Human, que también advierte contra el regreso a puestos en el Gobierno estadounidense entrante de algunos de los principales artífices y ejecutores de la política migratoria de “tolerancia cero” implementada por Trump, que causó daños y traumas psicológicos duraderos a las familias solicitantes de asilo.

Entre esos funcionarios se encuentra Tom Homan, quien ha sido nominado por Trump para desempeñarse como su llamado “zar de la frontera”. Human Rights Watch ha instado al Senado estadounidense a rechazar el nombramiento de cualquier funcionario involucrado en la política de separación de familias migrantes.
La organización sostiene que estas separaciones “constituyeron una desaparición forzada y es posible que también puedan considerarse como actos de tortura”. (Fuente: Democracy Now)