El noviazgo según el diseño de Dios

0
725

EL EVANGELIO EN MARCHA

El noviazgo según el diseño de Dios

(GÉNESIS 2:18-25)

Por: Rev. Julio Ruiz

INTRODUCCIÓN: A la hora de tocar el presente tema del noviazgo, vienen muchas preguntas, todas dignas de consideración, tales como: Qué es el amor, cuál es la diferencia entre estar “empatados” y el noviazgo, a qué edad debo comenzar el noviazgo, cuánto tiempo debe durar un noviazgo, puedo estar de novio con una joven o un joven que no es cristiano, con cuántos novios o novias debo estar antes de casarme, es  permitido tener sexo durante el noviazgo… y así podíamos seguir. Y cuando pensamos en el noviazgo de hoy comparado con la costumbre bíblica, nos dando cuenta de que había una gran diferencia. En esos tiempos, quien decidía sobre los asuntos sentimentales eran los padres.  Así que las parejas no salían a pasear, a ver alguna película o a comerse algún helado.  No había tal cosa como salir para conocerse, para ver si había alguna “química”; y si esto no funcionaba, pues cada uno regresaba a casa. El asunto es que las parejas de ese tiempo salían para irse al matrimonio. Y si esto nos parece extraño y anticuado, déjeme llevarlos al principio mismo de la creación; al tiempo antes que existieran los padres, para que veamos cuál fue el diseño de Dios para un noviazgo que debe  ser del agrado divino y finalmente consumarse en el matrimonio. La pregunta para responder hoy no será con quién me casaré, sino más bien a quién tiene Dios preparado (a) para cada joven a la hora de buscar la persona con quien contraerá matrimonio. Cuáles principios debiera tomarse en cuenta al momento de hacer una elección que me marcará para el resto de mi vida. Veamos, pues, este diseño divino.

DIOS PENSÓ EN TU SOLEDAD DESDE EL PRINCIPIO

1. La soledad no es buena según Dios v. 18.  ¿Por qué a un joven le comienza a acelerar el corazón cuando siente algo por una chica? ¿Por qué sentimos un gran deseo de estar con alguien para compartir lo que somos o lo que tenemos? Porque desde el principio Dios se dio cuenta que “no es bueno que el hombre esté solo”. Interesante que fue Dios quien advirtió la soledad de Adán. Adán no se había dado cuenta. En nuestra sociedad, la soledad se ha vuelto una experiencia común, sobre todo entre los solteros. Vivimos en el mundo de las parejas. Es cierto que algunos tienen el don de estar solteros y eso no los afecta. De hecho, existe el don de la soltería, conocido como el don de continencia. Pero eso no es lo común. La verdad es la otra. De modo, pues, que esta situación entre los solteros se envuelve en un manto de soledad y tristeza que oscurece su visión del futuro y de Aquel que en su soberano plan está dirigiendo ese futuro. La única manera como la soledad puede ser buena es si la tomo para estar en comunión con el Señor. Dios te hizo para tener compañerismo. Tu soledad tendrá que ser el tiempo para que escuches de Dios: “No es bueno que el hombre esté solo”.

2. Dios ha hecho provisión para la soledad v. 18b. Y cuando Dios nos ve en esta soledad sentimental nos da la promesa. ¿Cuál promesa? Pues la misma que le dio Adán: “Le haré ayuda idónea para él”. Me encanta el plan que Dios tiene para cada joven. Saben, los sueños que a veces tenemos en relación con el hombre o la mujer que buscamos dista mucho de lo que Dios tiene preparado. Y el asunto es que Dios no solo nos hará el complemento para nuestra soledad, sino que nos dará una “ayuda idónea” para el resto de la vida. Los pensamientos del hombre en el asunto de los sentimientos son muy terrenales y algunas veces hasta temporales. De allí viene la simplicidad en decir “veremos hasta donde llegamos”. O los que se casan pensando que pudiera darse algún fracaso. El asunto es que Dios no patrocina relaciones fracasadas porque desde el principio él pensó en hacerle al hombre la mujer que sería su verdadero complemento. Otra vez, y como ya hemos dicho, el noviazgo es la antesala para el matrimonio. Mientras tanto, lo único que pueda darse entre dos jóvenes es una hermosa amistad, sin derecho y nada más. Joven, no te adelantes al trabajo del cielo. 

DIOS ESPERA QUE TE PREPARES ANTICIPADAMENTE

1. Que tu mente esté ocupada en su obra v. 19. Dios antes de darte la mujer o el hombre espera que tu mente esté ocupada en su obra. Esta es una manera no solo de llenar tu soledad, sino la manera correcta para conocer la sorpresa de Dios respecto a lo que tiene preparado. Y, sobre todo, que estés intelectualmente preparado para el reto que viene a tu vida. ¿No es interesante que Dios antes de darle a Eva a Adán lo puso hacer un gran trabajo que requirió de sus capacidades y habilidades para ponerle nombre a todas las bestias y las aves del cielo? Esto implicó el uso de la inteligencia y la creatividad mental para semejante trabajo. Además de esto, la preparación física, emocional e intelectual será necesaria para estar preparados para ese gran paso. A qué edad se casó Adán, no lo sabemos, pero lo que sí sabemos es que Dios lo hizo listo para asumir esta responsabilidad. Dios trajo a Adán con la primaria, secundaria, universidad y trabajo para entregarlo a Eva. Joven, Dios no espera menos de ti. El noviazgo es cosa seria. Demanda la preparación para el resto del tiempo que vivirán juntos.

DIOS TRABAJA EN QUIEN SERÁ TU PAREJA

1. Poniéndote a descansar en su voluntad v. 21. Este es un texto extraordinario. Lo primero que observo es la total iniciativa divina en este asunto del noviazgo según el diseño de Dios. Una cosa es dormir porque estamos muy cansados, o dormir con alguna anestesia, pero otra muy distinta es dormir por disposición divina. He aquí un asunto importantísimo en lo que respecta conocer la voluntad de Dios acerca del hombre o la mujer con quien me casaré. Por lo general el joven está muy “despierto” en este asunto, en lugar de dormir en la voluntad del Padre. Por andar tan “despiertos” es que muchos jóvenes no se paran en “buscar” a la persona con quien desean tener un noviazgo. Esta sociedad contribuye para eso. Muchos padres tan bien son responsables, pues en lugar de preparar a sus hijos en esto, hasta promueven relaciones previas al mismo matrimonio. Amado joven, no te adelantes al sueño de Dios. Lo que él tiene preparado es mejor de lo que tú estas buscando. Yo tuve que entender la importancia de esto. Cuando estaba en esa búsqueda me di cuenta las veces que me equivoqué. Pero después de descansar en su voluntad y dejar a Dios que me diera a mi esposa, apareció mi amada Carmen con quien cumpliré 40 años de casado este junio 2/2019.

2. Trayéndote a la persona que ha formado v. 20. Le invito a que use su imaginación por un momento. Después que Adán durmió, Dios los despertó y lo llevó al altar donde se daría la boda, por cierto, lleno de muchas flores, plantas y la música era el canto de las aves. De la costilla que le sacó Dios formó la preciosa mujer. Ahora imagínese al mismo Dios trayéndosela y oficiando aquel primer matrimonio, dándoles su bendición. Cuando Dios escoge para nosotros la novia o el novio hay una total paz, seguridad y felicidad permanente.

DIOS TE BENDECIRÁ CON UNA UNIÓN EXCLUSIVA

1. Solos para formar un hogar v. 24. El noviazgo según el diseño del cielo es que termine en un santo matrimonio. La idea de tener muchos noviazgos antes del matrimonio no es divina, es humana. El plan de Dios fue que el hombre y la mujer gozaran de una unión exclusiva, sin interferencia y de completa privacidad. Este es uno de los más santos misterios del matrimonio. “El que se casa, casa quiere” dice el dicho.  Y esto es así porque el primero que no quiere que molesten a la pareja es Dios. Él bendice esa privacidad porque el creo el sexo para que fuera disfrutado en esa condición. La relación sexual debe estar reservada para el momento cuando usted esté suficientemente preparado, maduro, con su trabajo y que tenga que dejar a sus padres porque se unirá su mujer para ser una sola carne. El deseo de Dios en este diseño para el noviazgo es que tú y tu pareja alcancen una unión, no sólo física, sino emocional y espiritual. El sexo fue creado por Dios, por lo tanto, es santo. Ser “una sola carne” es el diseño de Dios para ser disfrutado en un santo matrimonio.

2. Solos sin avergonzarse v. 25. Este texto cierra todo el diseño de Dios para el noviazgo. No está puesto como una añadidura.  Dios quiere que cada pareja viva sin preocupaciones en cuanto a la fidelidad del uno para con el otro; que no haya secretos, ninguna vergüenza de ningún tipo. El reto que debe trazarse cada joven al conocer a su pareja debe ser este: vivir “desnudos” sin tener que avergonzarse. Que la fidelidad sea el distintivo de esa santa relación.  La mejor manera como puedo entender este texto “estar desnudo sin avergonzarse” es de una vida de santidad, con lo que más luchará una pareja. Y la idea de la santidad en una pareja es aquel estado donde ambos optan por mantener los valores morales y espirituales como un estandarte para el resto de sus vidas.

CONCLUSIÓN: Mis apreciados jóvenes nada es más hermoso que encontrar el amor de tu vida, pero que venga de Dios. Adán estaba fascinado por lo que estaba frente a sus ojos y Eva, por consiguiente. Es verdad que se conocieron “en un abrir y cerrar de ojos”, porque ciertamente Adán estaba dormido, pero cuando los dos se vieron, quedaron enamorados y allí estaba el Señor con ellos, celebrando aquella bella unión.  ¿Sabían que cuando permitimos que Dios tome el control de esta área tan importante de tu vida, podemos tener la seguridad de encontrar a la mejor pareja que se pueda imaginar? Mi apreciada joven, tu no tienes que besar un sapo, como el cuento de hadas, para encontrar el príncipe azul.  Dios está trabajando para presentarte al hombre o la mujer que él sabe que será tu ayuda idónea. Por favor, no ayudes a Dios en ese trabajo. No te adelantes. Búscale de rodillas, en plena comunión, en santidad y él te concederá las peticiones de tu corazón. Dios no te dará ni un hombre feo ni una mujer fea. Te dará una ayuda idónea. Eso debe ser lo más importante.

Le invitamos a que escuche nuestro programa: La Palabra Expuesta, en la WUST 1120 AM, Todos los lunes a la 1:00 pm.

Julio Ruiz, es pastor de La Iglesia Bautista, Ambiente de Gracia, ubicada en 5424 Ox Rd. Fairfax Station, VA 22039 (pastorjulioruiz55@gmail.com) 00