EL EVANGELIO EN MARCHA
Por: Pastor, Claudio Freidzon
INTRODUCCIÓN
En la clase pasada, estuvimos viendo cómo en los tiempos de Noé, Dios estuvo a punto de quitar a la humanidad de la creación. Sin embargo, hubo algo que frenó su decisión y fue la luz que irradiaba Noé con su amor por Dios. Eso es lo que ocurre cuando un cristiano decide creer y avanzar en la fe, aún en medio de un mundo de incredulidad. Tu familia también puede ser un foco de luz en medio de la oscuridad de tu barrio. ¿Qué se necesita? En la clase de hoy hablaremos acerca de esto y cómo un cristiano puede comenzar un cambio que transforme su vida y la de quienes más ama.
DESARROLLO
Noé es un gran ejemplo de fe y perseverancia. En el momento que Dios le pidió que construyera un arca, las lluvias ni siquiera eran conocidas en la Tierra. No obstante, creyó y se puso en marcha.
Pasó el tiempo (120 años) y el arca estuvo lista y el diluvio llegó. Noé no solo fue ejemplo de fe sino también de paciencia y perseverancia a través del tiempo.
Tu fe puede ir en aumento
La fe es estar convencido de que lo que Dios promete, lo cumple. Aún a pesar del tiempo, o los comentarios de los demás, el Señor no llega tarde.
La fe también es recibir. Es apropiarse de lo que Dios ha dispuesto para cada uno de nosotros y llegar a la meta. No es hundirse en las tormentas y dejar que la marea se lo lleve todo, sino que es anclarse a las promesas de Dios hasta llegar a la otra orilla.
La fe siempre te vuelve a levantar. Cuando viene una lucha, siempre se encuentra la forma de volverse a levantar. Y una vez arriba, entendemos que estamos más sólidos, más confiados porque hemos visto una vez más la fidelidad de Dios.
Hay niveles de fe. Dios quiere llevarnos a un nivel superior en lo espiritual. La fe va creciendo y se va desarrollando si nos mantenemos unidos al Espíritu Santo.
En Hechos 19:11-12 la Palabra nos habla de un “extra” que es lo que te lleva a cambiar la rutina y comenzar a experimentar lo sobrenatural. Pablo experimentaba una fe extraordinaria. Su cuerpo estaba tan ungido que con solo tocar su ropa, los enfermos sanaban.
Esta es la gran diferencia entre dos palabras: lo ordinario y lo extraordinario. Ese extra es lo que nos lleva a vivir en un nuevo nivel espiritual.
La clave para vivir con ese extra, es la determinación. Nada te puede desanimar si tu mirada está puesta en Dios. Es el alejar las excusas y animarnos a creer y actuar por fe.
Las tres reacciones
En Hechos 17:30-32 vemos cómo predicaba Pablo. Un sermón es aquél que se desarrolla para predicar la verdad divina con el fin de persuadir a los hombres a que se arrepientan y conozcan a Dios. Pablo estaba anunciando el evangelio y motivando a que las personas se arrepintieran y buscaran de Dios. Sin embargo, nos encontramos con tres reacciones:
La burla de los que no le tenían respeto al mensaje,
La postergación de los que decían “Otro día seguiremos escuchándote…”
La fe de los que comenzaban a creer.
Sin lugar a dudas, los que más beneficios obtuvieron fueron aquellos que decidieron por Cristo sin más vueltas. De la misma manera, debemos alejar la postergación de nuestra vida y buscar hoy el cambio.
En todo orden de la vida, la clave es enfocarse y avanzar, aun a pesar de los inconvenientes que se puedan presentar. Dios hoy quiere que te animes a creer y a obedecer su Palabra. Este es el tiempo de ver su misericordia y vivir con el “extra” que nos eleva a un nuevo nivel espiritual.
En Éxodo 8:8-9 se relata el tiempo en el que Egipto estaba siendo azotado por las plagas de las ranas. En un momento, el Faraón lo mandó a llamar a Moisés y le pidió que orara para que la plaga llegara a su fin. Sin embargo, cuando Moisés le preguntó cuando quería ser libre, su respuesta fue: “mañana”.
Ya había estado muy oprimido junto a su pueblo, sin embargo decidió dormir una noche más con la plaga. Esto no es lo que Dios tiene para ti. Si quieres ser libre, el tiempo es HOY.
CONCLUSIÓN
Dios quiere provocar el cambio en tu vida y la transformación en tu carácter HOY. Si necesitas ver un milagro en tu familia, el primero que debe avanzar por un cambio eres tu. El tiempo es hoy. Ya no postergues lo que sabes que tienes que entregar, si hoy te decides, entonces el proceso hacia la victoria comienza. ¡La determinación de tu fe, te va a llevar de victoria en victoria! (Fuente: www.claudiofreidzon.com)