Estados Unidos comenzó a fletar vuelos de deportación a la bahía de Guantánamo, Cuba, después de que el presidente Trump ordenara al Ejército estadounidense prepararse para recibir hasta 30.000 personas.

El martes, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza dijo que se realizó el traslado en avión de los primeros diez inmigrantes presos desde la base militar de Fort Bliss, estado de Texas, a la base naval estadounidense en Guantánamo.
Los funcionarios afirman que los reclusos serán alojados en tiendas de campaña rodeadas de cercas y guardias armados.

La organización Refugees International calificó el plan de “gratuitamente cruel, ilegal, costoso y oneroso”, y dijo que el hecho de “establecer un gulag estadounidense en el Caribe en respuesta al desplazamiento forzado en las Américas constituye un punto decadente y vergonzoso en la historia de Estados Unidos”. (Fuente: Democracy Now)