Por: Rafael Lazo
Además de brillar en las pasarelas con elegantes vestidos y exponerse al escrutinio de los jurados quienes valoran la belleza y otros factores determinantes para ganar un concurso, las candidatas a cualquier reinado, deberían poner en práctica cualquier actividad altruista, que refleje en ellas el amor, compasión y solidaridad con la humanidad.

Milly Ruby Benítez, la candidata por El Salvador a Miss Mundo Latina USA 2025, que se celebrará el 13 y 14 de junio en Orlando, Florida; viajó a su tierra natal, para tener estas vivencias de amor por el prójimo.

Ella nos comenta su experiencia: “Iniciamos el viaje a mi querido El Salvador, toda tripulación de la aerolínea Avianca, me dieron la bienvenida y me otorgaron un obsequio.

Llevamos amor, alegría, pastel y un refrigerio para los abuelitos del Asilo Jesús Nazareth de La Unión. El tiempo que compartimos con ellos fue fantástico, pude ver reflejada, a mi abuelita en sus rostros, quien era la que me veía representar a El Salvador, cuando pequeña jugaba al Miss Universo y la persona que soy, es gracias a la educación y consejos de ella.

Hice una dinámica a los abuelitos, para que tuvieran una reina en el asilo y así olvidaran un poco el lugar donde se encontraban, pues ellos están solos, sin sus familiares; Ellos eligieron como reina, por medio de preguntas y talento a la abuelita María.

Los abuelitos disfrutaron el momento y recordaron muchos aspectos de nuestro país, comieron pastel, no me despedí de ellos; no fue un adiós, sino un hasta luego, pues si Dios permite regresaremos a donar sillas de ruedas.

La visita a una escuela en Corinto, Morazán fue para motivar a los estudiantes a que estudien, se preparen y que no se den por vencidos; que la disciplina, los buenos hábitos y el respeto hacia los demás, hacen un gran impacto en la sociedad y junto con la educación, tendrán un porvenir exitoso, porque los niños y los jóvenes son el futuro, no solo de mi bello país El Salvador, sino de todo el mundo.
MAQUILLAJE Y CABELLO PARA MAMÁ

Las mamás las escogimos en los diferentes parques en Usulután, San Miguel y La Unión, donde seis bellas madrecitas quedaron como unas bellas reinas.
Ayudamos a una de las mamás que quería hacer el maquillaje y peinado, pero tenía que trabajar vendiendo dulces, chicles y churritos, pero como queríamos consentirla, le ayudamos a vender mientras la embellecían.

Caminé por algunas aceras y el parque vendiendo los productos de la madrecita, mientras la maquillaban y peinaban; agradezco a todas las personas que compraron (cuando se les decía que era para una madrecita a la que estábamos ayudando vendiendo, ellos me deban las gracias por lo que estaba haciendo como reina, porque eso ninguna reina lo hacía).

Fue enorme el cariño que me mostraron hasta los niños, me traigo la mejor experiencia del mundo como representante de El Salvador, sin duda somos un país pequeño, pero grandes de corazón. Nuestra campaña de empatía y altruismo está dejando frutos.